Javier Milei y su promesa: “Vamos a darle los recursos a la gente para que puedan elegir la institución (educativa) a la cual quieren ir”

Durante el debate presidencial por el balotaje de 2023, el entonces candidato y actual presidente de la Nación, Javier Milei (La Libertad Avanza), aseguró: “Vamos a darle los recursos a la gente para que puedan elegir a la institución (educativa) a la cual quieren ir”. 

A 2 años de asumir, la promesa está “en proceso, demorada”. Aunque el Gobierno nacional implementó el programa “vouchers educativos” y continuó con el programa Becas progresar, especialistas consultados por Chequeado coinciden en que no se trata de políticas que permitan “financiar la demanda” de forma universal, como planteó Milei en campaña 

Además, otras medidas adoptadas por el gobierno -como la desregulación para el cobro de cuotas y la eximición del pago de aportes patronales en escuelas privadas- no respetan el espíritu del compromiso del presidente, según los expertos. 

El Gobierno anunció el 9 de diciembre un proyecto de ley de “libertad educativa” que sería tratado en 2026 en el Congreso. La iniciativa contempla “dispositivos de financiamiento por la demanda en todos los niveles y modalidades”. Y agrega que: “Las asignaciones otorgadas a las familias o alumnos mediante vales o bonos, becas, créditos fiscales u otros instrumentos equivalentes, están orientadas a asegurar la libre elección de la institución educativa y la equidad en el acceso a propuestas diversas de aprendizaje”. 

Qué ocurrió con los vouchers y las becas Progresar 

En 2024, el Gobierno nacional lanzó el programa “vouchers educativos”, una prestación para las familias que envían a sus hijos a escuelas privadas con una subvención estatal del 75% o más. 

Un año después, las postulaciones bajaron: se registraron 620.331 solicitudes, frente a  1.086.584 inscripciones en 2024. Según explicaron desde la Secretaría de Educación de la Nación, “no resulta llamativo el descenso en un contexto donde la reducción de la pobreza refleja el impacto de las políticas implementadas por el Gobierno nacional”.

Ante una consulta de Chequeado, desde el Ministerio de Capital Humano señalaron que también se implementó otra política para “atender con eficacia la demanda”: las becas Progresar. 

El Programa de Respaldo a Estudiantes Argentinos (Progresar) fue creado por decreto en 2014, durante la gestión de Cristina Fernández de Kirchner (Frente para la Victoria), para asistir económicamente a jóvenes con bajos ingresos en la finalización de su educación obligatoria.

De acuerdo con los datos oficiales reconstruidos por Agustín Claus, especialista en Políticas Educativas de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso), la cantidad de beneficiarios creció hasta 2023. En 2024 cayó y en 2025 volvió a subir, pero no logró alcanzar los 1,8 millones de beneficiarios de 2023. 

El monto de las becas experimentó una pérdida del 69,3% desde el inicio del programa. En febrero de 2025, llegó a su mínimo histórico ($ 35 mil), una caída real del 71,5% respecto del máximo de marzo de 2015.

Por qué estos programas no son un subsidio a toda la demanda, según los expertos

Según el Ministerio de Capital Humano, los vouchers, a diferencia de los modelos anteriores, buscan “atender la demanda” y así lograr la promesa de campaña. 

Sin embargo, Alejandro Morduchowicz, especialista en Planeamiento y Financiamiento de la Educación y ex consultor de Unesco, señaló a Chequeado que esta iniciativa “no es el voucher del que Milei hablaba, que trata de darle un cupón a todas las familias y que estas familias elijan el colegio al que quieren enviar a sus hijos. Acá las familias ya eligieron”. 

“Los vouchers no están pensados para abarcar sólo al sector de menores ingresos; hasta deciles de mayores ingresos pueden inscribirse. Pero no debe olvidarse que, aun con esa ‘universalidad’, sólo beneficia a 3 de cada 10 estudiantes argentinos que van al sector privado. La medida busca evitar traspasos de estudiantes de este sector al estatal”, explicó la investigadora del Conicet y coordinadora de Educación del Centro de Estudios e Investigación en Ciencias Sociales, Romina De Luca.

Respecto de las becas Progresar, la especialista sostuvo: “El beneficio alcanza sólo a familias por debajo de la línea de pobreza y su foco se encuentra en la finalización de los niveles primario y secundario. Una mirada forzada puede sostener que constituye una medida para que se pueda elegir la institución escolar, dado que el ingreso a octubre de 2025 es de $ 35 mil”. 

En septiembre de 2025, la Asociación de Entidades Educativas Privadas de la Argentina (Adeepra) denunció un aumento “récord” de la morosidad en las cuotas, sobre todo en el tercer cordón del conurbano, con un incremento del 20% respecto a 2024.

Junto a los vouchers educativos, este año el Gobierno nacional implementó 2 medidas dirigidas al sector privado educativo. En noviembre último, anunció la desregulación para el cobro de cuotas y matrículas a partir del Decreto 787/2025. Y, en febrero de 2025, permitió al sector la eximición en el pago de los aportes patronales. 

“Tanto los vouchers como la desregulación de las cuotas y la eximición de las cargas patronales para el sector implican, lejos de lo que sostiene el gobierno, la consolidación de un Estado regulador en favor de las empresas privadas en educación”, dijo De Luca. 

Por lo tanto, la promesa de Javier Milei se encuentra “en proceso, demorada”. Aunque el Gobierno nacional implementó el programa “vouchers educativos” y continuó con las becas Progresar, los especialistas consultados por Chequeado coinciden en que no avanzan en el sentido de la promesa de campaña de “financiar la demanda” en forma universal. Otras medidas impulsadas no respetan el compromiso del presidente.

EN PROCESO, DEMORADA: se avanzó poco o nada en las medidas necesarias para cumplir con el compromiso, pero todavía podría lograrse en el resto del período de mandato.