Frecuencia del subte en hora pico: mejoró desde que asumió Rodríguez Larreta, pero todavía está lejos de la promesa de los tres minutos

Dos meses después de asumir, el jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, se comprometió a mejorar el servicio del subte y prometió que tendrían una frecuencia de tres minutos o menos en hora pico. Sin embargo, los datos no acompañan su promesa. En esta nota te contamos cuánto se avanzó y qué líneas lo cumplen.

Larreta aseguró en Twitter a comienzos de 2016 que se comprometía “a bajar la frecuencia del subte a menos de 3 minutos”. En la página oficial del Gobierno de la Ciudad dice que estaba entre los planes del jefe de Gobierno para 2017 “que los porteños puedan tener una formación de subte cada 3 minutos”. Sin embargo, ya sea cada tres minutos o cada menos de tres minutos, la promesa -que estaba estipulada para 2017- todavía está lejos de cumplirse.

Nos comprometemos a bajar la frecuencia del subte a menos de 3 minutos, incorporando más de 300 vagones con AA pic.twitter.com/RSz788wv3G

— Horacio Rodríguez Larreta (@horaciorlarreta) February 22, 2016

Desde la asunción de Rodríguez Larreta en diciembre de 2015 mejoró la frecuencia en hora pico, según los datos de Subterráneos de Buenos Aires Sociedad del Estado (SBASE). Sin embargo, desde febrero de 2016 -cuando se comunicó este compromiso- ninguna línea cumplió esta promesa todos los meses de año. Pero, además, 2018 es el peor año de la gestión del nuevo jefe de gabinete en este ítem: el compromiso sólo se cumplió en dos meses -julio y octubre- y sólo en la Línea B.

Si se toma un promedio de todos los meses de 2018, la que tuvo mejor frecuencia en hora pico -según el sitio oficial, de 8 a 9 de la mañana- fue la línea B con un tren cada 3:11 minutos. La lista la completan la línea D (3:14), la línea A (3:18), la línea C (3:21), la línea H (4:41) y la línea E (6:52).

Desde el sector de prensa de Subterráneos de Buenos Aires contestaron a Chequeado que los tres minutos son un promedio y que “así como muchas veces pasan trenes cada menos de tres minutos, hay otras en donde el servicio de subte, que transporta 1.350.000 pasajeros por día, se ve afectado por múltiples variables” como personas descompuestas, mayor afluencia de pasajeros en días puntuales o medidas de fuerza gremial. Por esto, desde SBASE consideran “que las líneas A, B, C y D se mantuvieron alrededor de los tres minutos a lo largo de todo el año y que en ellas se ha cumplido el compromiso”. Sobre las líneas E y H aseguraron que en ellas “se realizaron obras de vías”.

Sin embargo, estas pequeñas demoras generan “un aumento en la cantidad de personas que suben al subte, implica que haya más amontonamiento” e impacta directamente en la calidad del servicio, según explicó en esta nota Juan Pablo Martínez, miembro del Instituto de Transporte de la Academia Nacional de Ingeniería y ex director del Posgrado en Ingeniería Ferroviaria de la Universidad de Buenos Aires (UBA).

La frecuencia “depende, en líneas generales, de la cantidad de formaciones en circulación, su velocidad comercial, el sistema de señales y el estado de vías”, explicó a este medio Federico Conditi, director de Transporte y Telecomunicaciones de la Defensoría del Pueblo de la Ciudad.

Como se ve en este gráfico de la Defensoría, la frecuencia empeora claramente en otras horas no informadas en la página oficial de la Ciudad -que sólo publica de 8 a 9 de la mañana-, como por ejemplo después de las 19.

Pero, como es obvio, la frecuencia impacta en la calidad del viaje según cuánta gente se traslade en cada línea. La B es la que más pasajeros transporta: en 2018 tuvo 7,4 millones de pasajeros en promedio por mes. La siguen la D (6,6 millones), la A (5,1 millones) y la C (4,5 millones). Las líneas con peor frecuencia -la H (2,6 millones) y la E (1,8 millones)-, transportan muchos menos pasajeros.

Igualmente, según Conditi, en las líneas que transportan más pasajeros -como la B- los tres minutos de servicio que se fijó como objetivo “resultan insuficientes para absorber la demanda del horario pico, precisándose alcanzar una frecuencia menor si se pretende mejorar el confort de viaje de los usuarios”.