Día del Maestro: 3 de cada 4 directores de escuelas secundarias estatales son suplentes o interinos

Con motivo del Día del Maestro, el 11 de septiembre último el Observatorio Argentinos por la Educación presentó el informe “Directores de escuela secundaria: ¿quiénes son y qué piensan?”, realizado por Viviana Postay (Instituto de Enseñanza Secundaria y Superior de Villa Carlos Paz), Gabriela Catri y Martín Nistal (Observatorio Argentinos por la Educación).

El informe destaca que el 75,4% de los directores de escuelas secundarias estatales son interinos o suplentes, mientras que solo el 21,8% son titulares de su cargo. Es decir, 3 de cada 4 directores de escuelas secundarias estatales son suplentes o interinos. 

“Esa inestabilidad en el cargo puede ser un obstáculo para la mejora educativa”, señala el trabajo. 

Por el contrario, en las escuelas privadas 9 de cada 10 directores son titulares, “lo que les asegura mayor estabilidad en el cargo y, por lo tanto, condiciones para liderar la mejora escolar en sus instituciones”.

Qué ocurre con la toma de decisiones

En las escuelas privadas los directores tienen en promedio más antigüedad: el 28,9% tiene más de 10 años en el cargo en esa escuela. En la gestión estatal, sólo el 14% superan los 10 años en el cargo y el 34,4% de los directores tienen menos de 2 años de antigüedad. 

“Una vez más constatamos profundas desigualdades que afectan a la educación de los adolescentes en nuestro país y que interpelan seriamente las políticas públicas”, señala Postay. 

En relación a la toma de decisiones, los directores del sector privado poseen mayor margen de maniobra en sus decisiones: pueden tomar y despedir docentes y contratar capacitaciones a medida, destacan los autores.

“Por el contrario, los directores del sector estatal se encuentran atados de pies y manos respecto de estas mismas decisiones y acceden por concurso, con mayor o menor grado de transparencia en el proceso”, explica Verónica Gottau, investigadora de la Universidad Torcuato Di Tella (UTDT).

Por último, el informe se pregunta “por qué seguir limitando las funciones del director de escuela pública, quien hoy no participa ni mínimamente en la contratación de los docentes de la escuela que dirige, mientras a los directores de escuelas privadas sí se les asegura esa posibilidad, aun cuando los docentes que contraten sean financiados por el Estado”.