Javier Milei, en la apertura de sesiones 2024: “Si lo actualizamos al valor de hoy, el año pasado el Estado nacional gastó $ 5,4 billones en transferencias discrecionales a las provincias”

En la apertura de sesiones 2024, el presidente de la Nación, Javier Milei (La Libertad Avanza), destacó en su discurso:  “Si lo actualizamos al valor de hoy, el año pasado el Estado nacional gastó 5,4 billones de pesos en transferencias a las provincias”. 

Esto es verdadero. Según datos de la Oficina de Presupuesto del Ministerio de Economía, la Nación realizó transferencias “discrecionales” durante 2023 por un monto equivalente a $ 2.481.183 millones. Actualizado el número por inflación al valor de enero de 2024, esto es: $ 5,1 billones, una cifra similar a la afirmada por el Presidente. 

¿Qué dicen los datos?

Como se explicó en esta nota, existen 2 tipos de transferencias a las provincias por parte de la Nación: las automáticas, que se reparten por ley y de forma diaria a partir de la recaudación de impuestos; y las no automáticas o “discrecionales”, cuyo reparto no en todos los casos está definido por leyes y depende de la Nación.

En este caso, el presidente se refirió a las transferencias “discrecionales”. 

Chequeado realizó una base de datos propia con un análisis de las transferencias no automáticas por mes a cada provincia, para actualizar el número por inflación a valor de enero de 2024 (último dato de inflación disponible). La base utiliza información oficial que proviene de la Oficina Nacional de Presupuesto (ONP) del Ministerio de Economía de la Nación. 

El total, sin la actualización, de las transferencias discrecionales de Nación a las provincias fue de $ 2.481.183,1 millones de pesos, según la ONP. 

Si se actualiza con el IPC (Índice de Precios del Consumidor), para poder calcular el valor a enero de 2024 (último dato de inflación disponible), el resultado es $ 5.148.469,9, es decir $ 5,1 billones. Este número se acerca al mencionado por el presidente Javier Milei: $ 5,4 billones.

Sobre el análisis, el economista e investigador de la Universidad Nacional de General Sarmiento, Carlos Martínez explicó a Chequeado: “En economía se pueden tomar los valores de dos formas: en pesos corrientes, que sería a lo que valía cada peso cuando se gastó, o en pesos constantes, que es a pesos de determinada fecha, en este caso a pesos de marzo de 2024”. 

Y agregó: “En general, en temas fiscales, no tiene mucho sentido llevarlo a moneda constante. Porque lo que importa son las proporciones: cuánto es en porcentaje del PBI, en porcentaje del gasto nacional, en porcentaje de recaudación. Y como todo lo tenés en el mismo tipo de moneda, es lo mismo”.

¿En qué consisten las transferencias “discrecionales”?

Un informe del Instituto de Estudios sobre la Realidad Argentina y Latinoamericana (IERAL), de la Fundación Mediterránea, define a las transferencias no automáticas como “aquellos recursos que las provincias reciben del Gobierno nacional y que no se encuentran reglados por una ley que exponga criterios objetivos de distribución, es decir, decididas por los funcionarios del poder central”. 

“Las transferencias que por su importancia en monto y concepto se identifican son: Fondo Nacional de Incentivo Docente (FONID) y Programa de Gestión Educativa (extensión horaria) por ser programas destinados al área educación que se rigen por parámetros específicos del área educativa”,  indica el informe Análisis de transferencias no automáticas a gobiernos provinciales y municipales de la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC). 

Y agrega: “También se excluyen fondos con sustento en leyes tales como Ley 27.606 a CABA (traspaso de la seguridad) y lo destinado a la Provincia de La Rioja en virtud del artículo 83 de la Ley de Presupuesto 2023”,

El Fondo Nacional de Incentivo Docente (FONID) es un impuesto a los automotores creado en 1998 -durante la gestión de Carlos Menem (PJ)-, que tiene una asignación específica (es decir, que las provincias no pueden utilizarlo para un fin diferente para el que fue creado): el pago de un complemento salarial a los docentes. 

Los Aportes del Tesoro Nacional (ATN) también se incluyen dentro de las transferencias no automáticas. Estos aportes no tienen una asignación específica y son distribuidos por el Ministerio del Interior de la Nación en función de las necesidades de las provincias. Pueden ser utilizados, por ejemplo, para enviar recursos ante una emergencia climática. 

Otra transferencia no automática es el Fondo de Fortalecimiento Fiscal de la Provincia de Buenos Aires, creado en septiembre de 2020 -durante la gestión de Alberto Fernández (Frente de Todos)- luego de una serie de protestas realizadas por agentes de la Policía Bonaerense.

¿Qué son las transferencias automáticas a las provincias?

El otro tipo de transferencias, que no está incluido en el análisis, son las automáticas, que se realizan a las provincias. A esto se le llama coparticipación federal. Es el sistema mediante el cual el Gobierno central distribuye parte de la recaudación de algunos impuestos nacionales entre las provincias. 

Son transferencias que no requieren de una autorización previa ni son discrecionales (es decir, cuando no hay una normativa detrás), dado que se coparticipan a medida que los fondos ingresan a las cuentas del Estado nacional de acuerdo a un sistema de reparto predefinido. 

Este reparto se rige por la Ley de Coparticipación Federal, aprobada en el año 1988, durante la gestión de Raúl Alfonsín (UCR). 

Como se explicó en esta nota, la norma establece que, del total de impuestos coparticipables, el 42,34% son para el Gobierno nacional, el 56,66% se reparte entre las provincias de forma automática, y el 1% se reserva para el Fondo de Aportes del Tesoro Nacional (ATN), que también se reparte entre las jurisdicciones, pero de forma discrecional.