Siete claves para entender qué dispuso el Banco Central sobre la compra de viajes al exterior en cuotas

El Banco Central de la República Argentina (BCRA) emitió el jueves último una comunicación en la que prohibió a las entidades emisoras de tarjeta de crédito financiar en cuotas las compras  de pasajes al exterior y otros servicios turísticos -tales como alojamientos, alquileres, entre otros-.

La decisión fue cuestionada por la oposición (acá, acá y acá) y por agencias de viaje (acá y acá), que calificaron a la medida como “distorsiva” y aseguraron que “afecta de manera negativa el normal desempeño de una actividad que genera de manera directa e indirecta miles de empleos”.

Por su parte, la portavoz presidencial, Gabriela Cerruti, defendió la disposición al sostener que se trata de una medida “puntual y momentánea” y que con ella “estamos protegiendo el crecimiento y la reactivación”.

En esta nota, respondemos a las dudas más importantes que se generaron en torno a esta medida.

¿Qué operaciones prohíbe la medida?

Mediante la Comunicación “A” 7407, el BCRA dispuso que a partir del 26 de noviembre último “las entidades financieras y no financieras emisoras de tarjetas de crédito no deberán financiar en cuotas las compras efectuadas mediante tarjetas de crédito de sus clientes –personas humanas y jurídicas– de pasajes al exterior y demás servicios turísticos en el exterior (tales como alojamiento, alquiler de auto, etc.), ya sea realizadas en forma directa con el prestador del servicio o indirecta, a través de agencia de viajes y/o turismo, plataformas web u otros intermediarios.”

Esto significa que a partir del viernes último las aerolíneas o agencias de viajes no podrán vender pasajes ni paquetes turísticos en el exterior saldando el pago en cuotas. La medida incluye cualquier tipo de servicio turístico relacionado, como el alquiler de un vehículo u otros gastos.

¿Por cuánto tiempo se mantendrá la prohibición?

Cerruti aseguró que la medida es “puntual y  momentánea”, pero no precisó cuál será su duración. “La medida se extenderá o no de acuerdo a las diferentes situaciones que vayan evaluando en su conjunto sobre la situación financiera y macroeconómica de la Argentina”, afirmó.

La disposición del BCRA tampoco especifica plazos, por lo que la vigencia de la normativa es indeterminada.

¿La medida afecta las compras realizadas antes del 26 de noviembre?

No. El Gobierno aclaró que “la disposición del BCRA entró en vigencia hoy 26 de noviembre con lo cual todas las compras previas no se ven afectadas”.

¿Hay excepciones a la disposición?

No. Si bien la portavoz presidencial indicó que “cualquier situación puntual tiene que ser atendida”, no especificó qué situaciones específicas podrían ser consideradas excepciones, y enumeró una serie de alternativas para casos de personas que deban viajar por trabajo, cuestiones de salud, estudio o razones familiares. La Comunicación del BCRA tampoco establece esas ni otras excepciones. 

¿Qué ocurre con los viajes al interior del país?

La compra en cuotas de pasajes o paquetes turísticos a destinos nacionales no se verán afectados por la disposición oficial.

No obstante, el viernes último se reportaron algunos problemas para la compra de pasajes de cabotaje, según dijo a Chequeado el economista y director de la consultora EPyCA, Martín Kalos. “Hubo algunas operaciones de compra de pasajes locales que no se pudieron efectuar porque la operadora no podía permitir esas operaciones sin permitir las compras al exterior. Ese fue un problema de sistema derivado de la falta de previsibilidad en el anuncio”, señaló.

¿Qué alternativas existen para la compra de pasajes o paquetes turísticos?

El Gobierno señaló que “hay varias opciones de financiar un viaje al exterior, dentro y fuera del sistema financiero”.

Desde el sector de Prensa del BCRA precisaron a este medio que “se puede financiar el resumen pagando el mínimo o usar algunos de los planes que ofrecen las tarjetas”.

Kalos señaló que “quien quiera viajar afuera lo tiene que pagar en una sola cuota, con algunas salvedades. Se permite refinanciar este tipo de consumos con la tarjeta de crédito a una tasa del 43% nominal, pagando el monto mínimo”. Y agregó: “Si se hace bien se le puede ganar a la inflación, pero no es una tasa 0 como una cuota sin interés”. También señaló que “se les permite a los bancos ofrecer créditos personales, con una tasa obviamente más alta que la tarjeta de crédito”.

Las razones esgrimidas de la medida

Oficialmente, el Gobierno expresó que “se está negociando una solución a la deuda con el FMI (Fondo Monetario Internacional) contraída por el Gobierno anterior. Cuidar la reactivación requiere fortalecer el mercado interno”.

Por su parte, Kalos explicó que “esto responde a la necesidad del BCRA de limitar la salida de las reservas internacionales porque no hay suficientes dólares para todos los usos que se les podría dar”.

El economista señaló que “la medida implica un encarecimiento de ese tipo de compras, que se suma al encarecimiento que ya está incorporado con los 2 impuestos [N de la R: el impuesto PAÍS establece un recargo del 30% sobre el precio oficial y una resolución de AFIP retiene otro 35% a cuenta del pago de Ganancias] que se cobran a los gastos en dólares”. Y agregó: “Si bien eventualmente hay una minoría que va a seguir viajando, una parte de la población va a reducir sus gastos en el exterior. En definitiva, ese es un poco el objetivo del Gobierno”.