¿Por qué preocupa que más del 60% de los testeos en la villa 31 sean positivos por coronavirus?

Hay 519 casos confirmados de coronavirus en los barrios populares de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, es decir el 29% de los casos totales del distrito porteño, según informó el Ministerio de Salud de la Nación en el reporte diario del 10 de mayo. Carla Vizzotti, secretaria de Acceso a la Salud, explicó que en el barrio 1-11-14 se detectaron 120 casos y 373, en el Barrio Padre Mugica (ex villa 31), con un 67% de positividad en los testeos de este último. 

El resto de los casos positivos detectados en barrios populares de la Ciudad fueron 7, en el Barrio 21-24; 7, en Ciudad Oculta; 3, en Barrio 20; 3,  en el Barrio Ramón Carrillo; 2, en Rodrigo Bueno; 2, en Barrio Fátima, 1, en el Barrio Inta y otro, en el Barrio Mitre, según lo informado por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, a cargo de Horacio Rodríguez Larreta.

El último viernes, al extender la cuarentena en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), la zona más afectada del país por COVID-19, el presidente Alberto Fernández dijo: “Ayer y hoy el Gobierno nacional estuvo haciendo testeos en los barrios donde se ha manifestado esta mayor cantidad de casos de la Ciudad de Buenos Aires y los hemos hecho en cantidad significativa como para ver exactamente cómo estábamos y la verdad los resultados son preocupantes. Me contaban que en la 1-11-14 (el dato en realidad es de la ex villa 31) da 60-40, o sea, el 60% da que está infectado”. Esto se refiere a la cantidad de resultados positivos sobre los casos testeados, no al total de habitantes de estos barrios. 

Retiro (donde se encuentra el Barrio Padre Mugica) tiene una tasa de casos confirmados por 100 mil habitantes de 447,8, cifra que casi triplica al segundo barrio con mayor cantidad de casos, que es Flores (donde se encuentran el barrio 1-11-14 y varios geriátricos que reportaron casos) con 15% de los casos de la Ciudad y una tasa de 145 cada 100 mil habitantes. La tasa de casos confirmados cada 100 mil habitantes ayuda a entender la magnitud del problema, dado que hay barrios que pueden tener más casos, pero al tener mayor población no están tan concentrados.

Hoy en la Argentina se considera caso  sospechoso a quien cumpla con una serie de condiciones, como tener fiebre, un síntoma respiratorio, antecedentes de viaje o contacto con un persona contagiada, entre otros. Con este criterio, en la Ciudad se le hicieron exámenes a 13.946 personas, de las cuales 1.649 dieron positivo, al 8 de mayo, según el último Boletín Epidemiológico Semanal. Es decir que 11,8% de las casos fueron positivos. 

En el barrio Mugica, entre las personas que fueron testeadas, el 67% dio resultado positivo. Las personas a las que se les hizo el examen fueron exclusivamente quienes tenían síntomas o declararon haber tenido  contacto con algún caso positivo. A diferencia de lo que ocurre en el resto de la Ciudad, las autoridades sanitarias fueron a buscar activamente al barrio a posibles personas contagiadas, dentro del Dispositivo Estratégico de Testeo para Coronavirus en Territorio de Argentina (DETeCTAr). En ese barrio se entrevistó a 1.211 personas, se realizaron 119 tests diagnósticos con 64 casos positivos y 22 pendientes de análisis”, indica el reporte del 8 de mayo, pero falta el detalle de los test al día de hoy. 

Este operativo fue iniciado por el Gobierno nacional el 5 de mayo, con el objetivo de testear, en una primera etapa, a personas que cumplían con la definición de caso sospechoso que vivan en dos barrios populares de la zona más afectada del país por COVID-19: el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA). Los barrios seleccionados fueron Mugica en la Ciudad y La Paz, en el Municipio bonaerense de Quilmes. En el caso de Quilmes, se hicieron sólo 12 exámenes a personas que cumplían con la definición de caso sospechoso y uno resultó positivo, informó el Gobierno de la Nación.

La secretaria de Acceso a la Salud también anunció que a partir del lunes 11 de mayo el programa se extenderá al barrio porteño 1-11-14 y explicó que, una vez encontrado un caso sospechoso, se procederá a realizar la prueba.

En todos los casos, se trata de pruebas de reacción en cadena de polimerasa (PCR), los exámenes más fiables para saber si una persona tiene el virus. Son exámenes distintos a los de las pruebas rápidas. Estas últimas evalúan la presencia de anticuerpos y tienen menor grado de certeza, y son las que se utilizaron semanas atrás en estaciones de transporte público porteñas, como Retiro y Constitución. 

Como explicó Chequeado en una nota anterior, de acuerdo con el último informe de “indicadores de condiciones de vida” del INDEC, el 4,7% de las personas del país viven en condiciones de hacinamiento crítico, es decir que habitan con más de 3 personas por cuarto. Este porcentaje representa 1.315.000 de personas en los 31 aglomerados urbanos considerados en la Encuesta Permanente de Hogares (EPH).

Por su parte, 848.000 personas de estos centros urbanos sólo tienen acceso al agua fuera de la vivienda, es decir que en sus hogares no tienen agua corriente. Esto dificulta el cumplimiento de las recomendaciones del Ministerio de Salud de la Nación en cuanto al higiene de las manos y del hogar.

Con el foco puesto en las zonas más vulnerables, el Gobierno porteño estableció una campaña de concientización para prevenir contagios a través de los referentes de cooperativas barriales y las Juntas Vecinales, sms, llamados telefónicos, radios comunitarias y a través de instituciones religiosas; se aplicó un refuerzo en comedores, merenderos y centros de primera infancia en donde se retira la comida por turnos para evitar aglomeraciones; se realizan operativos de limpieza y desinfección; y se intensificó un programa especial para el cuidado de adultos mayores de 65 años.

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