Solanas: “El kirchnerismo no fue capaz de derogar ninguna ley del menemismo”
“El kirchnerismo, con diez años de gobierno y mayoría en ambas Cámaras, no fue capaz de derogar ninguna ley del menemismo”, criticó el senador nacional de Proyecto Sur-UNEN y precandidato presidencial, Fernando “Pino” Solanas, durante una charla-debate en la provincia de Jujuy sobre la propuesta política de su espacio.
La afirmación de “Pino” Solanas se dio a conocer durante la semana en la que varios representantes de la oposición, entre ellos Sergio Massa, Federico Pinedo, Hermes Binner, Julio Cobos y Ernesto Sanz, prometieron revisar y/o derogar algunas leyes votadas por el Congreso durante el kirchnerismo en caso de que sus partidos ganaran en 2015.
Pero, contrariamente a lo que afirmó el senador, de acuerdo con un relevamiento legislativo realizado por este sitio existen varias leyes sancionadas durante el menemismo que el Poder Legislativo Nacional derogó parcial o totalmente durante el período 2003-2014. En este sentido, entre otros ejemplos, pueden mencionarse:
Fuente: elaboración propia en base a datos de Infoleg.
Consultado por Chequeado, desde el equipo de Prensa y Comunicación de “Pino” Solanas recurrieron a algunos ejemplos de leyes para sostener lo dicho por el senador: “El kirchnerismo no derogó la [Ley de] Reforma del Estado ni la de Emergencia Económica, como así tampoco la Ley de Inversiones Mineras de 1993. Tampoco revocó el sistema de concesiones ferroviarias y la privatización del petróleo y el gas”.
Las tres leyes mencionadas y el sistema de concesiones se encuentran vigentes desde el menemismo (en el caso de la Ley de Emergencia Pública, en rigor, fue aprobada en 2002 y no durante ese período) y ninguna de éstas fue derogada por el Poder Legislativo durante el período 2003-2014.
Incluso, la ley de emergencia económica viene siendo prorrogada desde ese año, a pesar de que fue pensada como una legislación para un contexto de crisis (ver esta nota). Algunas de ellas sí sufrieron modificaciones, pero que no alteraron el espíritu de la ley.
En el caso de “la privatización del petróleo y el gas” no es cierto lo que se afirma, ya que -como se explicó más arriba- el Decreto 1277/12 que reglamentó Ley de Soberanía Hidrocarburífera derogó varios decretos relacionados con la actividad petrolera que fueron sancionados en 1989, meses después de que Carlos Menem asumiera su primera Presidencia.
“La democracia se construye sobre gobiernos anteriores. Algunas leyes se rectifican y otras no. No necesariamente derogar es algo positivo para una gestión; existe también la posibilidad de reformar”, aclaró Noel Alonso Murray, directora general de la Fundación Directorio Legislativo, una ONG dedicada al estudio del trabajo parlamentario.
Sobre este punto coincidió el politólogo de la Universidad de Buenos Aires (UBA) y experto en datos y estadísticas legislativas Andy Tow, al afirmar que “no es necesario derogar toda una ley para que lo que se considera negativo pierda vigencia. Basta modificarla, derogar algunos artículos, reemplazarlos, o dictar una nueva ley, que por regla general reemplaza la vieja”.
“Es una cuestión de técnica legislativa -aclaro Tow y destacó-. En lo político lo importante es si se modifica el conjunto de reglas relevantes que se aplican a un campo o actividad”, concluyó, respecto de la relevancia de tomar como indicador de cambio la derogación de leyes.
Agradecemos al lector @littlefaceok, quien nos sugirió este chequeo.
Corrección 10/11/2014:
Chequeado recibió el siguiente mail del presidente de Shell Argentina, Juan José Aranguren:
“Me llamo Juan José Aranguren y trabajo en Shell desde hace 35 años, de los cuales en los últimos 12 me he desempeñado como presidente de su filial en Argentina. Soy un asiduo lector del site chequeado.com y/o de los artículos que con frecuencia le publica La Nación, los cuales me resultan muy interesantes e instructivos. En ese sentido, me permito hacer un comentario/corrección respecto de una afirmación que hicieron en el análisis que lleva por título el de este correo electrónico.
En el mismo Uds. dicen que: “Entre otros ejemplos, pueden mencionarse:…la Ley 26.741 Soberanía Hidrocarburífera de 2012, que expropió el 51% de las acciones de YPF y se derogó la libre disponibilidad de recursos, libertad de precios y libre exportación e importación y reemplazó a los decretos de Hidrocarburos de 1989”, agregando más abajo “En el caso de ‘la privatización del petróleo y el gas’ no es cierto lo que se afirma, ya que -como se explicó más arriba- la Ley de Soberanía Hidrocarburífera derogó varios decretos relacionados con la actividad petrolera que fueron sancionados en 1989, meses después de que Carlos Menem asumiera su primera Presidencia”.
Dichas afirmaciones (siguiendo la consigna de chequeado.com) son Falsas. En efecto, la ley 26.741 (es decir el Congreso) no derogó ninguno de los artículos conocidos como los que dispusieron la ‘desregulación petrolera’ (1055, 1212 y 1589 todos del año 1989), ratificados posteriormente por la Ley 25148 de Delegación de Facultades.
El Decreto 1277/12 (es decir el poder ejecutivo) en forma totalmente ilegítima e inconstitucional es quién lo hizo al reglamentar la ley 26741, llevándose por delante no una sino cinco leyes, contraviniendo lo estipulado por el Art. 31 de nuestra CN.
Sobre el particular, desde Shell elevamos oportunamente (Agosto 2012) un recurso impropio, que obviamente solo obtuvo el silencio de la administración como respuesta.
Atentamente,”
Efectivamente, no fue la Ley de Soberanía Hidrocarburífera la que derogó los Decretos 1055, 1212 y 1589 del año 1989, sino el decreto reglamentario de esa ley (el 1277/12). Así se consignó en el Google Doc sobre el que se construyó la tabla comparativa, aunque no así en el texto de esta nota que hoy ya fue corregido.
Fecha de publicación original: 28/10/2014
Comentarios
Por ejemplo, la Ley 26425 no derogó a la Ley 24241. Suprimió, sí el sistema de capitalización, pero dejó intacta la estructura de la ley menemista, con su sistema de topes de todo tipo, que lleva a que los beneficios sean muy bajos con relación al salario en actividad; por sólo mencionar uno de sus aspectos más cuestionables.
Algo similar podría decirse respecto de la Ley 26741, de expropiación parcial de YPF.
En cuanto a la Ley 26733 de riesgos del trabajo, lejos de constituir una mejora, importa un retroceso respecto de la jurisprudencia de la Corte y del fuero laboral dictadas durante la vigencia de la ley.
Me llamo Juan José Aranguren y trabajo en Shell desde hace 35 años, de los cuales en los últimos 12 me he desempeñado como presidente de su filial en Argentina.
Soy un asiduo lector del site chequeado.com y/o de los artículos que con frecuencia le publica La Nación, los cuales me resultan muy interesantes e instructivos.
En ese sentido, me permito hacer un comentario/corrección respecto de esta nota.
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