No tan lejos de la meta

El porcentaje de alumnos que asiste a la escuela secundaria es un indicador según el cual la Argentina puede ser incluida en el grupo de países que han logrado importantes mejoras en términos de acceso de amplios sectores a este nivel educativo. A dicha conclusión llega el último informe de Flacso sobre educación secundaria, de reciente difusión, y que recoge estadísticas hasta 2009.

Ese año, el país registró un 84,5% de tasa neta de escolarización secundaria en el área urbana, mientras que la media urbana de los 16 países de la región con respecto a la cobertura y acceso al nivel secundario fue del 65,5 por ciento. Esto le permitió a la Argentina ubicarse dentro de quintil de países (Brasil, Chile, Costa Rica, México, Panamá, Perú y Uruguay) que han cumplido o están próximos a cumplir la meta educativa a la que adhirieron todas las naciones de la región iberoamericana -en el marco de la “generación de los Bicentenarios”-, conocidas como Metas Educativas 2021.

Según dicho documento, “para el ciclo básico la meta es escolarizar entre el 60% y el 95% en 2015 y entre el 70% y el 100% en 2021”, mientras que “para el ciclo superior de la secundaria, la meta es situar las tasas de culminación del nivel entre el 40% y el 70% en 2015 y entre el 60% y el 90% en 2021”.

Si se observa el gráfico anterior, se puede ver que los países que tienen tasas globales de escolarización más altas lograron también una mayor inclusión de los sectores más desfavorecidos. Quienes no lo hicieron (Guatemala, Honduras, Nicaragua o El Salvador) aún tienen altos niveles de desigualdad.

Otros de los índices en el que la Argentina “mide bien” es el porcentaje de jóvenes entre 12 y 17 años que se encuentran desempleados o abandonaron la escuela. Según el informe “Adolescentes que no estudian ni trabajan en América Latina”, publicado en mayo de 2010, en los países menos desarrollados, nuevamente, América Central supera el 10%; en otros se ubica entre el 6% y el 9% (Paraguay, Panamá, Colombia, Costa Rica, Ecuador y México) y en Bolivia, Chile, Argentina, Brasil y Republica Dominicana es apenas del 2 al 5 por ciento.