Dónde se encuentran las reservas internacionales y qué hay en la bóveda del Banco Central

Una de las precandidatas a presidente de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich, aseguró durante una entrevista concedida al programa “+Realidad”, que se emite por La Nación +, que si es elegida presidenta lo primero que va a hacer “es entrar con una cámara de televisión al Banco Central” con el objetivo de “mostrarle a la gente qué Banco Central te deja” la actual gestión de Alberto Fernández (Frente de Todos).

¿Cómo están compuestas las reservas de nuestro país? ¿Cuál es su estado en la actualidad? ¿Dónde se guardan? Te lo contamos en esta nota.

Cómo están compuestas las reservas internacionales de la Argentina

Como se explica en esta nota, las reservas internacionales de un país son los fondos en dólares u otras monedas extranjeras que son utilizadas para hacer frente a las necesidades de divisas que demandan las importaciones, el pago de la deuda externa o los gastos de sus ciudadanos en el exterior (turismo o compra de bienes y servicios).

Estas reservas son controladas por el Banco Central, e incluyen recursos públicos (como los provenientes de los préstamos) y privados (como los encajes bancarios, un porcentaje de los dólares de los ahorristas que quedan inmovilizados en una cuenta del BCRA, con el objetivo de que estén disponibles si ocurre una alta demanda de divisas).

El Fondo Monetario Internacional (FMI) define a las reservas como los “activos externos bajo el control de las autoridades monetarias para satisfacer necesidades de financiamiento de la balanza de pagos, para intervenir en los mercados cambiarios a fin de influir sobre el tipo de cambio, y para otros fines conexos (como el mantenimiento de la confianza en la moneda y la economía y servir como base para el endeudamiento externo)”.

Las reservas suelen dividirse en reservas brutas y netas. La primera definición comprende a la totalidad de los activos externos con los que cuenta el país, mientras que las reservas netas son aquellas divisas en billete que el Banco Central tiene como de libre disponibilidad. Es decir, que puede utilizar de forma inmediata.

Actualmente, las reservas brutas de la Argentina se componen -como se explica acá– del swap de monedas con China, oro, liquidez de depósitos en dólares, préstamos del Banco Internacional de Pagos y los Derechos Especiales de Giro (DEGs), un activo creado por el FMI que complementa las reservas oficiales de los países miembros.

De acuerdo con los datos del BCRA, al 31 de julio último la Argentina poseía US$ 24.092 millones de reservas brutas. Se trata de un nivel un 38,8% inferior al valor registrado el 31 de julio de 2022. 

Según el balance semanal de la entidad, el 69,1% de las reservas actuales son divisas (es decir, monedas de otros países); el 16,3% son colocaciones realizables en divisas (inversiones realizadas en el exterior con monedas extranjeras); el 14,3%, existencias de oro; y el restante 0,3%, proviene de convenios multilaterales de crédito.

Las reservas netas no son informadas oficialmente, pero varias consultoras económicas realizan ese cálculo a partir de la información pública suministrada por el BCRA. Para Ecolatina -consultora fundada por el ex ministro de Economía Roberto Lavagna-, actualmente se encuentran en terreno negativo, en el orden de – US$ 7 mil millones.

Qué hay en las bóvedas del Banco Central

¿Todas las reservas de la Argentina se encuentran guardadas en el Banco Central? No. De hecho, una mínima parte está guardada en la sede central de la autoridad monetaria de nuestro país.

Actualmente, en el BCRA hay lingotes de oro, una cantidad pequeña de dólares para abastecer a los bancos y canalizar la demanda de sus clientes, y pesos. 

Martín Redrado, presidente del Banco Central entre septiembre de 2004 y enero de 2010 (durante las gestiones de Néstor Kirchner y Cristina Fernández de Kirchner) y actual asesor económico de uno de los precandidatos presidenciales de Juntos por el Cambio, Horario Rodríguez Larreta, dijo a Chequeado que “lo que se puede encontrar en el Tesoro del BCRA, que está en el primer subsuelo, es lo que se conoce como dólares transaccionales, que abastecen la demanda de los bancos”.

El economista señaló que, según sus cálculos, actualmente hay unos U$S 150 millones de dólares “para los movimientos diarios que los bancos necesitan de dólares”. Además, precisó que, cuando se necesitan, los dólares físicos “se importan desde la Reserva Federal de los Estados Unidos”.

En el mismo sentido, Alejandro Vanoli, titular del BCRA entre octubre de 2014 y el 10 de diciembre de 2015 (en el final del segundo mandato de Fernández de Kirchner), señaló a este medio que “las reservas están compuestas por tenencias de depósitos en bancos internacionales como contrapartida de líneas de crédito, tenencias de DEGs contabilizadas en el FMI y depósitos en dólares que tienen los bancos por encajes. También hay oro: una parte está en el Central y otra en el exterior”.

Dónde se encuentran las reservas de la Argentina

Consultados por Chequeado, desde el área de Prensa del BCRA indicaron que la entidad “cumple con las normas de publicación de información del FMI y los organismos internacionales, la misma información que brinda cualquier Banco Central del G20”.

Y presentaron un informe de reservas correspondiente al mes de junio, que indica que, de un total de US$ 27.925 millones existentes al 30 de junio (último dato disponible), US$ 23.030 (el 82,5%) eran reservas en moneda extranjera, de las cuales US$ 20.735 (el 74,2% del total de las reservas) se encontraban depositadas en bancos ubicados en el exterior.

Al respecto, Redrado indicó que la mayoría de las reservas se encuentran en el Banco de Basilea (BIS, por sus siglas en inglés), “cuyos accionistas son los bancos centrales de todo el mundo”. Vanoli agregó que parte de las reservas también se encuentran en el Banco Popular de China y otras entidades financieras internacionales. Esto le permite al BCRA obtener una mínima rentabilidad por el dinero depositado.

Redrado afirmó que, si bien la situación actual “es crítica”, con reservas netas negativas, “aún si hubiera una buena cantidad de reservas no estarían en el BCRA” en forma física.