Impuesto PAIS: qué es, quiénes lo pagan y cómo impacta en la economía

El Gobierno de Javier Milei (La Libertad Avanza) estimó, en el informe de avance del Presupuesto 2025, que para el año próximo no contará con la recaudación proveniente del impuesto Para una Argentina Inclusiva y Solidaria (PAIS). 

Se trata de un tributo que grava la compra de dólares oficiales, las importaciones, exportaciones y la adquisición de servicios en el exterior del país y que vence a finales de 2024.

En esta nota te contamos cuándo surgió el impuesto, cómo se modificó a lo largo de los años, cómo impacta en la economía y qué peso tiene en la recaudación. 

Cuándo surgió el Impuesto PAIS y cómo cambió a lo largo de los años

El impuesto PAIS fue creado por la Ley 27.541, la ley de emergencia impulsada por Alberto Fernández (Frente de Todos) al comienzo de su gestión, en diciembre de 2019.

Darío Rossignolo, economista de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) y especialista en impuestos y políticas fiscales, dijo a Chequeado que “el objetivo del impuesto PAIS es el de encarecer el dólar de importación para desalentar la demanda de divisas y generar recursos para programas sociales”. 

Se trata de un tributo que grava ciertas operaciones en moneda extranjera, y tiene un plazo limitado a 5 períodos fiscales a partir de su implementación en 2019. Esto significa que, de no mediar la aprobación de una nueva ley, vence a fines de 2024.

Originalmente, el impuesto gravaba la compra del dólar ahorro, la compra de bienes y servicios adquiridos en el exterior y la adquisición de pasajes o paquetes turísticos. 

En este contexto, el impuesto PAIS sirvió como complemento del cepo cambiario que se había establecido el 28 de octubre de 2019 (en la gestión de Mauricio Macri -Cambiemos-), al encarecer la compra del dólar oficial, limitado a US$ 200 mensuales (tope que se mantiene hasta hoy).

En octubre de 2022 el Gobierno de Fernández amplió el alcance del impuesto PAIS a la compra de bienes suntuarios y a la adquisición de servicios personales, culturales y recreativos en el exterior (gravados con un 30%, alícuota que se mantiene). 

En tanto, en julio de 2023 se publicó un nuevo decreto que incorporó el impuesto PAIS al pago de ciertos servicios del exterior tales como mantenimiento y reparación, servicios informáticos, seguros y asesoramientos profesionales (gravados con un 25%). 

En ese mismo decreto también se incorporó una imposición del 7,5% para la importación de cualquier bien (a excepción de algunos productos de la canasta básica e insumos para determinadas obras públicas, como el Gasoducto Presidente Néstor Kirchner) y para los servicios de fletes y otros servicios de transporte para las exportaciones e importaciones. 

Los cambios al impuesto PAIS introducidos por el gobierno Javier Milei

El 13 de diciembre de 2023, a pocos días de asumir, la gestión de Javier Milei incrementó la alícuota de los servicios de fletes internacionales y de las importaciones del 7,5% al 17,5%. Posteriormente, el 4 de enero de 2024, eximió del pago a la importación de los insumos destinados a la producción de bienes exportables. 

En tanto, el 3 de mayo de 2024 se incorporaron al impuesto PAIS el giro de utilidades y dividendos, la repatriación de inversiones y la suscripción del Bopreal para estas 2 situaciones anteriores. En todos los casos, la alícuota ascendió al 17,5%.

Tras la aprobación de la Ley Bases y el paquete fiscal, el ministro Luis Caputo prometió que bajará el impuesto PAIS para las importaciones para que vuelva al 7,5% cuando “esté implementada la Ley y el Tesoro empiece a recibir los ingresos del paquete fiscal. Estamos hablando entre agosto y septiembre. 

Cómo impacta el impuesto PAIS en la economía de las personas y las empresas

El efecto más conocido -y el primero- del impuesto PAIS es sobre la compra de divisas para atesoramiento (el conocido como “dólar ahorro”) y las compras con tarjeta de crédito o débito en el exterior (dólar turista) o la adquisición de pasajes en el exterior o paquetes turísticos a destinos internacionales. 

