Bloqueo de X en Brasil: te explicamos lo que está pasando con la pelea legal entre Alexandre de Moraes y Elon Musk

El 30 de agosto, el juez Alexandre de Moraes, del Supremo Tribunal Federal de Brasil (STF), ordenó la suspensión a nivel nacional de X (ex Twitter). Así, agregó al país a una lista de naciones donde no está presente esta plataforma de redes sociales. El 31 de agosto, la aplicación mostró inestabilidad y el contenido no se cargó como de costumbre, lo que indica que los proveedores de internet del país están cumpliendo la orden.

La decisión se produjo tras la negativa del director ejecutivo de la empresa, Elon Musk, de nombrar a un representante legal en Brasil y su incumplimiento de las órdenes de moderación de contenidos de Moraes. El 28 de agosto, Moraes incitó a Musk (a través de una polémica publicación en X) a cumplir con la legislación brasileña en un plazo de 24 horas. El empresario respondió con sarcasmo, publicando memes generados con inteligencia artificial y llamó al juez “censor” y “dictador”.

Esto es lo que necesitás saber sobre el caso:

¿Por qué el Superior Tribunal Federal de Brasil mencionó a Elon Musk?

Musk ha sido investigado en Brasil desde la primera semana de abril. En el expediente #4957 está bajo la mirada de la Justicia por obstrucción a la justicia, participación en una organización criminal e incitación al delito. En la causa conocida como “Milicias digitales”, que instruye como relator el juez De Moraes (del STF) y está relacionada con los atentados ocurridos en Brasilia el 8 de enero de 2022, se lo investiga como parte de grupos sospechosos de difundir noticias falsas en redes sociales para influir en procesos políticos.

Brasil se encuentra actualmente en un año electoral, con más de 5.000 ciudades en todo el país listas para elegir a sus nuevos alcaldes en octubre, y el período de campaña comenzó oficialmente el 16 de agosto.

¿Cómo empezó la investigación contra Musk?

El 7 de abril, De Moraes incluyó a Musk en la investigación y ordenó a X abstenerse de “desobedecer cualquier orden judicial emitida” por el Poder Judicial brasileño, incluida la reactivación de perfiles cuyo bloqueo había sido ordenado por el STF. También determinó que, en caso de incumplimiento, se impondría a la empresa una multa diaria de R$ 100.000 (alrededor de US$ 20.000) por perfil, y que los representantes legales de X en Brasil serían acusados ​​de desobedecer una orden judicial.

Menos de 24 horas después, el 8 de abril, Musk publicó en las redes sociales que el juez también lo había sido amenazado con encarcelar a su personal. Musk mencionó que podría cerrar la sede de X en Brasil en respuesta a lo que consideró excesivo y “censura” por parte de De Moraes.

El 17 de agosto, X anunció el cierre de su oficina en Brasil, lo que viola la legislación del país. Para operar dentro del territorio nacional, todas las plataformas de redes sociales deben contar con al menos un representante legal con quien se pueda contactar.

El 28 de agosto, De Moraes citó a Musk a través de X, exigiéndole que, en un plazo de 24 horas, designara un nuevo representante de la empresa en Brasil. El director ejecutivo inundó sus propias redes sociales con memes y chistes sobre el juez, algunos generados con inteligencia artificial.

El 30 de agosto, apenas 48 horas después de que se mencionara a Musk, De Moraes ordenó la suspensión de X en el país. La plataforma de redes sociales aún no contaba con una persona en Brasil. La mañana del 31 de agosto la plataforma quedó restringida en el país.

¿Es válido citar judicialmente a alguien a través de X en Brasil?

No hay una respuesta definitiva a esta pregunta, ya que se ha convertido en una controversia legal en el país. Sin embargo, la mayoría de expertos consultados por Agencia Lupa -organización de fact checking de Brasil- cree que citar a alguien a través de X es un mecanismo inválido.

