Skip to content
Esta nota tiene más de un año

¿Qué implica dolarizar la economía y qué diferencia existe con el 1 a 1?

Si tenés sólo unos segundos, leé estas líneas:
  • La dolarización de la economía significa el reemplazo del peso por el dólar como moneda de curso legal, mientras que la convertibilidad establece una paridad entre ambas monedas, pero manteniendo la circulación del peso.
  • Especialistas indican que para realizar una dolarización con el actual valor de la divisa se necesitaría un préstamo de US$ 45 mil millones: de lo contrario, el tipo de cambio de conversión oscilaría entre $ 7 mil y $ 10 mil por dólar. 
  • Quienes defienden esta medida señalan que se podría realizar la conversión al valor actual de los dólares financieros (unos $ 400) vendiendo los bonos de deuda del Tesoro que posee el Banco Central. Es decir, convirtiendo deuda intraestado en deuda externa privada. 

En las últimas semanas se profundizó el debate acerca de la posibilidad de dolarizar la economía argentina, a partir de una propuesta del precandidato presidencial y diputado nacional de La Libertad Avanza, Javier Milei, ante empresarios reunidos en el hotel Llao Llao de Bariloche. 

En esta nota te contamos qué significaría la dolarización de la economía argentina, cuáles son las implicancias de tomar esta medida y qué diferencias existen con el régimen de convertibilidad que funcionó en el país en la década del ‘90. 

La Argentina es una economía bimonetaria

Como se explica en esta nota, una moneda tiene 3 funciones: ser un medio de cambio (para adquirir por bienes y servicios); ser una unidad de cuenta (como referencia del valor de bienes y servicios); y ser una reserva de valor (un medio para acumular ahorros). 

Pero, en contextos de incertidumbre macroeconómica, no siempre la moneda nacional es la elegida para cumplir todas estas funciones, y es reemplazada por una divisa extranjera, mayormente el dólar estadounidense. A este fenómeno se lo denomina “economía bimonetaria”.

Al respecto, el economista Ricardo Delgado, titular de la consultora Analytica y subsecretario de Coordinación de Obra Pública Federal durante la gestión de Mauricio Macri (Cambiemos), indicó a Chequeado que en nuestro país “hoy el peso no es reserva de valor, y en algunos sectores en particular, como el inmobiliario, se cotiza y paga en dólares”, por lo que tampoco funciona en esos casos como unidad de cuenta. 

En este sentido, un trabajo de la Fundación Fundar firmado por los economistas Emiliano Libman, Juan Martín Ianni y Guido Zack menciona este fenómeno como una “dolarización de facto”, y lo define como la decisión de los actores económicos de utilizar divisas para reemplazar a la moneda local en algunas de las 3 funciones reseñadas más arriba, pero no en todas (por esto, hablan de una denominada “dolarización parcial”). 

Pero, entonces, ¿qué significa dolarizar la economía?

En la misma línea, el informe de Fundar contrapone la dolarización de facto con la dolarización total o de jure, cuando la moneda extranjera reemplaza a la local en todas sus funciones “por una decisión deliberada de política económica”. A esto apuntan los principales proyectos de dolarización que se discuten actualmente. 

Al respecto, Delgado sostuvo que “la dolarización de jure es básicamente eliminar el peso como moneda de curso legal y reemplazarla por el dólar”. 

Por su parte, el economista jefe de la Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas (FIEL), Juan Luis Bour, dijo a este medio que “dolarizar implica que circulan básicamente dólares: los pesos de alta denominación desaparecen, y quizás quedan monedas, como ocurre en Panamá [N. de la R: donde el dólar es una moneda de curso legal, pero en menor medida también circula el Balboa, una moneda local]”. 

¿Qué diferencias hay entre la dolarización y la convertibilidad?

Consultado por Chequeado respecto de las diferencias entre la convertibilidad y la dolarización, Delgado indicó que “con la convertibilidad se respaldaba el peso con la misma cantidad de dólares en las reservas del Banco Central”. Es decir, que en este sistema el peso sigue existiendo y funciona como moneda de curso legal.

 

Ver esta publicación en Instagram

 

Una publicación compartida de Chequeado (@chequeado)


En la Argentina, la convertibilidad rigió a partir del 1° de abril de 1991 en un contexto de hiperinflación (en marzo de 1990 el aumento de precios había sido superior a 20.000% interanual). Fue impulsada por el gobierno de Carlos Menem (Partido Justicialista), quien asumió con 5 meses de anticipación debido a la renuncia de Raúl Alfonsín (Unión Cívica Radical).

Tras la aplicación del plan, la inflación se desaceleró hasta llegar al 0 a mediados de la década del ‘90. Pero el programa generó el deterioro del aparato productivo y el aumento de la desocupación y la pobreza, situaciones que culminaron con la crisis de diciembre de 2001 y provocaron la renuncia de Fernando de La Rúa (Alianza), sucesor de Menem en la Presidencia. 

