Javier Milei y su promesa a un año como presidente: “Mejorar la estructura edilicia hospitalaria”

Durante la campaña electoral de 2023, Javier Milei prometió como candidato de La Libertad Avanza “mejorar la estructura edilicia hospitalaria”.

A un año de haber asumido como presidente, esta promesa se encuentra “incumplida”. Según datos oficiales, en 2024 se destinó un 77% menos de fondos para la construcción y mejoras edilicias de hospitales que en 2023, último año de Alberto Fernández (Frente de Todos). 

Tampoco hay reportes de nuevas obras públicas en hospitales con el financiamiento del Estado nacional, y las que están vigentes no cuentan con mucho avance, según pudo constatar Chequeado.

Según la metodología de Chequeado, una promesa está “incumplida” cuando “tenía un plazo establecido que no se cumplió o los resultados muestran que la situación avanzó en la dirección contraria a lo previsto”.

Menos fondos para los hospitales en la gestión de Javier Milei

En febrero de 2024, el Ministerio de Economía aseguró que el gobierno garantizaría “las asignaciones para los hospitales nacionales”, y que se sostendría “con normalidad el envío de los fondos destinados a insumos, salarios del personal, obras de infraestructura, entre otros ítems incluidos en el presupuesto nacional”.

“Es difícil ubicar en el presupuesto los fondos específicos para hospitales, porque la Nación tiene pocos a cargo. Pero sí se pueden mirar 2 cosas: por un lado, lo que tiene que ver con construcciones y equipamiento; y, por el otro, las transferencias de capital, que son las que se hacen a provincias y municipios”, explicó a Chequeado Rafael Flores, economista de la Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública (ASAP).

Según los datos de ejecución presupuestaria, entre los primeros 11 meses de 2023 -último año de Alberto Fernández (Frente de Todos)- y los primeros 11 meses de 2024 los fondos para la construcción y obras de hospitales se redujeron un 77% en términos reales, es decir, descontando la inflación.

Para esto, se tuvieron en cuenta los gastos destinados a:

-El Hospital Nacional en Red Especializado en Salud Mental y Adicciones “Licenciada Laura Bonaparte”;
-El Hospital Nacional “Dr. Baldomero Sommer”;
-El Hospital Nacional “Prof. Alejandro A. Posadas”;
-El Hospital Nacional y Comunidad ‘Dr. Ramón Carrillo’,
-Y los fondos de la Secretaría de Obras Públicas y del Ministerio de Salud para obras en hospitales.

La gestión y el presupuesto de estos hospitales es 100% nacional.

En el análisis también está incluido otro grupo de hospitales cuyo financiamiento es de un esquema mixto entre la Nación, las provincias y/o los municipios, como es el caso del Garrahan, financiado en un 80% por el Estado nacional y en un 20% por el Gobierno porteño.

La baja de la inversión no sorprende entre los especialistas consultados. “Va en la línea de reducción del gasto público como sea”, aseguró a Chequeado Adolfo Rubinstein, ex ministro de Salud durante la gestión de Mauricio Macri (Cambiemos).

Santiago Spadafora, director de la Especialización en Administración Hospitalaria de la Universidad ISalud, fundada por el ex ministro de Salud Ginés González García, señaló: “En los hospitales nacionales -por ejemplo, el Posadas- y en los que tienen estructura donde el Estado nacional es financiador -como el Garrahan-, no tengo conocimiento de que haya obras importantes, ni nuevas ni de mantenimiento”.

Sin planes de obras a corto plazo

Chequeado constató que en el mapa de inversiones del Gobierno nacional –actualizado al 2 de diciembre último– no hay reportes de nuevas obras públicas en hospitales cuyo financiamiento depende de la Nación. 

Las únicas que están vigentes son en el Garrahan y en el Posadas. En el primero figuran 3 obras, todas proyectadas para este año, pero sólo una cuenta con un 66% de avance, según la web: las otras 2 llegan a entre el 14% y el 16%. La obra del Posadas posee un 5% de avance, según el mapa de inversiones.

Este medio consultó al sector de Prensa del Ministerio de Salud, desde donde señalaron: “El saneamiento de los Hospitales Nacionales es una de las prioridades que se propuso esta gestión para hacer más eficiente la asignación de los recursos. La redefinición de prioridades, el ahorro en estructuras jerárquicas y la renegociación de contrataciones de servicios tercerizados, debería redundar en la mejora de los ingresos del personal médico asistencial y la mejor producción sanitaria, lo que incluye la infraestructura”.

Y agregaron: “Desde el inicio de la gestión, las autoridades se propusieron realizar un reordenamiento, una modernización y una búsqueda de sustentabilidad del sistema de salud, que lleva 22 años consecutivos de emergencia sanitaria declarada por el Poder Ejecutivo”.

Chequeado realizó un pedido de acceso a la información al Ministerio de Salud para que brindara información sobre el gasto en estructura edilicia hospitalaria en 2024 y su variación con respecto a 2023, pero no tuvo respuesta hasta el momento de la publicación de esta nota.

Tampoco se encontraron comunicaciones oficiales de las carteras de Salud o de Economía que comuniquen nuevas obras en hospitales. Existen otros anuncios del gobierno sobre estas instituciones, pero ninguno relacionado con una mejora edilicia.

En los primeros días de octubre, las autoridades del Hospital Nacional Laura Bonaparte, especializado en salud mental y adicciones, denunciaron el cierre de la guardia y de la sala de internaciones. La medida causó sorpresa y polémica en el ámbito de la salud.

En aquel momento, el Ministerio de Salud de la Nación anunció que había iniciado un “plan de reestructuración del hospital” con el objetivo de “priorizar la asignación de los recursos en los pacientes que lo necesitan”. Desde el gobierno justificaron la decisión en la “reducida cantidad de pacientes que se atienden en la institución”.

Por otro lado, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, aseguró que la gestión de los hospitales públicos “debería estar en manos de las provincias”, en declaraciones a Radio Mitre, aunque no precisó qué pasaría con el financiamiento de esas instituciones. Esto también fue comunicado por el vocero presidencial, Manuel Adorni, el 20 de septiembre último.

“Creo que anunciar la entrega a las provincias de los hospitales nacionales sin un análisis exhaustivo de cada uno de ellos es inconducente e inviable, ya que todos son muy diferentes en cuanto a su complejidad, especialización y localización geográfica. No tiene sentido hacer tabla rasa con los hospitales sin analizar caso por caso”, opinó Rubinstein.

Por todo lo expuesto, la promesa de Milei está “incumplida”. Según datos oficiales, en 2024 se destinó un 77% menos de fondos para la construcción y mejoras edilicias de hospitales que en 2023, último año de Fernández. Tampoco hay reportes de nuevas obras públicas en hospitales con el financiamiento del Estado nacional, y las que están vigentes no cuentan con avances significativos, según pudo constatar Chequeado.


INCUMPLIDA: la promesa tenía un plazo establecido que no se cumplió o los resultados muestran que la situación avanzó en la dirección contraria a lo previsto.