La abogada y profesora Andréa Rocha, especializada en Derecho Público y coordinadora del Departamento de Derecho Internacional del Instituto Brasileño de Recursos y Procesos en los Tribunales Superiores (IRTS, en portugués), afirmó que no existe ninguna norma jurídica que respalde las citaciones realizadas a través de las redes sociales, especialmente en procesos penales.

Destacó que el sistema jurídico brasileño dispone de métodos para notificar a los acusados ​​en el exterior a través de canales diplomáticos. Por lo tanto, en su opinión, los métodos no previstos por la ley sólo deberían utilizarse después de haber agotado todas las opciones legales, lo que no parece haber ocurrido en este caso.

El abogado Paulo Peixoto, profesor de Derecho Constitucional y Derechos Humanos de la institución Damásio Educacional, también calificó la citación mediante X como atípica y destacó la posibilidad de que eso pueda llevar a la anulación de toda la investigación. “Como se trata de una empresa extranjera, se debe emitir una comisión rogatoria de acuerdo con el Código Procesal Penal y los tratados internacionales. En este sentido, existe la posibilidad de declarar la nulidad del acto”, explicó.

André Marsiglia, abogado constitucionalista y especialista en libertad de expresión, afirmó que la cita “no es válida”. Explicó que, desde el punto de vista legal, la citación debe entregarse a una persona y también presenta un problema con el documento en sí.

“Musk no es el director general de la empresa; el destinatario de la citación debe responder legalmente en su nombre”, argumentó. La actual directora ejecutiva de X es Linda Yaccarino.

En un artículo para el portal de noticias UOL, Wilton Gomes, candidato a maestría y doctorado en el Departamento de Estado de la Universidad de São Paulo, explicó que a pesar de la ausencia de una legislación federal específica para las citaciones a través de redes sociales, el principio de instrumentación de formularios puede validar el acto si cumple su objeto sin perjudicar a las partes.

“La cita de Elon Musk a través de la validación de la citación procesal, a pesar de no estar prevista en la legislación federal y parecer atípica”, escribió Gomes.

Según el propio Tribunal Supremo Federal de Brasil, la citación mediante X no tiene precedentes en el país. En un comunicado, el tribunal destacó que la plataforma no contaba con representante legal en Brasil y que también fue citado el abogado designado en este caso.

¿Pueden los usuarios seguir accediendo a X por otros medios?

No. El día 30 Moraes ordenó la suspensión. La decisión ordena a la Agencia Nacional de Telecomunicaciones (Anatel) y a empresas como Apple, Google, proveedores de internet y operadores de telefonía como Claro, Tim y Oi a tomar medidas para bloquear el acceso a la aplicación “X” en Brasil. Como resultado, los usuarios no pueden acceder a la plataforma desde dispositivos con una dirección IP en Brasil (protocolo de internet), una dirección única asignada a cada dispositivo en una red para identificar y localizar sus comunicaciones en Internet.

¿Qué tiene de malo la VPN (red privada virtual)?

En su orden, De Moraes también prohibió a los usuarios adoptar medios tecnológicos alternativos, como usar una VPN para disfrazar la ubicación del dispositivo (como si estuviera en otro país) y acceder a X. Si un usuario intenta acceder a la plataforma a través de un VPN, se impondrá una multa de R$ 50.000 (US$ 10.000) por día, según la decisión.

Para algunos expertos, como el abogado André Marsiglia, la decisión de castigar a los usuarios por utilizar VPN es irregular. “No se puede castigar a personas que no forman parte de un proceso legal; se puede sancionar a ambas partes, pero no a terceros. En este caso, los usuarios son terceros. La herramienta VPN no es ilegal, por eso no debería haber ningún problema”, explicó.

¿Cuáles son las desinformaciones que están circulando sobre el bloqueo de X en Brasil?

Lupa se encuentra desmintiendo todas las desinformaciones que circulan sobre el tema, que se pueden ver acá (se puede utilizar el traductor automático de Google para leer la verificaciones en español).

La nota original sobre la que se basa esta versión fue publicada por Agencia Lupa, organización de fact checking de Brasil.