Depósitos en dólares: cómo variaron en cada Presidencia

Luego de la victoria del candidato presidencial del Frente de Todos, Alberto Fernández, en las primarias y el salto del dólar el lunes posterior a las elecciones, los depósitos en dólares volvieron a ser noticia y el propio Banco Central de la República Argentina (BCRA) autorizó a los bancos a extender 2 horas la atención al público (es decir, hasta las 17 horas) para “atender las necesidades de los clientes”. Pero, ¿cuánto variaron los depósitos en dólares? En esta nota, un repaso por los datos oficiales.

Cuando asumió Néstor Kirchner, en mayo de 2003, los depósitos del sector privado en dólares eran casi US$ 1 mil millones, mientras que en diciembre de 2007, cuando finalizó su mandato y asumió Cristina Fernández de Kirchner, los depósitos eran US$ 6,6 mil millones.

Al comienzo del segundo mandato de Fernández de Kirchner los depósitos eran casi US$ 12 mil millones. En 2015, luego de la imposición del “cepo cambiario” durante su segundo gobierno, Fernández de Kirchner finalizó con cerca de US$ 9 mil millones de depósitos privados en el sistema financiero nacional.

El récord de las últimas décadas -los registros oficiales comienzan en 2002- se dio el 9 de agosto de 2019, bajo la Presidencia de Mauricio Macri, con US$ 32,5 mil millones. El 11 de agosto se realizaron las elecciones primarias y, desde ese momento, los depósitos en dólares comenzaron a caer. El viernes 30 de agosto último fue el día que más dólares salieron de los bancos: se retiraron US$ 1,1 mil millones. Ese mismo domingo, el 1 de septiembre, el Banco Central tomó distintas medidas entre las que se destacó el límite de US$ 10 mil para compras de personas.

Luego de estas medidas, la salida de dólares continuó, pero a mucho menor ritmo. Así, a pesar de que luego de las PASO cayeron en casi US$ 10 mil millones, actualmente los depósitos del sector privado se ubican en US$ 22,5 mil millones, todavía muy por encima de los registros de años y gobiernos previos, y en los mismos niveles que en 2017.

“El hecho de que los depósitos en dólares se hayan incrementado significativamente durante el gobierno de Macri responde en mi opinión a dos cuestiones centrales vinculadas entre sí: la moneda estadounidense es considerada el único activo libre de riesgo en la economía argentina y, por lo tanto, tras el levantamiento de los controles cambiarios se efectivizaron muchas compras que antes no podían ser realizadas. Y dado que estas compras en su mayoría se realizan por homebanking, esos fondos quedaron depositados en los bancos”, explicó a Chequeado Lorena Giorgio, economista de la consultora Econviews que dirige Miguel Kiguel -ex funcionario del Ministerio de Economía durante las presidencias de Carlos Menem y Fernando De la Rúa-.

En este sentido, Giorgio destacó que “la situación es distinta a la de 2001 porque en ese entonces los bancos tenían gran parte de los dólares de los depósitos prestados” y “fue lo que hizo que los bancos no resistieran a la salida masiva de depósitos”. En 2001, cuando todavía se mantenía el “1 a 1” (el dólar valía un peso), los préstamos en dólares representaban más de 200% de los depósitos en esa moneda, mientras que hasta las elecciones primarias ese porcentaje representaba el 50%. Luego del fuerte aumento del dólar y la salida de depósitos, ese porcentaje igual es menor al 65%.

Cecilia Allami, economista especialista en el sistema financiero e investigadora de la Universidad Nacional de General Sarmiento (UNGS), explicó en esta nota que “después de la crisis de 2001, se pusieron límites muy fuertes a los préstamos en dólares”. Esto es así porque si el sistema bancario presta gran cantidad de los dólares que tiene, está más expuesto ante una “corrida” en la que los dueños de esos dólares fueran todos juntos a sacarlos. Esa es una de las razones por las que la situación actual es menos crítica: una proporción baja de los dólares fueron prestados.

¿Cuán importantes son los depósitos en dólares para la economía argentina? En lo que va del año los depósitos en dólares representaron cerca del 35% del total de depósitos en el sistema bancario. Si bien este porcentaje aumentó en los últimos años, todavía sigue muy lejos de los registros de 2001, cuando representaban el 65%.