De Gennaro: “Tigre tiene el 60% del territorio continental transformado en barrios cerrados”

“Tigre tiene el 60% del territorio continental transformado en barrios cerrados. Hay 450 mil habitantes y sólo 45 mil viven en esos barrios”, expresó el diputado de Unidad Popular, Víctor De Gennaro, al ser consultado sobre la candidatura del intendente de Tigre, Sergio Massa, como diputado nacional por la Provincia.

El Municipio posee un gran porcentaje de barrios privados, pero éste es menor al mencionado por el diputado.

El Municipio de Tigre tiene una superficie de 386 km2 y, de acuerdo con el Censo 2010, una población de 376.381 habitantes. Del total de su territorio, la superficie continental representa menos de la mitad, 147 km2, y el resto lo conforman sus islas.

“Aproximadamente un 40% del territorio continental de Tigre está ocupado por urbanizaciones cerradas”, consideró la arquitecta Sonia Vidal-Koppman, investigadora del Conicet y docente-investigadora en el Centro de Información Metropolitana (CIM) de la FADU de la Universidad de Buenos Aires. “Estas urbanizaciones ocupan la casi totalidad de los humedales, lo que provoca un importante impacto ambiental ocasionado”, agregó.

El mismo dato está presente en un trabajo de Vidal-Koppman, en base a información del CIM, que utiliza la base catastral de los municipios. Allí, la investigadora mencionaba a Pilar como el Municipio que poseía mayor superficie de emprendimientos cerrados, seguido en segundo lugar por Tigre. El ejemplo paradigmático es Nordelta, con 1.300 hectáreas, y una población programada de 130 mil personas. El informe, sin embargo, menciona que para ese momento los residentes no superaban los 5 mil.

El Municipio no presenta esa información y, hasta el momento de la publicación de la nota, no había respondido los pedidos de Chequeado.com.

La expansión de barrios privados en Tigre “fue incentivada por las mejoras en la accesibilidad vial de la autopista Acceso Norte y por la dinamización del mercado inmobiliario, en el contexto general de mediados de los años noventa”, junto con la convergencia de intereses (económicos, políticos, entre otros), “públicos y privados, para transformar una gran cantidad de tierras consideradas ‘improductivas’ o ‘baldías’ en un formidable negocio urbano”, sostiene un estudio de los investigadores del CONICET Diego Ríos y Pedro Pírez.

“Los barrios cerrados tienen una densidad de población menor que las ciudades y son poco eficientes en términos de energía y transporte”, expresó Raúl Fernández Wagner, profesor de urbanismo en la Universidad Nacional de General Sarmiento. Además, consideró que otra consecuencia de los countries es el crecimiento artificial del valor del suelo, que repercute en el acceso a la vivienda de otros sectores sociales.

En esta misma línea, Vidal-Koppman destacó que las urbanizaciones cerradas “representan un sobreconsumo de suelo destinado a conjuntos residenciales de muy baja densidad lo que implica a veces la afectación de áreas que podrían destinarse a otros usos más productivos, o bien, la afectación de zonas de alto valor paisajístico o recreativo”.

“Al igual que en varias ciudades del mundo, en la Argentina estas urbanizaciones proliferaron en los años noventa”, según un informe de Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD). El trabajo considera que un tercio de los barrios cerrados del AMBA se ubica en el segundo cordón, donde está Tigre, aunque agrega que “recientemente saturada la zona norte, las urbanizaciones también se establecen, aunque en una proporción aún menor, en el Oeste, y el Sur”.

Si se tienen en cuenta los nuevos desarrollos que se construyeron a partir de 2007, la superficie ascendería a 400 km2 (40.000 hectáreas). Para más información, ver: “Según Lozano, los barrios cerrados ocupan el doble de superficie que la Ciudad”.

De Gennaro retomó con su declaración lo dicho por el concejal de Tigre Luis Cancelo, perteneciente también al frente “PODEMOS”. Al ser consultado por Chequeado.com, Cancelo informó que el relevamiento está en marcha y que todavía no se encuentran disponibles las conclusiones.

Este chequeo contó con la colaboración de Matías Cárdenas.