Macri: “La inflación en 80 años ha sido, en promedio, 62,5% sin contar los años de hiperinflación”
- La inflación en las últimas ocho décadas en el país rondó el 140% por año, mientras que si se sacan los años de hiperinflación de 1989 y 1990 ronda el 65%, cerca de lo marcado por el Presidente.
- Sin embargo, de los 80 años marcados por Macri, sólo en 21 hubo una inflación interanual mayor a la de 2018.
- Además, los especialistas marcan que la situación internacional actual de baja inflación es muy diferente a, por ejemplo, los 70’ u 80’, cuando la inflación era alta en la región y el mundo.
El presidente de la Nación, Mauricio Macri, se refirió la semana última en un evento oficial en Junín a la inflación y sostuvo: “Este es el camino por el cual vamos a derrotar la inflación. Una inflación que, en 80 años, ha sido en promedio 62,5%, sin contar los años de hiperinflación. ¿Se dan cuenta?”. Veamos qué dicen los datos.
Según los datos históricos, la inflación anual promedio del país en las últimas ocho décadas rondó el 140 por ciento. Si se sacan los años 1989 y 1990 (ya que la hiperinflación cercana al 4.900% y 1.300%, respectivamente, distorsiona mucho el promedio), la cifra media ronda el 65%, una cifra similar a la marcada por Macri. Esto surge de los datos recopilados por la consultora Orlando J. Ferreres hasta 2010, para los últimos años por el IPC 9 Provincias que realiza el Centro CIFRA de la CTA y en los últimos dos años ya con los datos oficiales del INDEC.
“La inflación no es un problema nuevo de la historia argentina. Sin embargo, está alcanzando valores y dinámicas que hace muchos años no observábamos”, explicó a Chequeado Joaquín Waldman, economista de Ecolatina, la consultora dirigida por el economista Santiago Paz y que fue fundada por el ex ministro de Economía de la Nación Roberto Lavagna. Como se explicó en esta nota, la inflación de 2018 finalizó en 47,6% y fue la más alta desde 1991, cuando el país todavía estaba saliendo de la hiperinflación.
En este sentido, el promedio marcado por Macri -como todo promedio- esconde varias etapas distintas. Entre 1938 y 1970 sólo hubo tres años con inflaciones interanuales mayores que en 2018. La mayoría de los años 70’ y 80’ tuvieron una inflación mayor que la actual. Mientras que, luego de la salida de la hiperinflación, la suba de precios de 2018 fue la mayor desde 1991. En resumen: de los 80 años marcados por Macri, 21 tuvieron una inflación mayor que la de 2018. En el resto (59 años), la inflación fue menor al 47,6 por ciento.
Pero, además, la situación no es la misma ahora que en décadas pasadas en el contexto internacional. “En otras épocas, la inflación llegó a ser un problema global. Hoy en día, en cambio, es un fenómeno que pasa en pocos países. La mayoría de los países del mundo alcanzaron cierta estabilidad de precios”, agregó Waldman.
En las décadas de los 70’ y 80’ diversos países de Latinoamérica tenían una inflación alta (ver acá y acá). La inflación de los Estados Unidos, por ejemplo, también era más alta entonces. Actualmente, la Argentina es el país con mayor inflación de la región después de Venezuela y se ubica entre los primeros puestos de inflación en el mundo.
Roberto Frenkel, economista investigador del Centro de Estudios de Estado y Sociedad (CEDES) y jefe de asesores del Ministerio de Economía durante la Presidencia de Raúl Alfonsín, explicó a Chequeado que Cambiemos “heredó una inflación alta” y que, además de los errores puntuales de este gobierno, la inflación llegó en 2018 al récord en parte porque “tenía una inercia que rondaba el 25% o 30%”.
En este sentido, sostuvo que el principal error de la gestión actual fue plantear metas tan ambiciosas desconociendo esta inercia. ¿Por qué estos valores récord no se dieron años anteriores? Frenkel aseguró en un trabajo que desde 2003 hasta 2013 las tasas anuales del salario medio “fueron casi siempre superiores a la tasa de inflación pasada” y que “con este mecanismo la inflación debería haberse acelerado permanentemente”, pero no ocurrió así porque esta tendencia “fue compensada por el atraso del tipo de cambio” -es decir, por mantener bajo el precio del dólar mediante, por ejemplo, el “cepo cambiario”- y por el atraso de “los precios de los servicios públicos” -lo que implicó un gasto cada vez mayor de subsidios-.
Fecha de publicación original: 04/04/2019
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