Menos transparencia a 22 años del atentado contra la AMIA

Hoy se cumplen 22 años del atentado contra la AMIA, en el que murieron 85 personas. Durante la investigación del atentado se descubrió que los fondos reservados de los organismos de inteligencia fueron usados para sobornar a uno de los supuestos involucrados, Carlos Telleldín.

El Estado argentino, en 2005, se comprometió con las víctimas ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos, a transparentar el uso de los fondos de inteligencia. Sin embargo, no hubo avances hasta 2015, luego de la muerte del fiscal federal Alberto Nisman que investigaba el caso AMIA, cuando se decidió que sólo serían reservados algunos de los gastos, en los que se justificara la necesidad del secreto.

Una resolución del gobierno de Mauricio Macri, sin embargo, volvió a retroceder en este sentido, ya que estableció que todos los gastos volverían a ser reservados. En su presentación ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, el Gobierno admitió: “La Agencia de Inteligencia afirma que se está trabajando en un sistema de rendición de gastos y conservación de documentación relativa a los gastos. Hasta tanto no se implemente dicho sistema podría considerarse la existencia de un retroceso en lo que respecta a la transparencia de utilización de fondos reservados”.

Por otra parte, el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), junto con Memoria Activa, requirieron a la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) información sobre el cambio en la reglamentación. La Agencia esta contestó que “se encuentran vigentes diversos procedimientos y controles que conforman un sistema de administración de fondos que responde a los más elevados estándares de transparencia y profesionalismo”, pero no aclara cuáles son. Para el CELS, “la respuesta de la AFI no se refiere a ninguna normativa concreta vigente (…) y pretende mantener la reserva de estos circuitos. La regresión está materializada”.