Es falso que el uso de barbijos provoca que inhalemos el dióxido de carbono que respiramos y que se “envenenen los pulmones”

Circula en Facebook un posteo que sostiene que el uso de las mascarillas o barbijos impide que se expulse el dióxido de carbono que eliminamos al respirar. Esto es falso, según pudo comprobar Chequeado, y ya fue verificado por este medio y por otros chequeadores en todo el mundo.

El posteo, con más de 500 compartidos, tiene una foto de una mujer con un barbijo encadenado a su oreja, mientras que una cruz roja tapa la mascarilla. Sobre la foto una leyenda blanca se destaca: “Tu propio bióxido de carbono (CO2) te está envenenando tus pulmones”. En el posteo, la página que publicó la imagen aclara: “Fe de Erratas: Dióxido”.

El barbijo no provoca que inhalemos nuestros desechos exhalados y el CO2

Chequeado ha desmentido en numerosas oportunidades (ver acá, acá y acá) contenidos que sostenían que el uso de los barbijos produce hipoxia -déficit de oxígeno en un organismo- e hipercapnia -exceso de dióxido de carbono (CO2) en la sangre arterial-. Así como también estos contenidos fueron verificados en otros países alrededor del mundo: AFP Factual en Chile, Maldito Bulo en España, Efecto Cocuyo en Venezuela, Bolivia Verifica y Ecuador Chequea.

En este sentido, el argumento que sostiene el posteo verificado es falso. Al utilizar estas mascarillas o barbijos no se respira ningún desecho significativo ni CO2, según explican los especialistas.

Maldito Bulo consultó a María Elisa Calle, experta en Epidemiología y Salud Pública y profesora de la Facultad de Medicina de la Universidad Complutense de Madrid. “Los tejidos utilizados dejan pasar el gas y el oxígeno es un gas. Respiramos oxígeno mezclado con nitrógeno y espiramos CO2, que también es un gas. Si fuera cierto, los cirujanos que intervienen durante varias horas, estarían muertos y no sólo cansados”, explicó Calle.

Además, la experta señaló que las mascarillas no son estancas, por lo que entra aire por los laterales y la parte superior y con ese aire entra el oxígeno y se elimina el dióxido de carbono.

En este punto coincidió la médica cirujana María Jesús Martínez Aquino, citada por el medio venezolano Efecto Cocuyo. “Las mascarillas médicas están diseñadas para permitir que haya intercambio gaseoso: entre oxígeno y salga dióxido de carbono sin permitir que entren moléculas o partículas más grandes”, señaló.

La sección de verificación de datos de la agencia francesa AFP consultó al doctor Daniel Pahua, académico de Salud Pública de la Universidad Autónoma de México (UNAM), quien explicó que al utilizar los barbijos como los de la imagen que verifica Chequeado no se respira ningún desecho significativo ni CO2, “no se acumulan [los desechos] al interior porque hay muchos puntos de fuga alrededor”.

Emilio Herrera, docente del programa de fisiopatología de la Universidad de Chile, afirmó en diálogo con AFP: “Nuestros desechos respiratorios son gases con partículas muy pequeñas que sí atraviesan la mascarilla. El principal desecho es el dióxido de carbono, cuyas partículas también la atraviesan y no se acumula”.

Por último, AFP también consultó al epidemiólogo del Instituto Nacional de Salud de Colombia, Carlos Pinto, quien añadió que las mascarillas -como la de la imagen que verifica Chequeado– tienen como función filtrar gotas de saliva y mucosidad, “pero aún permiten que fluya el aire. Respirar CO2 en exceso es peligroso para el cuerpo. Sin embargo, las personas que usan tapabocas quirúrgicos o de tela no tienen ningún peligro”.

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Este chequeo es parte de la iniciativa Third Party Fact-checker de Facebook en la Argentina. En los casos de fotos y videos trabajamos con imágenes trucadas o sacadas de contexto y siempre analizamos en conjunto las imágenes junto con el texto con el que fueron presentadas.