Javier Milei y su promesa a un año como presidente: “Vamos a reducir los impuestos”
- El Gobierno redujo alícuotas en Bienes Personales, modificó el Régimen de Monotributo para que alcance a menos personas y eliminó el Impuesto a la Transferencia de Inmuebles.
- Primero aumentó 10 puntos el impuesto PAIS, pero luego restituyó su valor al porcentaje original y no incluyó este tributo en el Presupuesto 2025, por lo que dejaría de cobrarse a fines de 2024.
- Sin embargo, también restableció Ganancias para los trabajadores -aunque con escalas más progresivas- y no tomó ninguna acción respecto de las retenciones a la soja.
Durante el debate por el balotaje de 2023, el entonces candidato de La Libertad Avanza y actual presidente de la Nación, Javier Milei (La Libertad Avanza), prometió que, en caso de resultar electo, iba a “reducir los impuestos y simplificar el sistema tributario”.
A un año de asumir como presidente, esta promesa se encuentra “en proceso, adelantada”. De acuerdo con los datos oficiales, el Gobierno redujo alícuotas en Bienes Personales, amplió los montos del monotributo (permitiendo que menos contribuyentes ingresarán en el régimen de autónomos, de mayor carga fiscal) y eliminó el Impuesto a la Transferencia de Inmuebles (ITI). Mientras que el impuesto PAIS perdería vigencia a fin de año.
Sin embargo, también restableció la cuarta categoría del Impuesto a las Ganancias (para trabajadores registrados), aumentó el impuesto a los combustibles y no tomó ninguna acción concreta en relación con las retenciones a la soja, el trigo y el maíz, un viejo reclamo de las entidades agropecuarias.
Según la metodología de Chequeado, una promesa se encuentra “en proceso, adelantada” cuando “se tomaron parte de las medidas necesarias y se trabajó para lograr la promesa, aunque todavía no está cumplida”.
Qué impuestos bajaron o se eliminaron en el primer año de gestión de Javier Milei
El Gobierno nacional reglamentó en junio parte de la Ley 27.743 de Medidas Fiscales Paliativas y Relevantes -también conocido como “paquete fiscal”- que estableció cambios importantes en el impuesto a los Bienes Personales y el Monotributo.
En Bienes Personales, un impuesto que grava la posesión de propiedades en el país y en el exterior, se estableció por un lado una suba del mínimo no imponible (piso a partir del cual una persona es alcanzado por el tributo) que pasó de $ 27 millones a $ 100 millones. Y, por el otro, se redujeron las alícuotas para el ejercicio fiscal 2023 desde el tope máximo del 1,75% hasta un nivel que oscila entre el 0,5% y el 1,5%, según el valor del bien.
Además, se estableció un sistema a partir del cual las personas que tengan bienes en el exterior y decidan pagar 5 años por adelantado del impuesto abonarán una alícuota especial de 0,45% por año (en lugar del 1,5% que existían hasta entonces).
Darío Rossignolo, economista de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) y especialista en Impuestos y Políticas Fiscales, dijo a Chequeado que este régimen opcional de pago anticipado es “novedoso” y consideró que los beneficios “son importantes” para los contribuyentes que adhieran.
Marcelo Rodríguez, tributarista y CEO de MR Consultores, planteó en diálogo con este medio que, con estas modificaciones, “la clase media dejó de pagar este impuesto”. Es decir que se registró una reducción tanto en la cantidad de personas alcanzadas por el tributo como en las alícuotas que deben pagar los sujetos obligados.
El “paquete fiscal” también dispone cambios en el monotributo. Se establece un máximo de facturación de $ 68 millones anuales para la categoría más alta, un aumento significativo en comparación con el máximo anterior de $ 16 millones.
Sobre este punto, Rossignolo resaltó: “La ley introdujo un cambio muy importante para los monotributistas prestadores de servicios ya que se les permite llegar hasta la última categoría, la K (con facturación de hasta $ 68 millones anuales), que antes sólo se aplicaba a los comerciantes que venden cosas muebles”.
Como se explica en esta nota, también se contempla la posibilidad de regresar al monotributo por única vez a los pequeños contribuyentes que hayan pasado al régimen de trabajadores autónomos (lo que implica una carga impositiva mayor) durante 2024 al superar el monto máximo de facturación.
Por otro lado, el Gobierno eliminó el Impuesto a la Transferencia de Inmuebles (ITI), con el que se retenía el 1,5% del valor determinado por la venta, permuta o cambio de un inmueble propio por el cual se obtuviera un beneficio.
