Diferentes monitoreos de medios muestran que las migraciones y las noticias protagonizadas por personas migrantes en general reciben un tratamiento periodístico caracterizado por la desinformación y la reproducción de estereotipos.
La circulación de noticias construidas con base en datos erróneos y prejuicios genera, además, obstáculos en el acceso a derechos.
Para no reproducir estereotipos ni colaborar con procesos de estigmatización es fundamental no usar generalizaciones para explicar un hecho ni atribuir a las personas cualidades o comportamientos por el solo hecho de pertenecer a cierto grupo social.
Aquellas personas que no lograron tramitar su radicación se encuentran en una situación migratoria irregular, pero eso no las convierte en personas ilegales.