Pobreza en las infancias: los fondos nacionales destinados a políticas para las niñas y los niños son un 18% menos en términos reales que en 2023

En la previa del Día de la Niñez, que se celebra este domingo 18 de agosto, organizaciones sociales nacionales e internacionales advirtieron sobre los niveles de pobreza infantil y la baja en el presupuesto dedicado a la niñez y la adolescencia por parte del Gobierno nacional. 

Informes de Unicef, la Sociedad Argentina de Pediatría (SAP) y la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ) focalizaron sobre distintos puntos, tanto económicos, como sociales y educativos, que demuestran la situación en la que se encuentran hoy las infancias en la Argentina. 

“Hoy la SAP observa con profunda preocupación cómo, con motivo de la situación social y económica, se siguen afectando, como desde hace décadas, las poblaciones más vulnerables. El presente y el futuro de los niños, niñas y adolescentes (NNyA) argentinos es hoy más incierto y preocupante”, indicó el organismo en un comunicado.

Un millón de niños se van a la cama sin cenar, según Unicef 

Según el informe “Situación de la niñez y adolescencia. Octava Ronda 2024” de Unicef, en nuestro país, cada día, un millón de niñas y niños se van a la cama sin cenar.

Cada año, Unicef Argentina realiza una encuesta a hogares con niñas, niños y adolescentes. En la octava, publicada en 2024, revela también que esa cifra se eleva a un millón y medio si se incluyen aquellos que se saltean alguna comida durante el día.

Esto ocurre en un contexto en el que más de 7 millones de chicas y chicos viven en la pobreza monetaria: “El aumento de los precios y el estancamiento económico desde hace más de una década han incidido en la capacidad de generación de ingresos de millones de hogares con niñas y niños”, advierte el comunicado de Unicef.

Además, indica que “unos 10 millones de chicas y chicos en la Argentina comen menos carne y lácteos en comparación al año pasado por falta de dinero, en un contexto en el que, además, los ingresos de casi la mitad de los hogares con niñas y niños no alcanzan para cubrir gastos básicos de alimentación, salud y educación”.

“La pobreza extrema, que INDEC le llama indigencia -es decir, los niños que viven en hogares con ingresos menores a la canasta básica alimentaria-, se había mantenido en 9 o 10% a lo largo de los años. Ahora, en este coletazo inflacionario, se ha multiplicado por 3”, explicó a Chequeado Jorge Paz, investigador del Conicet en el Instituto de Estudios Laborales y del Desarrollo Económico (IELDE) y autor del informe de Unicef “Pobreza monetaria y privaciones vinculadas a derechos en niñas y niños”. 

Estos datos, aclaró el especialista, surgen de un análisis de la base de microdatos del primer trimestre de 2024 de la Encuesta Permanente de Hogares de INDEC.

La AUH aumentó un 26%, pero el resto del presupuesto para niñez disminuyó

A partir de estos datos de Unicef, la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ) realizó un análisis del presupuesto de Nación destinado a niños, niñas y adolescentes (NNyA). 

“Los recursos asignados a NNyA, en valores reales, vienen disminuyendo de forma constante. A nivel general, el informe indica que los recursos presupuestarios destinados a niñas y niños son un 18% menos que en 2023”, explica el informe “Menos presupuesto para infancias cada vez más pobres”, de ACIJ. 

De las partidas presupuestarias analizadas, el informe advierte que la Asignación Universal por Hijo (AUH) y la Prestación Alimentar cubrieron el 77% de una Canasta Básica Alimentaria en los primeros 6 meses de 2024. “Mejoraron respecto de 2023, pero se encuentran lejos de 2021 que fue de un 98%”, indica el informe. 

El mismo documento explica que la AUH  es una “política priorizada” por el gobierno de Javier Milei: se le asignó un 26% más que el año pasado. 

Sin embargo, especialistas advierten que aunque haya aumentado, no alcanza, y eso tiene que ver con la baja de ingresos de las familias donde viven esos niños. “Los programas de transferencia de ingresos (como la AUH) que venían más o menos sosteniendo esa situación ya crítica de la niñez, no están siendo lo eficaces que eran antes para mantener esos hogares fuera de la pobreza extrema”, explicó a Chequeado Paz. 

Francisco Rodríguez, abogado del programa Derechos Sociales de la Niñez de la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ), indicó a este medio: “El nivel de pérdida de ingresos en los hogares donde hay NNyA hace que el aumento de la AUH en valores reales no pueda compensar esa pérdida. Lo que hace el aumento es evitar que la pobreza infantil sea todavía mayor”.

Los números sobre la alimentación, la salud y la educación 

Tanto ACIJ como la SAP pusieron foco en sus informes en cuál es la situación actual de la alimentación, la educación y la salud de niños, niñas y adolescentes. Respecto del presupuesto, ACIJ indicó que las políticas alimentarias (incluyendo la Prestación Alimentar) disminuyeron un 29% respecto de 2023. 

“La Prestación Alimentar (línea más financiada del programa de políticas alimentarias con $1.813.290 millones) está destinada a transferir recursos a familias con niñas/os de hasta 14 años que cobran AUH. Ésta muestra una disminución del 20% respecto del año pasado”, explica el informe.

En relación a la salud, la SAP apuntó en su comunicado que la implementación efectiva de la Educación Sexual Integral “es aún una deuda pendiente”, y focalizó, entre otros puntos, en la vacunación, advirtiendo que, para fines de 2023, 112 mil niños de 0 a 5 años no habían recibido ninguna vacuna y 37 mil tenían el esquema incompleto.

Sobre la educación, la SAP señaló que “las políticas educativas actuales no logran garantizar la continuidad escolar”. 

ACIJ, por su parte, indicó que “los programas de educación son un 43,7% menores al año pasado” y advirtió sobre “algunos desfinanciamientos muy preocupantes: se han ejecutado 0 pesos para actividades de: Gestión del Nivel Inicial y Secundario, Educación Sexual Integral, Reinserción Escolar y acompañamiento a trayectorias”. 

Por su parte, “se han disminuido considerablemente los programas de Becas Progresar (-54,7%), Construcción de Jardines Infantiles (-43%) e Infraestructura Escolar (-63,5%)”.