Javier Milei y su promesa a 2 años como presidente: “Vamos a terminar con el cáncer de la inflación”

Durante el debate de la segunda vuelta presidencial de 2023, Javier Milei (La Libertad Avanza), entonces candidato a presidente de la Nación, prometió: “Vamos a terminar con el cáncer de la inflación”.

A 2 años como presidente, la promesa se encuentra “en proceso, adelantada”. Si bien Milei no especificó metas ni plazos específicos, la inflación disminuyó durante 2024 y 2025. 

Para los especialistas, la desaceleración inflacionaria se explica por el ajuste fiscal y monetario aplicado por el Gobierno, aunque advierten que la batalla no está ganada y que el proceso de estabilización tuvo costos en la actividad económica.

Según la metodología de Chequeado, una promesa se encuentra “en proceso, adelantada” cuando “se tomaron parte de las medidas necesarias y se trabajó para lograr la promesa, aunque todavía no está cumplida”.

Qué pasó con la inflación en 22 meses del gobierno de Milei

Antes de que La Libertad Avanza asumiera la presidencia, la inflación de noviembre de 2023 había sido del 12,8% y la variación interanual del 160,9%. En agosto de ese año la inflación fue del 12,4% y se mantuvo en 2 dígitos, con excepción de octubre, según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC). 

En todo el período de Alberto Fernández (Frente de Todos) la inflación acumulada fue del 930,4% si se analiza desde diciembre de 2019 hasta noviembre de 2023.

Milei asumió la presidencia el 10 de diciembre y dispuso una devaluación del tipo de cambio oficial de $ 366 a $ 800. La inflación de diciembre fue del 25,5%, el valor mensual más alto en 32 años, y el año cerró con un incremento anual del 211,4%.

Sin embargo, en los meses siguientes la inflación comenzó a desacelerarse. En abril de 2024, el valor mensual fue de un dígito por primera vez en el año, al ubicarse en 8,8%. 

Después de 18 meses, en octubre de 2025 (último dato disponible) el índice de precios fue de 2,3%. Con este registro, la inflación acumuló un alza del 24,8% en lo que va de 2025, comparada con el 107% del mismo período en 2023.

¿Por qué bajó la inflación en Argentina y qué consecuencias tiene según los especialistas?

El economista Camilo Tiscornia, director de C&T consultores, indicó a Chequeado que “el gobierno ha cumplido bastante bien” esta promesa. 

Y agregó: “Los países más ordenados pueden tener 2%, 3% o 4% en un año. Eso quiere decir que la batalla no está ganada, pero definitivamente creo que estamos en un buen camino”.

Emiliano Libman, economista e investigador del think tank Fundar -presidido por el matemático Sebastián Ceria-, señaló a este medio que “la desinflación en los 2 primeros años avanzó bastante, quizás más de lo que muchos esperaban”. Sin embargo, coincidió con Tiscornia en que todavía la meta no fue alcanzada.

“Es mucho más fácil bajar la inflación desde los niveles del 100% o 200% anual al 20% que llevarla al 5% desde el 20% o el 30%, en términos de cuánto tiempo te dura y de qué costos tenés que pagar”, explicó.

En ese sentido, Tiscornia destacó: “El proceso del fin de la inflación puede tener en el corto plazo costos, sobre todo en actividad económica, desempleo y pérdida del poder adquisitivo, aunque en el largo plazo es mejor tener una inflación baja”.

Chequeado consultó al Ministerio de Economía de la Nación sobre la meta de inflación que se propone alcanzar el Gobierno y cómo evalúan el impacto de este proceso, pero no obtuvo respuestas hasta la publicación de esta nota. 

Respecto de los costos del proceso de estabilización, Libman señaló que “se ven en una destrucción de unos 270 mil puestos de trabajo registrados, sobre todo en la industria, y un proceso de crecimiento de sectores que no son empleo intensivos, como la minería y la energía”. 

Por lo tanto, la afirmación de Milei se encuentra “en proceso, adelantada”. Si bien el presidente no especificó metas ni plazos de cómo sería la reducción, la inflación disminuyó durante 2024 y 2025. 

EN PROCESO, ADELANTADA: se tomaron parte de las medidas necesarias y se trabajó para lograr la promesa, aunque todavía no está cumplida.