En estos casos, el impuesto PAIS es del 30%, a lo que se suma además un 30% de percepción del impuesto a las Ganancias o Bienes Personales. 

Teniendo en cuenta la cotización oficial del dólar para la venta del Banco Nación el 5 de julio de 2024 ($ 934,5), el dólar “ahorro” o “turista” cotiza a $ 1.495,2. Esto es, por encima de las cotizaciones de los dólares paralelos, que se ubican en el rango de los $ 1.400.

En tanto, la suscripción a servicios de streaming u otros servicios digitales prestados por empresas radicadas en el exterior están gravadas con el 8% del impuesto PAIS, pero además deben pagar un 30% a cuenta de Ganancias y el 21% de IVA. 

Así, por ejemplo, el servicio básico de Netflix, que en la plataforma se ofrece a $ 4.299 mensual, termina costando casi $ 6.900, mientras que la suscripción a PlayStation Plus (ofrecido a US$ 11,99), cuesta actualmente unos $ 17.800 con los impuestos incluidos.

Sobre los efectos del impuesto en los consumos de las personas, Sebastián Domínguez, titular del estudio SDC Asesores Tributarios, señaló a Chequeado “puede ocurrir que, al tener un mayor costo de los servicios digitales, las personas de a pie no contraten el servicio”.

En tanto, el dólar al que acceden los importadores (el mayorista, que el 5 de julio de 2023 cotiza a $ 916 según el Banco Central) es de $ 1.076 con la aplicación del 17,5% (sin considerar otras imposiciones que pudieran existir para algunos productos particulares). 

Al respecto, Domínguez sostuvo que “el impuesto genera un aumento en el costo de las importaciones, y esto en las empresas puede generar que no apliquen nuevas tecnologías, lo que puede bajar la productividad. Y si de todos modos los contratan, eso lo terminan trasladando en el precio que pagan sus clientes”. 

“Por otro lado, hay empresas que se ven beneficiadas porque si alguien quiere importar el mismo producto que fabrican, como está alcanzado por el impuesto país, resulta más caro y queda fuera de competitividad”, finalizó.

En el caso del giro de utilidades y dividendos (a los que se aplica una alícuota del 17,5%), el economista Amilcar Collante calculó la existencia de una deuda por US$ 7 mil millones a raíz de las diferentes restricciones aplicadas desde 2019.

Cuál es el peso del impuesto PAIS en la recaudación

El impuesto PAIS fue ganando participación en el total recaudado por el Gobierno conforme se incorporaban nuevos ítems y se incrementaban las alícuotas. 

Según datos de la AFIP, en 2020, su primer año de aplicación completo, el impuesto representó el 2% de la recaudación total. En 2021 la recaudación cayó 44,4% en términos reales (es decir, contemplando el efecto de la inflación) y su participación cayó al 1% del total.

Sin embargo, desde 2022 se incrementó exponencialmente: ese año aumentó 80,6% en términos reales (el 1,75% del total de recaudación) y en 2023, un 86,6% (su participación se duplicó al 3,5%). 

Finalmente, en el primer semestre de 2024 (último dato disponible) la recaudación del impuesto PAIS aumentó 276,6% con respecto a igual período de 2023, y su participación sobre el total fue del 6,4%. Es decir que se triplicó con respecto a su primer año de implementación. 

En este escenario, ¿qué pasaría con las cuentas fiscales sin este impuesto? Por ejemplo, en el primer semestre de 2024 la recaudación cayó 6,9% real (afectado, entre otras cosas, por la eliminación de la cuarta categoría del impuesto a las Ganancias en septiembre 2023). Excluyendo el impuesto PAIS, en tanto, la caída hubiera sido del 11,5%.

Con relación a la posible eliminación del impuesto PAIS, Rossignolo señaló a Chequeado que “un sustituto evidente sería un derecho de importación o una devaluación; pero en este  caso se generarían otros efectos macroeconómicos como inflación en el caso de que ese eventual traslado a precios sea convalidado por la demanda”.