La trayectoria de Carlos Fernando Rosenkrantz tiene vínculos con uno de los dos partidos históricos de la Argentina: la Unión Cívica Radical (UCR). Comenzó su carrera como asesor legal en el gobierno de Raúl Alfonsín, a quien siguió ligado una vez finalizada su Presidencia. También acumula una destacada trayectoria académica y se desempeñó muchos años ejerciendo la abogacía. El de juez de la Corte Suprema de Justicia de la Nación fue el primer cargo que ocupó en la Justicia. Rosenkrantz dio sus primeros pasos durante la Presidencia de Alfonsín, como asesor de Carlos Nino, quien tenía a cargo el Consejo para la Consolidación de la Democracia, dependiente de la Presidencia de la Nación. Una década más tarde, fue asesor de Alfonsín en la Convención para la Reforma Constitucional de 1994. También fue asesor en la Convención Constituyente que sancionó en 1996 la Constitución de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Nació en la Ciudad de Buenos Aires en octubre de 1958 y se recibió de abogado en la Universidad de Buenos Aires (UBA) en 1983. Entre 1987 y 1989 hizo un master y un doctorado en Derecho en la Universidad de Yale. Fue profesor de Derecho en la UBA, en la Universidad Nacional de Córdoba y en al menos cinco universidades del extranjero. Hasta su nombramiento en la Corte fue rector de la Universidad de San Andrés (Udesa). En 1992 fundó un estudio jurídico junto con su ex socio, el abogado Gabriel Bouzat, quien también integró los equipos de Nino durante la Presidencia de Alfonsín. Al igual que Bouzat, Rosenkrantz es especialista en Defensa de la Competencia, por lo que fue letrado de cientos de empresas, entre otras, del Grupo Clarín y de Farmacity y Pegasus, las dos últimas pertenecientes al vicejefe de Gabinete, Mario Quintana. Además de representar a numerosas empresas, su ex estudio patrocinó a gobiernos provinciales. A fines de 2015, pocas semanas antes de su nombramiento en comisión, la Corte falló en contra de la detracción que la ANSES hacía del 15% de impuestos coparticipables de tres provincias, entre ellas, Santa Fe, defendida ante el máximo tribunal por el estudio de Rosenkrantz y Bouzat. Tiene dos hijos y está casado con Agustina Cavanagh, quien dirige la fundación Cimientos, una organización vinculada con la educación. En su declaración jurada de 2015 reportó un patrimonio de $ 11,3 millones y mencionó haber formado parte de 14 sociedades en los últimos ocho años. Fue, además, fundador de la Asociación por los Derechos Civiles (ADC), de la Asociación de Defensa de la Competencia y miembro de la Asociación de Derecho Comparado. Su candidatura a la Corte también recibió 13 impugnaciones, algunas compartidas con Horacio Rosatti. Apuntaron al modo de designación en comisión y a algunas de sus opiniones personales, por ejemplo, respecto al rango constitucional de los derechos económicos y sociales y a la validez local de las normas del derecho internacional.