Hasta su llegada en 2011 a la Cámara Federal de Casación Penal, Ana María Figueroa nunca había trabajado en el Poder Judicial. Llevaba más de 30 años ejerciendo la abogacía de forma independiente y dictando clases en la Universidad Nacional de Rosario (UNR) y en otras instituciones en el exterior. Nació el 9 de agosto de 1948 en la Ciudad de Buenos Aires. Pero se recibió de abogada en la Universidad Nacional del Litoral y en 1975 fundó su propio estudio jurídico, Ana María Figueroa y Asociados, radicado en la ciudad de Rosario. Desde su estudio llevó adelante varias causas relacionadas con los Derechos Humanos en los tribunales rosarinos. Hoy el estudio está a cargo de sus hijos. No es esa su única relación con los Derechos Humanos: es el tema de sus dos tesis doctorales (UNR y UNL); trabajó como coordinadora del área jurídica del Archivo Nacional de la Memoria, en la órbita de la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación y en la actualidad dirige el curso “Derecho Humanos” de la Escuela Judicial del Consejo de la Magistratura. En 1986 fue designada por concurso profesora titular de Derecho Constitucional en la UNR y actualmente continúa dictando clases en esta universidad. A través del Concurso N°197 accedió al cargo de jueza en la Cámara Nacional de Casación Penal en 2011, donde ocupa la Sala I. En diciembre de 2014 fue designada Presidente de la Cámara por los votos de Mariano Borinsky, Gustavo Hornos, Eduardo Riggi, Liliana Catucci, Luis María Cabral.