La nueva gestión

En diciembre último, la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, designó al frente del Instituto de Obra Médico Asistencial (IOMA) a Sergio Daniel Cassinotti, un licenciado en relaciones públicas que exhibe una dilatada trayectoria en el mundo de la salud al que rápidamente se le señaló lo que, a juzgar de distintos sectores sindicales y de la oposición, podría constituir el mismo conflicto de intereses que se le achaca al ministro de Energía nacional, Juan José Aranguren.

“Sus vínculos con los actores del mercado de la salud generan sospechas fundadas sobre sus decisiones en favor o en contra de distintas empresas”, alertó la delegada de ATE, Luana Simioni.

Ocurre que, antes de asumir al frente de la mutual bonaerense, Cassinotti se desempeñaba como director ejecutivo de la Cámara de Droguerías y Distribuidoras Especializadas (CADDE), una asociación creada en marzo de 2014 con el objeto de promover y concretar la defensa de los intereses del sector. Según la página web del organismo, desde la salida de Cassinotti el cargo no fue reemplazado y sólo figura como secretaria María Lourdes González.

Ante la consulta de Chequeado sobre la posibilidad de incompatibilidades, el funcionario aseguró que ninguna de las empresas de la Cámara tiene contratos con IOMA. Hay, empero, otro reproche no menos atendible para la figura del nuevo titular de IOMA y es que, entre 2002 y 2013, Cassinotti presidió la obra social de la Unión Personal Civil de la Nación (UPCN) y su respectivo plan privado Accord Salud.

“Yo soy un tipo del mundo de la salud desde hace muchos años y todos me conocen. Me van a encontrar muchos amigos porque a mí me conoce todo el mundo, pero yo tengo en claro que son cosas separadas”, dijo Cassinotti durante una entrevista con este medio. Y, además, agregó: “Más allá del tiempo que estuve en UPCN todos tienen en claro que si encuentro a alguien de ese gremio que cometió un delito no voy a dudar en separarlo y denunciarlo ante la Justicia”.

Hay otros datos sobre Cassinotti. A fines del año último, a poco de asumir como titular del IOMA, el funcionario constituyó la firma Soluciones Integrales para Empresas de Salud SA en sociedad con el kinesiólogo Diego Norberto Villalvilla que, según consta en su acta fundacional publicada en el Boletín Oficial, tiene por objeto la “administración, auditoría y gerenciamiento total o parcial de centro de salud, sanatorios, clínicas, obras sociales, aseguradora de riesgo de trabajo, servicio de medicina prepaga, centro de diagnóstico y todas las actividades conexas, ya sea en clínica médica u otras áreas de salud, traslado de pacientes de urgencia y de emergencia medicas domiciliarias, prestación de servicios médicos domiciliarios realización de estudios y diagnósticos domiciliarios, exámenes preocupacionales, control de ausentismo, Importación, exportación, explotación, representación, promoción y publicidad de dichos servicios”.

Cassinotti ya había incursionado en el mundo empresarial ligado con la salud cuando en 2007 creó Nativus SRL, una firma dedicada a una amplia gama de actividades desde la administración de sistemas médico asistenciales de medicina prepaga, la comercialización de software y equipos médicos, la organización de congresos y eventos ligados con la medicina hasta la “intermediación en la contratación de servicios hoteleros hospitalarios en el país o en el extranjero”. Asimismo se previó “realizar toda clase de actos, contratos y operaciones, especialmente para presentarse en licitaciones públicas y/o privadas que se relacionen directa o indirectamente con el objeto social”.

Cassinotti informó que de Nativus se desvinculó en marzo de 2011 mientras que en relación a la firma creada en octubre de 2015 aseguró que nunca llegó a funcionar y que presentó su renuncia en febrero de este año (ver acá, acá y acá).

Uno de los vocales de directorio del IOMA es el presidente del bloque de Cambiemos en el Concejo Deliberante de Pilar, Sebastián Nicolás Neuspiller. Ex futbolista y ginecólogo, está ligado con la empresa de fertilización asistida Fecunditas, prestadora de IOMA, de cuyo directorio forma parte su padre Nicolás Raúl Neuspiller, quien a su vez fue director de Fertar SA, una sociedad integrada por varias firmas dedicadas a la fertilización que también brindan servicios a la obra social bonaerense. En febrero último, y en busca de legitimar y dar transparencia a su participación en el directorio, Neuspiller presentó a Cassinotti una nota mediante la que solicitó cancelar todo contrato que el organismo tuviera con Fecunditas y en la que también aseguró haber estado al margen de decisiones adoptadas por IOMA respecto de esa firma.

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Tanto los delegados de ATE en el organismo como los miembros de la Asociación de Profesionales que conduce Idelmar Seillant miran con recelo y expectación a las nuevas autoridades. “El 60% de los integrantes del directorio y de cargos decisorios que viene participando de la corrupción en el IOMA en los últimos años sigue en funciones”, alertó el médico.

La sucesión de denuncias también llevó la atención sobre lo que está ocurriendo en IOMA a la Legislatura bonaerense, donde el diputado Pablo Garate, del Frente Renovador, presentó un proyecto que reclama la intervención de la obra social y la creación de una comisión bicameral que estudie a fondo la situación del organismo. En el texto del proyecto, Garate recuerda que el directorio de IOMA está integrado por representantes de los gremios “que habrían convalidado los hechos que se denuncian en la Justicia”. Para el legislador, la única manera de separar a los funcionarios es con una intervención. Si bien la iniciativa elevada hace cinco meses no presenta avances, entre los legisladores parece cobrar cuerpo la idea de convocar formalmente a Cassinotti a dar explicaciones. Hasta ahora, Cambiemos se ha manifestado en contra y sólo aceptaría crear una Comisión legislativa para investigar la herencia recibida en la mutual.

Entre tanto alboroto judicial, los sindicatos que participan en el directorio de IOMA, Unión Personal Civil de la Nación (UPCN) y el Sindicato Unificado de Trabajadores de la Educación de Buenos Aires (Suteba), han conservado este tiempo un llamativo silencio. Es que en muchas de las denuncias conocidas aparecen dirigentes o ex dirigentes ligados a UPCN.

Para el auditor Idelmar Seillant, la mayoría de las empresas que se encuentran en la mira de la Justicia “son operadas por testaferros y muchas de ellas están ligadas a dirigentes de Unión Personal Civil de la Nación”. Las sospechas del grupo de auditores denunciantes se centra sobre la figura de Teodoro Carlos Quintana, titular desde hace 25 años de la filial bonaerense del gremio. Sin embargo, hasta el momento no han conseguido pruebas suficientes para incriminarlo.

Según Seillant, “lo que ahora están mostrando los Panama Papers confirman nuestras sospechas. Nosotros estamos investigando cómo el dinero sucio que salía del IOMA se triangulaba con distintas financieras para después ser giradas al exterior con destino a paraísos fiscales”, señaló. Para el denunciante, el gran desafío por delante es lograr pruebas suficientes para demostrar un presunto vínculo entre varias de las empresas señaladas por las irregularidades de la gestión anterior. En tal sentido, el médico dice estar convencido de que las firmas “Hestía, Medizin, Juntos en Casa, SOS, Intergemed, Medihome, Dar Salud, Soluciones Domiciliarias repiten la misma metodología de fraude y están ligadas entre sí”.

Actualización 30/09/2016: Luego de la publicación de este artículo Cassinotti se comunicó con Chequeado y agregó precisiones sobre su participación en distintas sociedades, que fueron incluidas en el artículo.