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Esta nota tiene más de un año

Elecciones en EE.UU.: un chequeo a Trump sobre la investigación del FBI a Clinton

A sólo una semana de las elecciones en los Estados Unidos, la intención de voto de la candidata por el Partido Demócrata, Hillary Clinton, se vio afectada por el anuncio de la reapertura de la investigación del FBI por el uso indebido de su mail cuando era secretaria de Estado de la gestión de Barack Obama entre 2009 y 2013. De acuerdo con una encuesta del diario The Washington Post junto con la cadena ABC, la brecha entre ambos pasó de cuatro puntos antes del anuncio a sólo un punto en la actualidad.

En este contexto, el candidato republicano, Donald Trump, dijo: “Una de las personas más cercanas a Hillary Clinton, que tiene lazos de hace tiempo con ella y su esposo, (…) donó más de US$675 mil a la campaña de la esposa de un funcionario de alto rango del FBI, quien supervisó la investigación sobre el servidor de correo electrónico ilegal de Clinton”.

Según el sitio estadounidense Politifact, la afirmación de Trump tiene un gran error: las fechas no coinciden.

En 2015, la pediatra Jill McCabe fue reclutada por el gobernador Terry McAuliffe para postularse por el Partido Demócrata a uno de los 40 escaños para el Senado por el Estado de Virginia, controlado por republicanos. McAuliffe había co-presidido la campaña de Bill Clinton en 1996, y presidió la fallida campaña de Hillary Clinton en 2008.

Según el diario Wall Street Journal, que publicó la noticia, McAuliffe y los otros demócratas de Virginia se reunieron con Jill McCabe y su esposo, Andrew, el 7 de marzo 2015, con el objetivo de convencer a la doctora a postularse para retomar el control del Senado.

En aquel momento, Andrew McCabe era el director asistente en la oficina del FBI en Washington y había centrado gran parte de su carrera en la lucha contra el terrorismo.

El FBI anunció que McCabe “consultó con las oficinas centrales del FBI y los agentes de ética para asegurarse de que no hubiera conflicto de interés en caso de que la doctora McCabe decidiera avanzar con su postulación”.

En base a ese consejo, según el Bureau, cuando la doctora McCabe decidió postularse “McCabe y los abogados del FBI implementaron un sistema para que él se excusara de todos los asuntos investigativos del FBI que involucraran a políticos de Virginia, un proceso que siguieron durante el resto de la campaña. Durante la campaña, él no desempeñó ningún papel, no participó en ningún evento, no ayudó con el financiamiento y no ofreció su apoyo”.

La noticia de que Clinton había utilizado su cuenta privada de mail en violación a los requerimientos federales salió a la luz el 2 de marzo de 2015. McCabe anunció su candidatura diez días después.

En julio de 2015, el FBI empezó su investigación sobre el uso del servidor privado de Clinton en su hogar en Nueva York. Ese mismo mes, McCabe fue promovido a director Adjunto, tercero al mando del FBI. Él se mudó a la sede central del FBI en septiembre.

No sorprende que ambos, McAuliffe -a través de su comité de acción política (PAC, por sus siglas en inglés) para el financiamiento de campañas- y el Partido Demócrata del Estado de Virginia donaran a la campaña de la doctora McCabe.

El 1, el 27 y el 29 de octubre, el PAC de McAuliffe donó un total de $450 mil dólares a la campaña de la doctora McCabe (además de US$17 mil que se habían donado con anterioridad). El Partido Demócrata del Estado de Virginia gastó entre el 30 de septiembre y el 22 de octubre un total de US$207.788 en la campaña de McCabe. Ese total representa el 40% de los US$1,7 millones gastados en la campaña.

Dos demócratas que se postularon para el Senado, Jeremy Pike y Dan Gecker, recibieron montos mayores del PAC de McAuliffe.

En noviembre McCabe perdió la carrera por el Senado. El 1 de febrero de 2016, tres meses después de la derrota de su esposa, Andrew McCabe fue nombrado como director Adjunto del FBI. En su declaración al Wall Street Journal, el FBI declaró que esta era la primera vez que McCabe tenía alguna supervisión en la investigación de Clinton. “Unos meses después del fin de la campaña, McCabe fue promovido a director Adjunto, donde, desde su posición, por primera vez empezó a tener más injerencia en la investigación”, señalaron.

Pero es posible que el error más grande de la acusación de Trump sea su afirmación de que McCabe estaba a cargo de la decisión de acusar a Clinton.

Fue el actual director del FBI, James Comey, no McCabe, quien tomó la decisión de recomendar que el Departamento de Justicia no presentara cargos contra Clinton. Comey explicó su decisión varias veces bajo juramento.

Finalmente, todavía no hay evidencia de que Clinton o su campaña tuvieran conexiones con estas contribuciones ni que tuvieran conocimiento de ellas (las personas de la campaña de Trump no han contestado las consultas de PolitiFact). Trump simplemente declaró que el dinero vino “esencialmente de Hillary Clinton” y que “Hillary sabía que el dinero fue pagado”.

La conclusión

Entonces, Trump tiene razón en que uno de los aliados de Clinton donó a la candidata cuyo marido era un oficial del FBI. Pero no hay concordancia entre los tiempos, y tampoco las acusaciones de Trump se confirman en la investigación.

En el momento de la donación electoral, el marido de la candidata no participaba directamente en la investigación de Hillary Clinton, según el FBI, que argumenta que la elección de su esposa como candidata ya había sido decidida tres meses antes. Además, la decisión de no acusar a Clinton fue una recomendación del director del FBI.

La declaración de Trump contiene poco de verdad pero ignora datos críticos que pueden dar otra impresión de la situación. Por eso, la evaluamos como mayormente falsa.

Ver el chequeo completo en inglés acá.

Traducción: Raya Balabanova

Fecha de publicación original: 31/10/2016

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