Superávit fiscal: los gastos en jubilaciones aumentaron en noviembre, pero siguen siendo la principal fuente del ajuste en 2024

El Gobierno nacional anunció que en noviembre logró nuevamente el superávit primario y financiero, con lo que acumula un resultado fiscal positivo en los 11 meses de 2024, a excepción de julio que registró déficit financiero. 

En un comunicado, el Ministerio de Economía de la Nación celebró el dato, y aseguró que “se continúa consolidando el ancla fiscal del programa de gobierno que, aún con el resultado estacionalmente negativo de diciembre, arrojará un superávit financiero entorno a 0,3% del PIB para el total del año 2024”.

Con los resultados de noviembre, el Gobierno acumuló en los primeros 11 meses del año un superávit primario de $ 11.706.855 y un superávit financiero de $ 3.322.090.

En esta nota, te contamos cómo logró el Gobierno el superávit fiscal en noviembre y qué partidas fueron las más afectadas por los recortes. 

Los gastos en jubilaciones aumentaron en términos reales por primera vez en el año

En noviembre de 2024 los ingresos corrientes cayeron un 7% real (es decir, considerando el efecto de la inflación) con respecto a igual mes de 2023. De este modo, para obtener un resultado positivo el Gobierno tuvo que reducir los gastos a un ritmo mayor que la caída de los ingresos. 

Efectivamente, los gastos primarios (la suma de los gastos corrientes y de capital, excluidos los pagos en concepto de intereses de la deuda) cayeron en noviembre un 27,6% real en noviembre. 

De ese total, el 71,2% del ajuste provino de los gastos corrientes, y el restante 28,8%, de los gastos de capital (inversiones en obras o compra de bienes para la producción). 

Dentro de los gastos corrientes, las prestaciones sociales cayeron 10,3% real con respecto a noviembre de 2023, y representaron el 23,7% del ahorro generado por la administración pública ese mes. 

En este grupo se destaca que por primera vez en el año los gastos en jubilaciones y pensiones aumentaron en términos reales con respecto a igual mes del año previo (un 3,6%). 

Al respecto, la Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública (ASAP) señaló en este trabajo que este resultado ocurrió en parte debido a que el aumento de los haberes establecido por la fórmula de movilidad (3,47% para noviembre) fue superior a la inflación de ese mes (2,4%). 

Como se explica en esta nota, en noviembre último los haberes superiores a la jubilación mínima aumentaron 6,7% real interanual, mientras que la mínima, por efecto del congelamiento del bono de $ 70 mil desde marzo último, cayó 4,3%. 

En tanto, otras prestaciones sociales como las asignaciones familiares, las pensiones no contributivas y los aportes al PAMI cayeron un 32,6% real interanual y aportaron el 35,3% del total del ajuste. 

Al respecto, la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC) indicó en un estudio reciente que esta caída se vio reflejada en menores partidas (en términos reales) para la Tarjeta Alimentar, cuyo poder de compra cayó 14,3% real en lo que va de 2024. 

El informe también remarcó una caída del 59,3% real en los montos destinados a los programas Volver al Trabajo y Acompañamiento Social (ex Potenciar Trabajo), que redundó en un 53% de pérdida del poder adquisitivo para los beneficiarios. 

Además, según la OPC cayeron las partidas destinadas a la atención médica a beneficiarios de pensiones no contributivas (12,4%) y las Becas Progresar (64,2%).

También se registraron recortes en los gastos de funcionamiento del Estado, que cayeron 22,7% y explicaron el 15,4% del ajuste total de los gastos; las transferencias a provincias, que tuvieron una baja del 67,9% y aportaron el 13,4% del ahorro del mes; los subsidios económicos (-21,9% interanual, el 5,9% del total); y las transferencias a las universidades (-27%, con un aporte del 4,3% al ajuste). 

Pese al aumento de noviembre, las jubilaciones siguen siendo la principal fuente del ajuste

En el acumulado de los 11 meses del año los gastos primarios cayeron 27,6%. En este universo, los gastos corrientes cayeron 22,8% y aportaron el 75,3% del total del ajuste producido en el año, mientras que los gastos capital tuvieron un retroceso del 77,4% y explicaron el 24,7% restante. 

Pese a la mejora producida en el mes de noviembre, los gastos en jubilaciones y pensiones se ubicaron en los primeros 11 meses de 2024 un 16,8% por debajo que en igual período de 2023. Esto explica el 19,3% del ajuste total del año. En tanto, el resto de los programas sociales perdieron un 24% y aportaron el 18,7% del ahorro total. 

Por otro lado, los gastos de funcionamiento cayeron el 22,1% en lo que va del año, y representaron el 13,1% del total del ajuste. Le siguieron los subsidios (que cayeron 28,8% real y explicaron el 10,9% del total ahorrado); las transferencias a las provincias (-67,8%, aportaron el 9% al total) y a las universidades (-21,3%, el 2,6% del total).