Apertura de sesiones: de qué habló (y de qué no) Alberto Fernández durante el discurso del 1º de marzo

El presidente de la Nación, Alberto Fernández, abrió las sesiones ordinarias del Congreso el 1ª de marzo último, la cuarta y última apertura de esta gestión, la cual aprovechó para realizar un balance de la misma.

En el primer tercio de su discurso de 2 horas enfocó su exposición hacia los objetivos conseguidos en materia económica durante los 3 años de su presidencia, acaparando esta temática casi el 20% de su alocución -aunque con menos presencia que en 2022-.

 

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Uno de los primeros puntos que destacó fueron las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional y la renegociación de la deuda que contrajo el gobierno de Mauricio Macri.

También se refirió a los índices de recuperación y crecimiento del país en los últimos años en los sectores más destacados de la industria y los detalles de una balanza comercial positiva, aunque reclamando mayor distribución de las riquezas.

Más tiempo al eje justicia y seguridad y menos a trabajo y protección social

El empleo, las jubilaciones y los programas de asistencia social del Estado también ocuparon un lugar menos preponderante que en el año anterior. Según el análisis de Chequeado, le dedicó a la temática trabajo solo el 1,59% del tiempo y a protección social el 5,48% (en 2022 fue 7% y 5,9%, respectivamente).

El plano judicial fue el segundo eje clave que destacó Fernández con referencias en el cierre de su discurso a los fallos de la Corte Suprema por la discusión de la coparticipación entre el gobierno nacional y el porteño, la composición del Consejo de la Magistratura, y a la “persecución” contra la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.

En materia energética uno de los puntos que remarcó fue la construcción del Gasoducto Néstor Kirchner y su vínculo con la futura producción de gas y petróleo.

En materia de salud, reivindicó el accionar del Estado en el marco de la pandemia a partir del reforzamiento del sistema, el acceso a las vacunas y la mejora en tasas sanitarias a partir de la mención de distintos programas nacionales.

Ciencia y educación fue otro de los ejes (aunque le dedicó menos tiempo que al año pasado) donde repasó inversiones y logros obtenidos en cada uno de los rubros.

También destacó el rol de Argentina en el plano internacional, específicamente en los encuentros multilaterales como la CELAC, el Mercosur, la Cumbre de las Américas, el G 20 y el G7, como así también el vínculo con Brasil con Ignacio Lula da Silva como nuevo presidente del país limítrofe.

Respecto al cambio climático resaltó la creación de más áreas protegidas, el fortalecimiento del Servicio Nacional de Manejo del Fuego y la exigencia de avanzar con leyes fundamentales en este aspecto como la Ley de Humedales, proyecto al que ya había hecho referencia en 2022.

Lo que no habló: aborto y narcotráfico

A lo largo de las 2 horas de exposición, no se centró en la propuesta de nuevas leyes para el año legislativo, como sí lo había hecho en 2022 cuando anunció que enviaría al Congreso  12 proyectos de ley, como contamos en esta nota.

Únicamente en una oportunidad se refirió a “la invasión militar de la federación de Rusia sobre Ucrania” para referirse a las consecuencias a la economía mundial. 

Entre los temas que Fernández no abordó, están el aborto -aprobado en diciembre de 2020- y el narcotráfico (sólo hizo una breve mención al crimen organizado). Tampoco hizo mención a la obtención de la Copa del Mundo por parte del seleccionado argentino.