Martín Lousteau: “La Ciudad ahora tiene superávit, en los años de Macri tuvo déficit, siempre”

El senador nacional Martín Lousteau (Evolución Radical) aseguró durante una entrevista concedida al programa “Sólo Una vuelta Más”, que se emite por el canal Todo Noticias, que “la Ciudad [de Buenos Aires] ahora tiene superávit”, pero que “en los años de Macri tuvo déficit, siempre”. 

Lo dijo al referirse a los debates internos dentro de Juntos por el Cambio y señalar que “la parte dura del PRO siempre habla del superávit”.

Esto es verdadero, pero. De acuerdo con los datos oficiales, en la gestión de Mauricio Macri -PRO- en la Ciudad de Buenos Aires (2007-2015) se registró déficit primario y financiero en todos los años a excepción de 2010, cuando hubo superávit. Especialistas sostienen que la mayoría de los años deficitarios de la gestión de Macri se produjeron en un contexto de crecimiento, que son justamente los años en los que se debe producir superávit.

En tanto, en 2022 (último dato completo de la gestión de Horacio Rodríguez Larreta -PRO-) el Gobierno porteño sí registró un superávit en sus cuentas, como afirmó el senador nacional.

Consultados por Chequeado, desde el área de Prensa del senador nacional indicaron que los datos en los que se basó Lousteau provienen del informe de Ejecución presupuestaria provincial, elaborado por la Secretaría de Hacienda de la Nación. Esta serie de datos también indica que en 2010 el resultado primario y financiero de la Ciudad fue superavitario. 

Qué muestran los datos de la Ciudad

Según datos de la Dirección General de Estadística y Censos de la Ciudad de Buenos Aires, en 2007 Macri recibió el gobierno con un déficit primario (es decir, la diferencia entre ingresos y gastos sin contar los intereses de la deuda) de $ 212,4 millones y un déficit financiero (que incluye el pago de intereses de deuda) de $ 336,3 millones. 

Durante su primer año de gestión, en 2008, el déficit primario aumentó a $ 534 millones y el financiero a $ 668,6 y en 2009 trepó a $ 655 millones y a $ 895,8 millones, respectivamente. 

En cambio, durante 2010 ocurrió una excepción: la gestión de Macri logró un superávit primario de $ 441,2 millones, mientras que el resultado financiero fue de $ 38,6 millones. Este fue el único período de la gestión Macri en la que se logró un resultado positivo en materia de equilibrio fiscal. 

Luego de 2010 el déficit primario y financiero volvió a aumentar hasta llegar en 2015 (último año de Macri como jefe de Gobierno porteño) a $ 5.800 millones y a $ 7.750 millones, respectivamente. 

Esta situación continuó durante los 2 primeros años de la gestión de Horacio Rodríguez Larreta (PRO), que mantuvo déficits gemelos (es decir, tanto en el resultado primario como el financiero) en 2016 y 2017. Sin embargo, de acuerdo con los datos provisorios de 2022 el Gobierno porteño terminó con superávit en ambos casos ($ 188,2 mil millones en el caso del resultado primario y $ 133,8 mil millones del resultado financiero). Esto coincide con lo afirmado por Lousteau. 

Las causas del déficit en la Ciudad

Rafael Flores, economista especializado en Política Fiscal y ex presidente de la Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública (ASAP), dijo a Chequeado que durante la gestión de Macri en la Ciudad de Buenos Aires “no solamente hubo un déficit habitual, sino que se dio en un período de fuerte crecimiento de la economía y de la recaudación”. Y agregó: “Esos son los años en los que tenés que generar algún superávit e, incluso, hacer un fondo anticíclico como para compensar otros años con caída de la recaudación”. 

En el mismo sentido, un informe de la ASAP sobre el presupuesto porteño de 2014 advertía entonces que el déficit previsto para ese año mantenía “la tendencia de los últimos años”, ya que desde 2006 todos los presupuestos -con la excepción del ejercicio 2010- habían finalizado “con déficit, incluso en períodos de fuerte crecimiento económico”. 

Además, en el informe se remarca que el componente del gasto que más aumentó en este período fue el gasto en personal, que pasó del 2,7% al 3,4% de participación sobre el Producto Bruto Geográfico (PBG). Por el contrario, los gastos en capital (vinculados con la inversión en infraestructura) perdieron participación respecto del PBG.

Por esto, la frase de Lousteau, quien dijo que “la Ciudad ahora tiene superávit, en los años de Macri tuvo déficit, siempre”, es calificada como verdadero, pero, porque es consistente con los datos disponibles, pero omite algún elemento del tema o su contexto, que en este caso es el superávit producido en 2010. De acuerdo con la información oficial, en la gestión de Macri (2008-2015) se registró déficit primario y financiero en todos los años a excepción de 2010. En tanto, en 2022 el Gobierno porteño sí registró un superávit en sus cuentas.