Bossio: “La Argentina tiene la cobertura previsional más alta de la región”

“La Argentina tiene la cobertura previsional más alta de la región, con un 94,6%”, aseguró Diego Bossio, titular de la ANSES, repasando una lista de medidas tomadas por el gobierno nacional en relación al sistema jubilatorio.

Efectivamente, la Argentina es uno de los países con mayor cobertura previsional, aunque en la actualidad se ubica segundo en la región, según un informe del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

Este análisis comparativo muestra que el país con mayor cobertura es Bolivia, con un 96,7% de la población en edad de jubilarse con algún beneficio previsional; seguido por la Argentina, con un 90,4%, algo inferior al número citado por Bossio (esto se puede deber a que el informe está basado en datos de 2010 y toma como fuente la EPH del INDEC en lugar de los datos de ANSES).

El primer puesto, sin embargo, es reñido. “Las diferencias en la cobertura entre Bolivia y la Argentina no son significativas, y depende mucho de la metodología que se utilice”, aclaró Claudia Danani, investigadora especializada en política social de la Universidad General Sarmiento y el Instituto Gino Germani (UBA).

De acuerdo con el análisis de Fabián Repetto, director del Programa de Protección Social del Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (CIPPEC),  “la Argentina es uno de los países con mayor cobertura, sobre todo a partir del Plan de Inclusión Previsional, que permitió aumentar a más del 90% la cobertura. Esa población está hoy dentro de lo que se conoce como seguridad social contributiva, porque es gente que ha contribuido o lo está haciendo a través de la moratoria que permitió la incorporación de más de dos millones de personas durante aquel plan”.

En el caso boliviano, en cambio, el especialista señaló que el plan “Renta Dignidad”, implementado a partir de 2007, “es de carácter universal y se le otorga a todos los bolivianos apenas cumplen la edad prevista en dicha política pública, con lo cual el conjunto de la población que cumple la edad prevista accede al beneficio, más allá de que nunca haya contribuido”.

También existen diferencias entre Bolivia y la Argentina en el tipo de cobertura. “En Bolivia, el 78% de las pensiones que se otorgan está por debajo de la línea de pobreza absoluta” y el 70% de los beneficiarios lo son por pensiones no contributivas, asegura el informe del BID. La pensión básica boliviana es de alrededor de US$ 2 por día en Paridad de Poder Adquisitivo (PPA), mientras que en la Argentina representa US$ 7 PPA, un indicador que tiene en cuenta los precios de cada país.

El peso de las pensiones no contributivas tiene, por otro lado, un costado negativo, advierte el informe: la sustentabilidad, dado que se trata de pensiones que se otorgan sin contribuciones al sistema.

En este sentido, Rubén Lo Vuolo, director del Centro Interdisciplinario para el Estudio de Políticas Públicas (CIEPP), señaló sobre el caso argentino que la cobertura “se logró gracias a una moratoria, es decir un plan especial para incluir personas que no alcanzaban los requisitos para jubilarse. El sistema hoy deja afuera a una parte de las personas en edad de jubilarse, y depende de medidas especiales, como la moratoria, para cubrirlas”.

La tasa de trabajo no registrado, es decir de quienes no tienen aportes jubilatorios, hoy es del 34,6 por ciento en la Argentina. “Si no se hacen modificaciones al sistema, o no se abre una nueva moratoria, la cobertura va a empezar a disminuir, de hecho ya se observan las primeras bajas en la cobertura, aunque por el momento son poco significativas”, explicó Danani.