Alberto Fernández, sobre el aumento de casos: “Cada vez que hubo marchas, 15 días después crecieron los casos de coronavirus”

El presidente de la Nación, Alberto Fernández, brindó una entrevista el sábado último por la noche en el programa “Sobredosis de TV”, en C5N, y habló sobre la relación de las marchas y el aumento de contagios por coronavirus. “Cada vez que hubo marchas, 15 días después crecieron los contagios”, aseguró, y ejemplificó con el caso de Avellaneda, en Santa Fe. “Avellaneda no tenía ningún caso. Coronavirus tiene hoy el intendente, y fueron al banderazo de Vicentin, y al ‘Banderazo por la Libertad”. Pero, ¿es así lo que dijo el Presidente?

Rodrigo Quiroga, bioinformático de la Universidad Nacional de Córdoba e investigador asistente del Conicet, explicó a este medio que “es casi imposible confirmar” esa declaración a través de datos ya que hay una amplia variación del periodo de incubación del virus respecto a cuándo se manifiesta.

Quiroga sostiene que este período puede ser de 2 a 14 días, por lo que los contagios que se produzcan un día en particular se distribuyen a lo largo de 12 días. La única condición que facilita el análisis es si el día de cada manifestación hubiera 0 casos, “si no, es imposible verlo sobre el ruido estadístico”, concluye el bioinformático.

Chequeado analizó la evolución de contagios de COVID-19 informados en torno a 4 marchas en contra del Gobierno realizadas en Ciudad Autónoma de Buenos Aires y Provincia de Buenos Aires (PBA), Mar del Plata (PBA), Avellaneda y Rosario (Santa Fe) y Córdoba: el 30 de mayo, el 20 de junio, el 9 de julio y el 17 de agosto último. Para ello, se analizaron los datos de 15 días previos y 15 días posteriores -el período de incubación del virus-.

Según los números oficiales de las jurisdicciones analizadas por Chequeado, no se advierte un salto representativo de casos producto de las marchas que sea uniforme entre cada una de ellas ni que respete un patrón de aumentos porcentuales de contagios similares entre sí.

Qué pasó antes y después de cada una de las marchas

El 30 de mayo último, se realizó en varias ciudades del país la marcha por una “cuarentena inteligente”. En el Obelisco, en la Ciudad de Buenos Aires, se conglomeraron cientos de personas, así como en varios municipios de toda la Provincia de Buenos Aires. ¿Qué pasó con el aumento de contagios en ese período? En la Ciudad y la Provincia de Buenos Aires, en los 15 días previos los casos informados promedio aumentaron más que en los 15 días posteriores.

Tres semanas después, luego del anuncio de la intervención de la empresa Vicentín, el 20 de junio último tuvo lugar una marcha masiva en varios puntos del país. En Provincia de Buenos Aires y Ciudad, los aumentos de casos de coronavirus aumentaron en casi el mismo porcentaje la primera semana después de la marcha que la semana previa a la concentración de gente, mientras que la segunda semana el ritmo de aumento incluso bajó.

En Avellaneda, la ciudad santafecina que eligió para ejemplificar el Presidente y donde está instalada la empresa agroexportadora del grupo Vicentin, no hubo ningún contagio en los 15 días posteriores a la marcha.

En Córdoba, donde la marcha también fue concurrida, los números apenas superaban un dígito y también hubo una baja importante en porcentaje de casos en las 2 semanas siguientes.

El 9 de julio último, en otra de las marchas contra el gobierno denominada “Banderazo por la Libertad”, si bien se registraron aumentos en la zona del Área Metropolitana de Buenos Aires (integrada por la Ciudad y 40 municipios bonaerenses), fue un aumento progresivo y en línea con la tendencia previa a las manifestaciones.

Por su parte, las ciudades de Córdoba y Rosario registraron aumentos significativos en términos porcentuales, pero tras 15 días de las concentraciones masivas los casos no superaron los 100 en cada una de ellas. En Avellaneda, Santa Fe, no apareció ningún caso después de la movilización.

Por último, el 17 de agosto último se hizo la última marcha, también con epicentro en el Obelisco porteño, con representaciones en Rosario y Avellaneda, en Santa Fe, y en la ciudad de Córdoba.

En el caso del AMBA, una semana después de las concentraciones hubo una baja del 5% en los contagios y a la semana siguiente un aumento del 35%, marcando la irregularidad de la progresión. Avellaneda registró 10 casos en total durante los 15 días posteriores (el intendente, Dionisio Scarpín -UCR-, comunicó en sus redes sociales que había contraído el coronavirus), mientras que Rosario y Córdoba, tal como en el caso anterior, registraron aumentos porcentuales altos, pero en una base de casos reales que no superaron los 200 contagios en total.

En conclusión, no hubo un patrón de aumentos porcentuales de contagios similares entre sí, ni tampoco el aumento de casos ocurrió cada vez que hubo una marcha, como señaló Fernández.

Chequeado consultó al equipo de Prensa del Presidente para conocer en qué datos se basó el Presidente para hacer la afirmación, pero no obtuvo respuesta hasta la publicación de esta nota.

Qué evidencia existe sobre contagios masivos en concentraciones

La relación entre aumento de casos y concentración de gente es eje de controversia en diferentes países. Como explicamos en esta nota, en Italia una concentración alrededor del estadio donde jugaron Atalanta y Valencia es señalado en Europa como el disparador de una ola importante de contagios en la ciudad de Milán.

En España se debate sobre qué influencia tuvieron en la propagación del virus las masivas manifestaciones del 8M. Incluso se inició una causa judicial contra autoridades del Gobierno nacional por haber permitido la realización de la manifestación cuando ya circulaba el virus en la comunidad.

Pero no en todos los lugares con manifestaciones se vieron resultados similares. Un estudio publicado a fines de junio último por la Universidad de San Diego reveló que las manifestaciones que se produjeron en los Estados Unidos a raíz del movimiento Black Matter Lives, luego del asesinato de George Floyd el 25 de mayo último a manos de la policía, no se tradujeron en un incremento masivo de contagios.

En nuestro país se vivió una situación especial cuando miles de jubilados y beneficiarios de planes sociales se concentraron a principios de abril en la puerta de los bancos para cobrar diversos beneficios. En ese momento se habló, especialmente desde la oposición, de una “bomba viral”, con el agravante de que se trataba en muchos casos de personas en edad de riesgo. Sin embargo, durante todo ese mes los casos se mantuvieron estables.

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