De Vido: “[La importación de energía] no representa más del 8% de la demanda de nuestro país”

El ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, sostuvo en un comunicado que las importaciones de energía en 2013 “van a estar en el mismo nivel que durante el 2012”. En una nota publicada en el diario La Nación se había estimado un número mayor. La importación de energía “no representa más del 8% de la demanda de nuestro país, mientras que nuestros vecinos importan más de 50%”, argumentó el funcionario.

Es cierto que la energía que proviene de otros países representa un porcentaje acotado del consumo nacional, pero viene en aumento. Además, la balanza comercial energética presenta desde hace dos años un resultado negativo.

En la Secretaría de Energía de la Nación se publican los Balances Energéticos de cada año. La información se encuentra clasificada entre lo que corresponde a formas de energía primarias (es decir, en el estado en que son extraídas de la naturaleza, como la leña) o secundarias (productos de un proceso de transformación, por ejemplo, el gas licuado).

Si nos situamos en la energía primaria, en 2011 el 10% de la oferta interna fue importada. La cifra representa un aumento con respecto a los dos años previos (2010 y 2009), en donde el porcentaje rondó el 7 por ciento. En el 2003, era del 1,2 por ciento. Más de dos tercios de estas importaciones corresponden a Gas Natural, y casi la totalidad de este tipo de energía es transformada.   

En el ámbito de la energía secundaria, el porcentaje de importación fue del 6% para 2011. Si se suma la importación de energía primaria con la de energía secundaria, sobre la oferta interna de ambos tipos de energía, el porcentaje coincide con los dichos del ministro. En 2011, la importación de energía en este sentido fue del 8,2 por ciento. Sin embargo, presenta un aumento continuo: En 2008, fue del 4,8%; en 2009, del 5,6%; y en 2010, del 6,3 por ciento.

El Banco Mundial (BM) presenta datos sobre la importación de energía teniendo en cuenta el uso y restándole la producción. Esta forma de presentación no permite saber exactamente cuánta energía se importó (ya que no tiene en cuenta las exportaciones que pudiera hacer el país), pero es un indicador de la estructura de cada país en este aspecto.

La Argentina aparece como netamente exportador, ya que produjo en 2010 un 6% más de energía que la utilizada. Ese número es, sin embargo, el más bajo desde 1990, y la información disponible no llega a los últimos 2 años, cuando la balanza comercial de energía pasó a ser deficitaria.

En efecto, entre 2003 y 2012, el valor de las importaciones del rubro Combustibles y Lubricantes aumentó 1590%, al tiempo que las exportaciones de Combustibles y Energía crecieron un 20 por ciento. Así, en 2011 se pasó de un resultado positivo en el intercambio a tener un déficit por US$ 2.784 millones, que se mantuvo (2.738 millones) al año siguiente. La información surge de los datos oficiales que releva el INDEC.

“En la producción total de energéticos, el grueso está dado por los hidrocarburos y sobre todo por el gas natural, con casi el 50% del total”, analizó el ingeniero Jorge Gaimaro, directivo del Instituto Argentino de la Energía General Mosconi. “En el último año, y viene creciendo cada año, prácticamente el 20% de la necesidad de gas natural se está importando. Lo mismo pasa con los productos del petróleo, como el gas oil. Por esto, la importación pesa muchísimo en la balanza comercial”, concluyó.

Combustible y Lubricantes sobre total de importaciones (en %). Periodo 2003-2012.

*Datos provisorios
Fuente: Elaboración de Chequeado.com en base a datos del Intercambio Comercial Argentino – INDEC.

La información publicada por el BM también permite tener en cuenta lo que sucede en los países vecinos. Uruguay y Chile presentan una estructura claramente importadora, ya que al menos el 51% de la energía que utilizan no es producida localmente, mientras Brasil utilizó un 7% más que la energía que produjo en 2010.

Sin embargo, Paraguay y Bolivia representan el caso totalmente inverso. Paraguay produjo un 48% más de energía que la utilizada en 2010. El mismo año, en Bolivia esa diferencia fue del 130 por ciento.

La semana pasada, luego del incendio en una refinería de la ciudad de La Plata, el presidente de YPF, Miguel Galuccio, anunció un aumento del 6% en la importación de la compañía “para cubrir la brecha de producción faltante”.