En cuanto a los derechos de exportación a los productos agropecuarios, la gestión de La Libertad Avanza redujo o eliminó las retenciones a los lácteos, la carne porcina, algunas categorías de cortes vacunos y carne aviar. También se amplió el límite de compras por correo en el exterior y se dispuso que hasta los US$ 400 los productos no paguen aranceles de importación.
Laura Caullo, economista del Instituto de Estudios Económicos sobre la Realidad Argentina y Latinoamericana (IERAL) de la Fundación Mediterránea, señaló a Chequeado que “en líneas generales, no se eliminaron impuestos pero se redujeron las alícuotas”.
Qué impuestos se mantuvieron o subieron en el primer año de gestión de Javier Milei
El Gobierno restableció la cuarta categoría del Impuesto a las Ganancias (es decir, aquella que grava los ingresos de los trabajadores registrados), que había sido eliminada en 2023 durante el gobierno de Alberto Fernández (Frente para Todos). A diferencia del esquema impositivo anterior, en este caso también se dispuso una escala progresiva de alícuotas para que el tributo sea mayor para los sueldos más altos.
Por otro lado, en diciembre de 2023 la administración nacional aumentó del 7,5% al 17,5% la alícuota del Impuesto Para una Argentina Inclusiva y Solidaria (PAIS). Sin embargo, en septiembre pasado, la volvió a fijar en el 7,5% para la importación de bienes y fletes. “Esta disminución de 10 puntos responde a la política económica de reducir la carga tributaria”, destacó Rossignolo.
Para 2025, este impuesto dejaría de existir dado que por ley vence ese año y no fue incluido en el Presupuesto 2025.
Asimismo, el Gobierno mantuvo el cobro de derechos de exportación (conocido como “retenciones”) de granos, como la soja, el trigo y el maíz, un viejo reclamo de las entidades agropecuarias.
Sobre este punto, el ministro de Economía de la Nación, Luis Caputo, respondió en X a un productor que se había quejado sobre la vigencia de este tributo: “Hay muchos impuestos que no tienen que estar. No solo las retenciones. Para tratar de solucionarlo, algunos vinimos al sector público. Claro que corregir décadas de despilfarro lleva algo más que 10 meses de gestión. Si en 4 años estás disconforme, vas a poder votar otra alternativa”.
En relación con la suba los tributos a los combustibles, la gestión de Milei estableció sucesivos aumentos (ver acá y acá) en los impuestos sobre los Combustibles Líquidos (ICL) y al Dióxido de Carbono (IDC), a cuyo pago están obligadas las empresas que refinen, produzcan, elaboren, fabriquen y/u obtengan combustibles líquidos.
¿Cuál fue la estructura impositiva de la Argentina en 2024?
De acuerdo con un informe del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF) -dirigido por Nadin Argañaraz, ex subsecretario de Desarrollo en el Ministerio de Hacienda entre 2016 y 2017-, los impuestos que generan más recaudación son el IVA (representa 7,7% del Producto Bruto Interno -PBI-), los Aportes y Contribuciones a la Seguridad Social (4,9%); el Impuesto a las Ganancias (4,4%), los Ingresos Brutos que cobran las provincias (4,2%), el Impuesto al Cheque (1,7%) y las retenciones (0,8%).
De este modo, los impuestos que tuvieron modificaciones o fueron eliminados durante los primeros 11 meses de gestión tienen un peso relativo menor en relación con el PBI: el Impuesto PAIS representó el 0,8%; Bienes Personales, el 0,5%; el ITI, el 0,2%; y el Monotributo, el 0,04%.
Nicolás Campoli, economista del IERAL, destacó a este medio: “El criterio para modificar estos impuestos no fue el peso de cada uno, sino la necesidad de hacerlos más eficientes porque se hizo especial hincapié en el tema de las alícuotas para hacerlos más progresivos o permitir un universo mayor de contribuyentes en la base del tributo”.
Y agregó: “El beneficio de anticipar pagos de Bienes Personales, a su vez, respondería más a fines recaudatorios”.
Por lo tanto, la promesa de Milei se encuentra “en proceso, adelantada”. El Gobierno redujo alícuotas en Bienes Personales, modificó el Régimen de Monotributo para que alcance a menos personas, eliminó el Impuesto a la Transferencia de Inmuebles (ITI) y no incluyó el impuesto PAIS en el Presupuesto 2025. Sin embargo, también restableció Ganancias para los trabajadores -aunque con escalas más progresivas- y no tomó ninguna acción respecto de las retenciones a la soja.
EN PROCESO, ADELANTADA: se tomaron parte de las medidas necesarias y se trabajó para lograr la promesa, aunque todavía no está cumplida.
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