CFK: “El Gobierno ya lleva importado un 57% más de petróleo del total importado entre los años 2008 y 2015”

La senadora y ex presidenta de la Nación Cristina Fernández de Kirchner se refirió en su cuenta de Facebook a la gestión en materia energética del Gobierno nacional y aseguró: “Los que venían a solucionar una crisis energética inexistente ya llevan importado un 57% más de petróleo del total importado entre los años 2008 y 2015”. ¿Es así? ¿Qué dicen los datos?

La ex jefa de Estado se basó en un informe que cita datos oficiales del Observatorio de la Energía, Tecnología e Infraestructura para el Desarrollo (OETEC), que dirige el bioquímico de la UBA y ex asesor del diputado nacional Julio De Vido, Federico Bernal.

Entre 2008 y 2015, es decir durante el gobierno de Fernández de Kirchner, se importaron 1,5 millones de m3 de petróleo, mientras que entre 2016 y enero de 2018 (último dato disponible), se compraron desde el exterior 2,4 millones de m3 de crudo, de acuerdo con datos del Ministerio de Energía y Minería de la Nación. Esto implica que la importación de este combustible tuvo un aumento del 57% entre el acumulado de la gestión anterior y lo que que va de la gestión de Cambiemos.

Sin embargo, los datos de 2015 del Ministerio están cuestionados. “En 2015, el Gobierno acordó con las petroleras un precio sostén para el crudo, y la diferencia entre este precio y el crudo importado pasó a ser muy importante. Así las refinerías incrementaron sus importaciones en lugar de comprar crudo nacional caro y procesarlo”, explicó a Chequeado José Sureda, ex secretario de Recursos Hidrocarburíferos de la Nación entre diciembre de 2015 y 2017.

En este sentido, el ex funcionario agregó: “La cifra SESCO de 2015 [N. de R.: el sistema estadístico que utiliza el Ministerio de Energía] es una suerte de ‘dibujo’. Tiene el cuestionable mérito de servir para frenar las quejas de los gobernadores de Chubut y Neuquén por la caída de la actividad”. Sureda renunció en abril de 2017 a su cargo dentro del Ministerio y publicó una dura carta con críticas a la gestión del actual ministro Juan José Aranguren. Así, si se consideran los datos de la Aduana, el aumento sería de alrededor del 10 por ciento.

Al margen de las diferencias entre las dos mediciones oficiales, la relación que hizo la ex presidenta entre el aumento de la importación de petróleo y la generación de una crisis energética es engañosa.

Desde 1998, la principal fuente de energía del país es el gas, que se destina tanto al consumo residencial como al industrial y también a la generación de energía eléctrica. La segunda fuente de energía es el petróleo: en 2015, este combustible representaba un poco más de la mitad de las cantidades disponibles de gas, por lo que un aumento en las importaciones de gas sería más representativo en la balanza comercial energética y, por ende, en una crisis.

Si se realiza la misma comparación que hizo Fernández de Kirchner pero con este combustible, los datos oficiales muestran que en los dos años de Cambiemos se importó un 58% menos de Gas Natural que entre 2008 y 2015. En relación al Gas Natural Licuado y el Gas Oil, en los últimos dos años se importó un 66 y un 61% menos que entre 2010 y 2015, respectivamente (no hay datos disponibles de 2008 y 2009).

En este sentido, la balanza comercial energética, es decir la diferencia entre las importaciones y las exportaciones de combustibles, empeoró en 2017 en relación al año anterior pero el déficit medido en dólares es menor al de 2013, 2014 y 2015. Este análisis surge de un informe del Instituto Argentino de Energía “Gral. Mosconi”, que dirige el ex secretario de Energía durante la Presidencia de Raúl Alfonsín, Jorge Lapeña.

Víctor Bronstein, director del Instituto del Gas y Petróleo de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Buenos Aires (UBA), relativizó la afirmación de la ex presidenta y señaló: “El funcionamiento de la industria petrolera de un país no depende únicamente de la política energética. Hay otras dimensiones que tienen que analizarse para entender su dinámica y sus resultados: la cuestión geológica que define los recursos que posee un país, la tecnológica y el contexto internacional”.

Es que, entre otros factores, el aumento de la importación de petróleo está relacionado con una baja en la producción nacional -que viene en continuo descenso desde 1998-, y “se enmarca en un contexto de baja inversión en exploración de riesgo en las áreas convencionales”, sostiene el IAE en su informe, y de un precio internacional del barril de petróleo que luego de una caída (bajó de US$140 en 2008 a US$30 en 2016) se está recuperando (actualmente se ubica en US$65).

“El problema es por qué se cae la producción en la Argentina, y en parte es porque el incentivo a exportar a un precio más bajo como el actual frente al de años anteriores es mucho menor”, señaló a este medio Roberto Carnicer, ingeniero civil y director de la Diplomatura en la Industria de Petróleo y Gas de la Universidad Austral.

Por último, vale la pena señalar que, a pesar del aumento de la importación, el crudo que proviene del exterior representa un porcentaje bajo del total que se refina para el consumo en el país. Los datos oficiales del cuarto trimestre de 2017 indican que el petróleo importado representa un 6% del total.

Actualización 26/03/2018: después de la publicación de este chequeo, desde el Ministerio de Energía y Minería de la Nación se comunicaron con Chequeado para informar que se habían modificado los datos oficiales publicados en el portal de datos abiertos de la cartera que dirige Juan José Aranguren.

“En relación a las importaciones de crudo 2008-2015 informadas en el sistema SESCO y publicados en datos.minem.gob.ar, la importación efectiva de ese período totalizó los 2,2 millones de m3. La diferencia con la cifra de 1,5 millones de m3 informada anteriormente, que puede constatarse con la información registrada por la Dirección General de Aduanas, se explica por la falta de carga de las importaciones de Enarsa durante el año 2015, omisión que ha sido subsanada”, detallaron desde el área de Comunicación a este medio.

De esta manera, el aumento de la importación de petróleo entre los períodos 2008-2015 y 2016-2018 se ubica alrededor del 10 por ciento.

Como los dichos de Cristina Fernández de Kirchner coinciden parcialmente con ciertos datos oficiales disponibles en ese momento y muestran un aumento (aunque menor al señalado por la ex presidenta), no se modificó la calificación de ENGAÑOSO de este chequeo.