Macri: “Tenemos como objetivo lograr una Argentina con pobreza cero”

“Tenemos como objetivo económico lograr una Argentina con pobreza cero”, sostuvo el presidente de la Nación, Mauricio Macri, durante el debate presidencial de 2015 en el que enfrentó ideas con Daniel Scioli, el candidato del Frente para la Victoria. Se refirió así a la intención de disminuir en forma considerable este flagelo social. Pero, ¿cómo evolucionó la pobreza durante el gobierno de Macri?

Luego de un aumento durante el primer año de la gestión de Cambiemos, este año se observa un cambio en la tendencia y la pobreza comenzó a bajar. Las fuentes alternativas varían en sus estimaciones pero coinciden en este punto.

La Encuesta Permanente de Hogares (EPH) del INDEC indicó que en el primer semestre de 2017, último dato disponible, el 28,6% de la población se ubicó por debajo de la línea de la pobreza. Es decir, casi un tercio de la población obtuvo ingresos mensuales inferiores a la Canasta Básica Total, que incluye bienes y servicios. Por otro lado, el 6,2% de la población argentina era indigente: no percibían un ingreso suficiente como para cubrir los requerimientos alimentarios diarios, establecidos en la Canasta Básica Alimentaria.

Para comparar estos porcentajes con los años gobernados por Cristina Fernández de Kirchner la situación se complica: debido a la intervención del instituto oficial entre 2007 y 2015, la nueva gestión del INDEC determinó que los datos recolectados y difundidos durante ese período debían “ser considerados con reservas”. Sumado a esto, cuando Macri asumió la Presidencia, se realizaron modificaciones en la forma de medir la pobreza que dificultan aún más la comparación.

Sin embargo, hay fuentes alternativas que buscaron corregir estas diferencias. Una de ellas es el Centro de Estudios Distributivos, Laborales y Sociales (Cedlas) de la Universidad Nacional de La Plata. Leopoldo Tornarolli, investigador de ese Centro, realizó una nueva serie de pobreza desde 2003 hasta la fecha, con el objetivo de neutralizar los ya mencionados cambios metodológicos.

Según sus datos, en base a cifras oficiales de la EPH del INDEC, en el primer semestre de 2015 la pobreza alcanzaba al 30,1% de la población, porcentaje levemente superior al 28,6% del primer semestre de este año. Es decir que la pobreza a comienzos del último año del segundo mandato de Fernández de Kirchner fue un poco más abultada que a comienzos del segundo año de mandato de Macri.

La base del Cedlas no incluye cifras sobre la segunda mitad de 2015 “debido a que el instituto oficial nunca publicó la información correspondiente”, explicó Tornarolli a Chequeado.

A pesar de esto, el sociólogo Daniel Schteingart, junto con los economistas Federico Favata y Guido Zack, hicieron una estimación de ese segundo semestre de 2015 para el cual no hay datos. La proyección se realizó utilizando otros indicadores oficiales, como los ingresos de los asalariados registrados (cuya fuente es el Ministerio de Trabajo de la Nación), los salarios de los empleados públicos (INDEC) y las jubilaciones mínimas (ANSES).

Según sus números, para el final del gobierno de Fernández de Kirchner (es decir, el segundo semestre de 2015) la pobreza era del 27,7%, casi un punto porcentual inferior a los 28,6% del primer semestre de 2017. Sin embargo, esta diferencia se encuentra dentro del margen de error, por lo que no es claro un movimiento a la baja o a la suba de la pobreza entre el final del gobierno del kirchnerismo y el inicio del segundo año del macrismo.

Si se observa el inicio del último año de gobierno de Fernández de Kirchner, la conclusión es similar a la del Cedlas: entre el primer semestre de 2015 y el mismo período de 2017 la pobreza bajó de 29,5 a 28,6 por ciento

Al observar este indicador durante la gestión de Cambiemos, el INDEC informó que al primer semestre de 2017 el 28,6% de los argentinos vivía con ingresos por debajo de la línea de la pobreza. Esto implica que casi 640 mil personas dejaron de ser pobres, si se compara ese número con el porcentaje que se encontraba en esta situación en el segundo semestre de 2016 (30,3%).

En este sentido, Tornarolli sostuvo a este medio que “en el primer año del gobierno de Macri la pobreza se incrementó respecto del final del gobierno de Fernández de Kirchner, pero desde entonces se observa una tendencia decreciente”. Y coincidió en que, “a pesar de que no pueda saberse a ciencia cierta, posiblemente la pobreza actual sea similar a la del segundo semestre de 2015”.

En lo que sí hubo un crecimiento fue en la indigencia: según la base de Tornarolli, esta pasó del 5,9% al 6,2% entre el primer semestre de 2015 y el mismo de 2017. Por otro lado, para Schteingart, Favata y Zack, la indigencia aumentó del 5,8% en el segundo semestre de 2015 al 6,2% en el mismo período de 2017.

Jorge Paz, investigador del Conicet y director del Instituto de Estudios Laborales y del Desarrollo Económico (IELDE) de la Universidad de Salta, explicó a Chequeado que “es difícil que en un contexto inflacionario se vea una clara disminución de la pobreza”. De cualquier forma, aclaró que “la pobreza no es un indicador que pueda variar mucho de un año a otro. Para ver una baja sustancial en la cantidad de pobres, tiene que haber un crecimiento a nivel país durante un período extenso de tiempo, sumado a una sostenida inversión social, como la destinada actualmente por el Gobierno nacional”.

En el primer año de Cambiemos, los datos disponibles mostraban un aumento de la pobreza, por eso su promesa fue calificada como INCUMPLIDA. Este año se observa un cambio en la tendencia y la pobreza comenzó a bajar. Además, todavía faltan dos años -los que le restan a Macri de su mandato actual- para poder corroborar si el Jefe de Estado cumplirá o no con la promesa de bajar considerablemente este flagelo, por eso se modificó la calificación de este chequeo a EN PROCESO, DEMORADA.

EN PROCESO, DEMORADA: se avanzó poco o nada en las medidas necesarias para cumplir con el compromiso, pero todavía podría lograrse en el resto del período de mandato.