Macri: “Una de mis tres propuestas es enfrentar (…) el narcotráfico”

Durante el debate presidencial de la segunda vuelta de la campaña de 2015, el presidente de la Nación, Mauricio Macri, expresó: “Yo les quiero proponer, que es una de mis tres propuestas, enfrentar y derrotar el narcotráfico, que ha potenciado, que ha aumentado la violencia y la cantidad de delitos en la Argentina”.

Desde que asumió, el Poder Ejecutivo Nacional ha impulsado reformas estructurales -algunas ya implementadas y otras que aún son proyectos- para brindar a las fuerzas de seguridad y a la Justicia nuevas herramientas para hacer frente a este flagelo.

En junio de 2018, en una jornada convocada por el Ministerio de Justicia de la Nación, el Gobierno realizó un balance del Plan Argentina Sin Narcotráfico, lanzado en 2016, que enmarca sus esfuerzos en la materia.

Entre los objetivos de Argentina Sin Narcotráfico, se destacan el compromiso para la erradicación de la pasta base de cocaína (el “paco”), el refuerzo de la presencia de fuerzas federales y provinciales en todo el país, la recuperación para el Estado de los bienes provenientes del narcotráfico, el compromiso para la prevención y el abordaje integral a las adicciones, lograr la convergencia estadística en materia de narcotráfico, el desarrollo de tecnología para un mayor control de los espacios aéreos marítimos y terrestres y la identificación y persecución de las bandas de narcotraficantes, entre otros.

En estos casi tres años, el Ejecutivo puso énfasis en las incautaciones de drogas como arma en la lucha contra el narcotráfico. Según los últimos datos disponibles brindados por el Ministerio de Seguridad de la Nación ante la consulta de Chequeado, entre enero y septiembre de 2018 las fuerzas federales incautaron 141.742,65 kg de marihuana, 56.752 unidades de drogas sintéticas y 6.387,15 kg de cocaína.

Entre 2016 y 2017, las incautaciones de droga fueron en aumento: un 8,4% crecieron las de marihuana, un 28,3% las de drogas sintéticas y un 101,9% las de cocaína. Entre enero y septiembre de 2018 (últimos datos disponibles), la incautación de marihuana siguió en aumento, con 141.742,65 kg, es decir casi un 7% más que el total de lo decomisado en todo 2017 (132.589,66 kg). Aunque no se puedan hacer comparaciones aún por todo el año 2018, hasta septiembre la cantidad de cocaína decomisada era solo un poco más de la mitad de la registrada el año pasado (6387,15 kg contra 11.121,66 kg), mientras que las unidades de drogas sintéticas incautadas alcanzaban un total de 56.752; muy por debajo de las 222.201 unidades de 2017.

Nuevas leyes

La reforma del marco legal también ha sido y es uno de los ejes del gobierno de Macri para el combate al narcotráfico. Desde “Justicia 2020”, el programa participativo del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación para la transformación del sistema de justicia, durante dos años se preparó una iniciativa de reforma que culminó con el Proyecto de Ley de Fortalecimiento de la Justicia Federal, presentado en junio de 2018 por legisladores oficialistas, y que se encuentra actualmente en tratamiento en comisión en el Senado.

En palabras del ministro de Justicia y Derechos Humanos, Germán Garavano, el proyecto “prevé especializar y ampliar el despliegue territorial de la Justicia, aumentando la cantidad de magistrados en los lugares críticos del país, como el NOA, el NEA, Rosario y la provincia de Buenos Aires”.

El objetivo es agilizar y profundizar la lucha de delitos federales, con especial énfasis en el narcotráfico. Para ello, el plan prevé la designación de 94 jueces, 85 fiscales y 23 defensores federales, es decir, según Garavano, un aumento del 81% en la cantidad de jueces de primera instancia y del 57% de los fiscales de toda la Justicia Federal.

Previamente, a partir de 2016, el Poder Ejecutivo envió al Congreso varios proyectos que fueron sancionados, como la llamada ley del arrepentido, que permite la reducción de penas a quienes hayan participado de delitos vinculados con producción, tráfico de drogas y se comprometan a brindar información al respecto; la inclusión de los precursores químicos en la legislación sobre drogas, que establece un control más estricto de quienes manejen sustancias que pudieran servir para producir estupefacientes; la de flagrancia, que habilita que cuando los detenidos son sorprendidos in fraganti sean puestos a disposición del juez de manera inmediata y juzgados mediante un sistema oral abreviado; y la de herramientas para la lucha de delitos complejos, sobre figuras como “agente encubierto” o “informante”.

El Gobierno trabaja además en una ambiciosa reforma del Código Penal, que, según anunció Garavano, será finalmente anunciada por el presidente Macri en marzo de 2019, en la apertura de sesiones del Congreso. En lo relativo al narcotráfico, el proyecto prevé el aumento de penas y la incorporación de nuevos agravantes, como la provisión de estupefacientes a menores de edad, el uso de armas y la utilización de menores en la cadena de producción o comercialización de las drogas. También incluye a la organización internacional dedicada al narcotráfico como nueva figura penal, hasta ahora inexistente en el marco normativo.

El nuevo rol de las Fuerzas Armadas

En julio de 2018, mediante los decretos 683/2018 y 703/2018, el Presidente oficializó la reforma de la Defensa Nacional, que brindó el nuevo marco normativo para la intervención de las Fuerzas Armadas en operaciones de seguridad interior en calidad de apoyo logístico de las fuerzas de seguridad.

La nueva Directiva de Política de Defensa Nacional, publicada unos días después, brindó más detalles sobre el nuevo accionar de las Fuerzas Armadas. En ella, se define a la criminalidad transnacional, incluidas allí las redes delictivas vinculadas con el narcotráfico, como uno de los desafíos prioritarios de las estrategias de seguridad de la región.

En agosto de 2018, se puso en marcha en Jujuy el programa Fronteras Protegidas, en el contexto del Operativo Integración Norte. En él, las Fuerzas Armadas brindan apoyo logístico y de comunicaciones a las fuerzas de seguridad en la zona norte del país y se comprometen a controlar el espacio aéreo mediante radares.

EN PROCESO, ADELANTADA: se tomaron parte de las medidas necesarias y se trabajó para lograr la promesa, aunque todavía no está cumplida.