Alberto Fernández: “Recibimos un país que en 4 años había desinvertido de manera sistemática en la Educación, con una caída de más del 30% del presupuesto educativo nacional”

En la apertura de las sesiones ordinarias del Congreso, el presidente de la Nación, Alberto Fernández, se refirió a la situación del país al momento de su llegada a la Casa Rosada en diciembre de 2019 y señaló: “Recibimos un país que durante 4 años había desinvertido de manera sistemática en la Educación, con una caída de más del 30% del presupuesto educativo nacional”.

Efectivamente, durante la Presidencia de Mauricio Macri (Cambiemos) hubo una reducción de los recursos destinados a la Educación, tanto por parte de la Nación como de las provincias, en términos reales, es decir teniendo en cuenta el impacto de la inflación. 

Entre 2016 y 2019, la inversión educativa asignada por el Gobierno nacional tuvo una caída del 33,5% en términos reales, como se explicó en esta nota.

De acuerdo con la Ley de Educación Nacional, la Nación y las provincias deben destinar un 6% del Producto Bruto Interno (PBI) a la inversión en educación consolidada. Sin embargo, esta meta sólo se cumplió en 2015, durante el último año del gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, cuando se alcanzó la cifra del 6,1% del PBI, según un informe del Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (Cippec). 

El mismo estudio indica que el gasto destinado a Educación por parte del Gobierno nacional y las provincias cayó año a año hasta tocar el piso del 4,8% del PBI en 2019, el último año de la gestión de Cambiemos. Esto representa el indicador más bajo desde 2007.  

Si solo se considera el gasto de la Nación, el gasto educativo nacional alcanzó un punto máximo del 1,6% del PBI en 2015 y luego decreció durante los 4 años de gobierno de Cambiemos hasta llegar al 1,1% del PBI en 2019.

“La importancia del Estado nacional en el financiamiento radica en la flexibilidad de sus recursos, ya que tiene mayor posibilidad de destinar los recursos a políticas educativas que promuevan la equidad y disminuyan la desigualdad estructural entre las provincias”, explicó a Chequeado Agustín Claus, especialista en políticas educativas de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso).

Además, Claus agregó que “el retroceso del Estado nacional en el financiamiento educativo refuerza la desigualdad entre las provincias porque su función es compensar las desigualdades estructurales entre las mismas. Disminuir el presupuesto implica discontinuar políticas que incorporen dispositivos tecnológicos, infraestructura y equipamiento escolar, formación docente, Becas Progresar, entre otras”.