No está demostrado que ancianos en Noruega hayan muerto por la vacuna contra el COVID-19, y las autoridades no suspendieron la vacunación a mayores

Circulan en Facebook posteos que aseguran que la vacuna contra el coronavirus desarrollada por la farmacéutica Pfizer y la empresa BioNTech causó 13 muertes en Noruega y que, por ello, las autoridades de ese país ordenaron suspender la vacunación a adultos mayores  en riesgo.

Las afirmaciones son falsas: la Agencia Noruega de Medicamentos (NOMA) afirmó que hasta el 26 de enero último se reportaron 33 informes de muertes sospechosas de personas residentes en hogares de ancianos que habían recibido la vacuna, pero tras analizar 13 casos no pudo concluir que los decesos estuvieran relacionados con la inoculación recibida.

Por otro lado, el director médico de la NOMA, Steinar Madsen, aseguró a la revista científica British Medical Journal (BMJ, por sus siglas en inglés) que, tras los fallecimientos reportados, pidieron a los médicos que realicen una evaluación adicional de las personas muy enfermas. Pero no prohibió el uso de la vacuna para ese grupo.

Uno de los posteos falsos sostiene: “Noruega reportó 13 muertos ligados directamente a la aplicación de Pfizer y Biotech” (sic). Y comparte el link a un artículo en el que se asegura que “han sido 23 las personas fallecidas en Noruega tras recibir la vacunación. De esas 23, las autoridades sanitarias ya habrían confirmado que hay 13 de las que se tiene la certeza que la muerte les podría haber sido provocada, directamente, por los efectos secundarios de las vacunas”.

Un segundo posteo, en tanto, afirma que “en Noruega suspenden la vacunación Covid a ancianos en riesgo”, y comparte un artículo del sitio Crónica en el que, por el contrario, se reproduce información oficial y se sostiene que no se puede concluir que las muertes estuvieran ligadas a la vacuna.

Qué dijeron las autoridades noruegas

La NOMA afirmó en su último reporte sobre reacciones adversas de la vacuna contra la COVID-19 que hasta el 26 de enero último se reportaron “33 informes que involucran muertes de residentes de hogares de ancianos”.

El informe destaca que “muchos de los residentes de hogares de ancianos que han sido vacunados están muy frágiles o son pacientes con enfermedades terminales”. Y sostiene que “cada día una media de 45 personas mueren en hogares de ancianos noruegos. Por lo tanto, las muertes que ocurren cerca del momento de la vacunación son esperables, pero eso no implica una relación causal con la vacuna”.

Finalmente, se destaca que “en varios de los informes fatales el reportero afirma que no se sospecha ningún vínculo con la vacunación y que se informa de la muerte en aras de la exhaustividad”. Pero se reconoce que si bien “muchos de los pacientes también eran frágiles antes de la vacunación, en el caso de algunos de los pacientes más frágiles, no se puede descartar que las reacciones adversas relativamente leves tras la vacunación contribuyeron a un curso más severo en su condición general o enfermedad subyacente”.

De todos modos, se insiste en que “estos informes de casos individuales no constituyen actualmente una señal de una nueva reacción adversa, y por lo tanto no proporcionan una base para revisar la información de la vacuna”.

En un comunicado previo, la NOMA había señalado que hasta el día 14 de enero último se reportaron 23 informes de muertes sospechosas en conexión con el lanzamiento de la vacuna contra el coronavirus, según se indicó en esta nota de Maldita. De estas, 13 ya han sido evaluadas por la agencia y el Instituto Noruego de Salud Pública (NIPH) y no han podido concluir que las muertes fueran causadas por la vacuna, según aseguró Sigurd Hortemo, de la Agencia Noruega de Medicamentos, al sitio de fact-checking noruego Faktisk.

Por su parte, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) agregó en un comunicado que “hay más de 200.000 adultos mayores en Noruega, siendo el 3,7% de la población. En Noruega fallecen alrededor de 340-400 adultos mayores por semana en casas de retiro y de cuidados crónicos. Por lo que estos decesos podrían estar en las frecuencias habituales”.

Además, señaló que “como cualquier medicamento, las vacunas pueden presentar algunos efectos adversos. La incidencia de eventos graves es extremadamente baja y no tiene comparación con los grandes beneficios (incluso erradicación de enfermedades) que se obtienen de su aplicación”. Y agregó: “Cuando un evento adverso se presenta tras la administración de una vacuna es necesario investigar dicho evento y las circunstancias en que se produjo o habría alta posibilidad de adjudicarlo, erróneamente, a la vacunación”.

Finalmente, este viernes la Agencia Europea de Medicamentos concluyó que no hay relación entre las muertes y la aplicación de la vacuna. “Los datos no mostraron un vínculo con la vacunación y los casos no plantean un problema de seguridad”, indicó el ente regulador en un comunicado.

Recomiendan evaluaciones más exhaustivas

Las autoridades sanitarias noruegas no suspendieron la vacunación a ancianos en riesgo, como señala uno de los posteos falsos, pero sí pidieron realizar una “evaluación adicional” a personas enfermas para descartar posibles efectos adversos.

Madsen aseguró a la revista científica BMJ que, tras los fallecimientos reportados “estamos pidiendo a los médicos que continúen con la vacunación, pero que realicen una evaluación adicional de las personas muy enfermas cuya afección subyacente podría verse agravada”.

Esta evaluación, según Madsen, incluye discutir los riesgos y beneficios de la vacunación con el paciente y sus familias para “decidir si la vacunación es el mejor curso” y determinar si los beneficios de la vacunación superan los riesgos de los posibles efectos secundarios.

Noruega priorizó la vacunación de ancianos

El informe de la NOMA destaca que los grandes estudios sobre la vacuna de Pfizer y BioNTech no incluyeron a pacientes con enfermedades inestables o agudas e incorporaron a pocos participantes de más de 85 años de edad. Si a esto le sumamos que Noruega ha dado prioridad de inmunización a los residentes de hogares de ancianos con enfermedades y afecciones previas, aseguran que “se espera que puedan producirse muertes cerca del momento de la vacunación”.

Aun así, las autoridades sanitarias noruegas afirman que el número de incidentes hasta ahora no es alarmante y está en línea con las expectativas. “Se han administrado más de 20.000 dosis de la vacuna durante las últimas semanas en Noruega y cada semana se producen alrededor de 400 muertes entre los residentes de hogares de ancianos”, señaló Steinar Madsen a BMJ.

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Este chequeo es parte de la iniciativa Third Party Fact-checker de Facebook en la Argentina. En los casos de fotos y videos trabajamos con imágenes trucadas o sacadas de contexto y siempre analizamos en conjunto las imágenes junto con el texto con el que fueron presentadas.