Macri: “Este es el Gobierno que más impuestos cobró en la historia”

“A este gobierno no hay recurso que le alcance. La inflación es una demostración de la pésima capacidad de gestión que tiene el Gobierno nacional. Es el Gobierno que más impuestos cobró en la historia de la Argentina, y no les alcanza”, dijo el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, al referirse a una posible modificación del Impuesto a los Bienes Personales por parte del Gobierno nacional.

El dato mencionado por Macri es correcto. La carga impositiva en la Argentina aumentó en la última década y es la más alta de Latinoamérica. Sin embargo, la Ciudad también registró una fuerte suba de su presión tributaria en los últimos años.

Un indicador del crecimiento de la recaudación es su evolución en relación al Producto Bruto Interno (PBI): la presión tributaria. Dado que durante los últimos años el PBI creció, y la carga tributaria también, el actual gobierno aumentó sus ingresos tributarios.

Cuando Néstor Kirchner asumió la Presidencia, en 2003, la carga tributaria total representaba el 23,4% del PBI, según datos del Ministerio de Economía de la Nación. Hasta ese momento, esta era la presión impositiva más alta de la historia. Desde ese año, la carga tributaria subió año tras año, hasta llegar, en 2012, al 37,3% del PBI, lo que implica una suba de 14 puntos respecto del inicio del kirchnerismo. Este cálculo incluye a los impuestos nacionales, es decir, los recaudados por el Estado nacional, y los impuestos provinciales, que son percibidos por las provincias (ver datos).

“Efectivamente es la más alta de la historia, y aumenta porque la recaudación nominal creció más que el PBI nominal”, explicó Darío Rossignolo, profesor de Finanzas Públicas en la Universidad de Buenos Aires (UBA) y consultor especializado en tributación y políticas fiscales. “Las tasas nominales de los principales impuestos no han variado: la del IVA está en 21% desde mediados de los noventa, y las de Ganancias también se mantienen desde fines de los ‘90”, agregó.

Si se tienen en cuenta sólo los impuestos nacionales, la presión tributaria creció en la última década del 19,6% del PBI al 31,7 por ciento. Esta cifra también ubica al actual gobierno como el de mayor carga tributaria de la historia.

Presión tributaria como % del PBI (1980 – 2012) – Total, nacional y provincial

Las estadísticas oficiales muestran que el impuesto que más dinero aporta a las arcas del Estado sigue siendo el IVA, un tributo regresivo, ya que se le cobra a todos por igual, sin tener en cuenta sus ingresos. Entre 2003 y 2012 pasó de representar el 5,5% del PBI al 8,8 por ciento.

Otro tributo que incrementó considerablemente su importancia fue el Impuesto a las Ganancias. En 2003 representaba 3,9% del PBI y en 2012 llegó a 6,4 por ciento. “Se ha transformado en un impuesto distorsivo. Por el lado de las personas físicas, el mínimo no imponible ha quedado desactualizado. En el caso de las empresas, no se les permite contemplar los efectos de la inflación, es decir que se paga impuesto sobre Ganancias nominales”, señaló César Litvin, presidente del Instituto Tributario Argentino.

Carlos Martínez, economista y profesor de la Universidad Nacional de General Sarmiento (UNGS), coincidió en que la suba no se explica por la implementación de nuevos tributos: “El kirchnerismo, excepto por la incorporación de ganancias de capital en el Impuesto a las Ganancias y del impuesto a los autos de lujo, no creó ningún impuesto. El aumento de la presión fiscal se debe a la restauración del impuesto al cheque (durante la Presidencia de Fernando De la Rúa) en un contexto de gran crecimiento de la actividad y de las retenciones a las exportaciones (durante la Presidencia de Eduardo Duhalde) con precios y nivel de producción récord, junto con más recaudación de IVA (por más actividad) y Ganancias (con actualización atrasada del mínimo no imponible en personas físicas y la no indexación de los balances en personas jurídicas)”.

Un informe de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) muestra que en 2011, contando los ingresos tributarios más la seguridad social, la Argentina era el país con mayor presión tributaria de Latinoamérica, seguido muy de cerca por Brasil. “En la Argentina incidió la instauración de los derechos de exportación a partir de 2002 y el incremento de la recaudación por contribuciones a la seguridad social como resultado de la nacionalización del sistema en 2008”, destaca el documento. Al mismo tiempo, señala que en el período 2000-2011 todos los países de la región aumentaron su presión impositiva, a excepción de México y Venezuela.

Los datos a nivel provincial

Desde el inicio del gobierno de Mauricio Macri, la Ciudad también aumentó su carga tributaria. Entre 2007 y 2012, el Producto Bruto Geográfico porteño creció un 182% en términos nominales, mientras que la recaudación tributaria aumentó un 300% (ver datos).

Las cifras disponibles de 2013 marcan una continuidad en el crecimiento de la recaudación. Según informes de la Asociación Argentina de Presupuesto (Asap), entre enero y septiembre de 2013 la recaudación creció un 45% respecto del mismo período de 2012. En los primeros nueve meses de 2012, la suba en la recaudación había sido del 27 por ciento.

El informe enumera como principales causas “las modificaciones efectuadas en algunas alícuotas” de Ingresos Brutos, “la actualización de la base imponible” del Impuesto Inmobiliario y su posterior aumento, y la “modificación de las alícuotas” del Impuesto a los Sellos y el Impuesto Automotor para financiar el Fondo Subte.

De acuerdo a información de la consultora Economía y Regiones, las provincias que más aumentaron su presión tributaria en la última década son las del NEA, con un alza del 68%, y las patagónicas (58%). Mientras que las provincias de la zona pampeana son las de mayor presión tributaria, con un promedio de 6 por ciento. El resto de las regiones del país oscilan entre un 4,2% y un 5,2% de carga impositiva.