¿Qué diferencias hay entre una criptomoneda y una memecoin, y cómo evitar caer en estafas?

A partir del “criptogate” que involucra al presidente de la Nación, Javier Milei (La Libertad Avanza), comenzaron a circular en el discurso público algunas palabras del ecosistema cripto hasta ahora poco conocidas.

En esta nota, te contamos qué es una criptomoneda, cuáles son las características distintivas de las memecoins y cómo hacer para evitar caer en estafas. 

¿Qué son las criptomonedas?

A diferencia de las monedas físicas, una criptomoneda es una moneda digital descentralizada (no está controlada ni respaldada por ningún banco central) que fue creada con algún fin específico, como ser un medio de pago de bienes y servicios o ser un instrumento de inversión o ahorro. Por ejemplo, Mercado Libre tiene una sección exclusiva para la compra de propiedades con Bitcoins (una de las principales criptomonedas) desde 2021. 

Estas monedas están protegidas por una clave o una firma digital y están registradas en una especie de libro contable (tecnología blockchain), lo que asegura su autenticidad e impide que sean fáciles de falsificar o utilizar en más de una oportunidad.  

En la Argentina, las criptomonedas con mayor volumen de transacciones son: Bitcoin (cotiza a US$96.307,9), Ethereum (US$2.713,51), BNB (US$660,17) y Solana (US$169,05), por citar algunos ejemplos.

En el mundo, Bitcoin acapara el 60% de la capitalización total de las criptomonedas, con una capitalización de mercado de alrededor de 2 billones de dólares, de acuerdo con el sitio de estadísticas especializado CoinMarketCap. En segundo lugar se encuentra la criptomoneda Eethereum, con un 10% de posición de mercado. El restante 30% lo ocupan otras criptomonedas de forma más atomizada.

¿Qué son las memecoins?

Como se explica en esta nota, los memes son todas esas frases, imágenes y videos de humor reconocibles que se viralizan en redes sociales. Las monedas meme o memecoin son criptomonedas que se llaman como estos memes u otros personajes, individuos, animales, obras de arte o lo que sea que pueda parecer divertido para atraer a los usuarios en redes sociales.

En este sentido, Patricia Acebes, doctoranda de la Universidad de Alcalá (UAH) en Ingeniería de la Información y del Conocimiento, indicó que “las memecoin aprovechan la cultura digital, adoptando su parte más humorística para popularizarse en las redes sociales”.

La primera memecoin -que fue creada en 2013- estuvo inspirada en el meme ‘Doge’ fue un símbolo de la década de 2010: una imagen de un perro de raza Shiba Inu que los usuarios editaban con distintas frases de colores.

A modo de referencia, el presidente electo Donald Trump lanzó antes de asumir su cargo actual su propia memecoin llamada TrumpCoin, que fue otro impulsor de las memecoins. Días antes de asumir la presidencia, anunció desde su cuenta de X el lanzamiento de $TRUMP una criptomoneda inspirada en su figura y consiste encon una imagen que lo muestra con el puño en alto, que rememora el día de su intento de magnicidio.

Si tanto Bitcoin como Dogecoin son criptomonedas, ¿cuál es la diferencia? La Bitcoin (así como Ethereum y demás) fueron creadas con una finalidad específica, por ejemplo, el fundador de Bitcoin -apodado Natoshi Nakamoto- planteó que este activo tiene como objetivo ser un medio de pago. Por el contrario, las memecoins no tienen una utilidad específica.

¿Cómo evitar caer en estafas con una memecoin?

Acebes alerta sobre un método común utilizado en estafas con monedas meme: los esquemas pump and dump (inflar y soltar). Primero, los estafadores eligen una moneda con baja liquidez o valor y la promueven masivamente en redes sociales (algo más fácil si son influencers o famosos); este es el pump o inflar, que provoca que crezca la demanda y aumente el precio. El dump o soltar sucede cuando la moneda alcanza un precio alto, los desarrolladores venden la moneda lo que hace que el precio se desplome.

Otra similar con estas monedas consiste en hacer un rug pull, es decir, los desarrolladores atraen inversionistas con el objetivo de incrementar la cotización del activo y abandonan el proyecto minutos después de su lanzamiento.

“Cada día se crean miles de ellas, la mayoría por parte de estafadores, que se disparan durante unas horas antes de hundirse o, al estilo clásico, hacen un rugpull [los desarrolladores atraen inversionistas y después abandonan el proyecto] minutos después de su lanzamiento”, señala el experto en criptomonedas Jasir Jawaid en la web Coinbureau.

Como se detalla en esta nota, la recomendación para evitar estafas es tomar las mismas precauciones que con otras monedas digitales. En este sentido, Acebes recomienda informarse bien antes de hacer una inversión en criptomonedas, por ejemplo, revisando que el contrato haya sido auditado o que la moneda tenga una liquidez suficiente bloqueada (mecanismo que evita que se manipule el mercado). 

Además, la experta también sugiere utilizar casas de intercambio reconocidas como Binance y Ripio, entre otras.

Por otra parte, Alan Boryszanski, creador del ecosistema descentralizado CryptoMate, recomendó en diálogo con Chequeado que “una persona que compre una memecoin debe hacerlo para darle empuje a la expresión que está plasmando (por ejemplo, sumarse a una tendencia de consumo humorístico), pero no con la expectativa de una ganancia por el incremento de la cotización porque en el mercado operan algoritmos de inteligencia artificial, expertos de la industria con más información y más capital, con mayores chances de ganarle a un usuario común”.