Domínguez: “El problema del acceso a la vivienda está directamente relacionado con la falta de un reordenamiento poblacional. El 33% de la población se concentra en el 1% del territorio”

“El problema del acceso a la vivienda está directamente relacionado con la falta de un reordenamiento poblacional en la Argentina. El 33% de la población se concentra en el 1% del territorio y es allí donde el mercado encuentra su negocio”, señaló Julián Domínguez, presidente de la Cámara de Diputados (FPV).

Aunque los datos de la concentración de la población son aún más graves que lo señalado por Domínguez, este no sería un factor clave en el déficit habitacional que sufre el país.

La concentración de la población argentina es un hecho real: el 33% de la población vive en el 0,015% del territorio y cerca del 60% lo hace en el 1% del país, según esta visualización realizada por Pablo Paladino, en base a datos del Censo 2010.

El problema habitacional, sin embargo, no está relacionado con la concentración de la población. “Hoy el 50% de la población mundial vive en ciudades, que son territorios chicos respecto de los territorios totales, y en los países de América Latina, más del 75% de la población vive en ciudades, las que ocupan un bajo porcentaje de superficie del área total de la región”, señaló Cynthia Goytia, directora de la Maestría de Economía Urbana de la Universidad Torcuato Di Tella y del Centro de Investigación en Política Urbana y Vivienda (CIPUV).

Y citó como ejemplos diferentes casos: “Hay muchos países muy extensos, con la población concentrada en unas pocas ciudades, y sin déficit habitacional (por ejemplo Canadá) o con un déficit bajo (como Chile). En cambio, en los países de África, donde los núcleos de población se distribuyen por el territorio, hay déficit de vivienda generalizado”.

“El déficit habitacional se debe a que el precio del suelo subió mucho en los últimos años. En la región del Gran Buenos Aires, con la llegada de los barrios cerrados, los precios del suelo subieron y se acabaron los loteos populares, que eran la manera que tenían los sectores con menos recursos para acceder a la vivienda”, explicó Raúl Fernández Wagner, urbanista investigador del Instituto del Conurbano de la Universidad Nacional de General Sarmiento (ICO-UNGS).

Y agregó que “invertir en ladrillos fue la inversión más rentable en los últimos años, lo cual llevó a una especulación que infló artificialmente el precio del suelo. Es un fenómeno que se observa en todo el país y no sólo en las grandes áreas metropolitanas”. Los especialistas coinciden en la necesidad de regular el mercado.

De acuerdo con María Cristina Craviño, investigadora de la UNGS, “la migración a las grandes ciudades es un factor que genera presión sobre el precio del suelo”.

“Por eso es importante -agregó- regular el mercado y fortalecer a las economías regionales, para que se generen puestos de trabajo fuera de los grandes aglomerados”, pero aclaró que esto no implica un “reordenamiento poblacional”, como señaló Domínguez, sino la generación de incentivos para mejorar la distribución.

La región donde más viviendas hacen falta es el Gran Buenos Aires, según los datos del Censo 2010, si se considera a las viviendas que están en una situación irrecuperable y a los hogares que cohabitan, es decir familias que comparten una sola vivienda. Sin embargo, en términos relativos, es en las provincias del Norte del país donde hay un mayor porcentaje de viviendas en mal estado. En Santiago del Estero, por ejemplo, el 20% de las viviendas está en un estado irrecuperable (ver datos).

Entre los factores que más afectan, Goytia enumeró, además de los movimientos migratorios y las fallas en el alcance de los programas de vivienda social, la falta de crédito hipotecario: “La escasez extrema de crédito hipotecario, que se mantiene en niveles mínimos históricos (por debajo del 1% del PBI), reduce las posibilidades de acceso de los hogares de ingresos medios, que se fueron sumando al déficit” (ver: Macri: “[Los créditos hipotecarios del Banco Ciudad] tienen la tasa más baja del mercado”).