Delgado indicó que “el respaldo era 1 a 1 porque la paridad dio ese nivel: se trataba de 10.000 australes que después se convirtieron en un peso, y este a su vez era convertible a 1 dólar”. Pero aclaró que “convertibilidad no es necesariamente 1 a 1, se puede fijar otro tipo de paridad, pero lo importante es que esa paridad sea fija”. 

En cambio, en un régimen dolarizado, la divisa estadounidense sería la única moneda de curso legal, y todos los contratos deberían celebrarse de esa forma.

¿Cómo se podría realizar una dolarización en la economía argentina?

Sobre el proceso de dolarización, Delgado aseguró a Chequeado que “la operación en sí y la transición de un sistema a otro es muy compleja, pero básicamente lo que hay que tener en cuenta es cuál es tu caja real en dólares y cuántos pesos se necesitan canjear”. 

En este punto, un informe de la consultora 1816 -dirigida por Adrián Rozanski, Martín Defilippo y Leandro y Mariano Skladnik-, señaló que para aplicar un proceso de dolarización en el país debería considerarse el reemplazo de toda la base monetaria actual (es decir, el dinero en circulación y los depósitos) y los pasivos del Banco Central, principalmente las Leliqs y los pases

El trabajo calcula que esto representa una masa de $ 17,9 billones, y considera que si se tienen en cuenta las actuales reservas netas -calculadas en US$ 1.800 millones- se necesitarían casi US$ 45.000 millones (un volúmen similar al préstamo que el FMI le otorgó al gobierno de Cambiemos en 2018) para dolarizar la economía con una referencia de $ 400 por cada dólar, el valor del dólar contado con liquidación al momento en el que se publicó el análisis. 

En cambio, si se dependiera sólo de las reservas netas disponibles en la actualidad, el tipo de cambio de conversión (es decir, la cantidad de dólares que cada argentino recibiría por sus pesos al momento de producirse la dolarización) sería de $ 10 mil por cada dólar. Es decir que -según esta estimación- si una persona cuenta con un ahorro de $ 1 millón, recibiría a cambio US$ 100. 

Por su parte, el estudio de Fundar estima (sobre la base de un cálculo de reservas netas diferente -US$ 2.300 millones-) que para “rescatar” todos los pasivos del BCRA el tipo de cambio de conversión sería de poco más de $ 7 mil por dólar. En este caso, un sueldo de $ 200 mil equivaldría a US$ 28,5.

Qué dicen los proyectos de dolarización actuales

Uno de los principales impulsores de la dolarización en la Argentina es el diputado nacional por la Ciudad de Buenos Aires y precandidato presidencial Javier Milei (La Libertad Avanza). 

Milei aseguró que “es absolutamente factible dolarizar” y que ello no implicaría una “mega devaluación” como advierten los informes arriba citados. 

El diputado nacional explicó que su propuesta contemplaría la venta de los activos del Banco Central (mayormente bonos del Tesoro nacional) a instituciones financieras internacionales (es decir, se transformaría una deuda intraestado en deuda externa privada) para obtener los dólares necesarios para dolarizar a un valor que, en junio último, calculó en $ 320 (en línea con la cotización del dólar blue de entonces). 

En la misma sintonía, los economistas Emilio Ocampo y Nicolás Cachanosky también proponen avanzar hacia una dolarización de jure en el país. Ocampo indicó, en declaraciones al programa “Y Ahora Quién Podrá Ayudarnos” -que se emite por Radio Con Vos-, que “las reservas netas no son el único activo del Banco Central; también tiene títulos de deuda del Gobierno, que en su valor nominal son US$ 70 mil millones”. 

Como Milei, el economista propone cambiar esos títulos de deuda por bonos internacionales, y de ese modo obtener las divisas para lograr un tipo de conversión en torno a los $ 400 por dólar, según sus estimaciones. 

No obstante, el trabajo de la consultora 1816 sostiene que esto “requeriría un nivel de confianza del mundo que es casi imposible para 2024”. Y advierte que, descartado este camino, “para dolarizar se necesitaría un préstamo enorme” o “una licuación masiva previa y/o un default de pesos [N. de la R.: es decir, que el Gobierno deje de pagar la deuda en esa moneda]”. 

En tanto, en el Congreso de la Nación existe un proyecto que promueve la dolarización, presentado por el diputado Alejandro Cacace (Evolución Radical). La iniciativa, presentada en marzo de 2022, promueve la conversión de la base monetaria y los pasivos del BCRA a cambio de las reservas internacionales. 

Por su parte, Fundar señala en su trabajo que, más allá de los diferentes escenarios económicos, dolarizar implicaría varios riesgos para el país, entre los que menciona la pérdida de la política cambiaria (es decir, la posibilidad de regular el tipo de cambio para morigerar los efectos de crisis externas sobre nuestra economía), la incapacidad de emitir moneda (y con ello, la imposibilidad para implementar la política monetaria y fiscal) y la dependencia a la política monetaria de los Estados Unidos (dado que es la Reserva Federal la que regula el costo de los dólares y la política de tasas). 

Los antecedentes en otros países

De acuerdo con los datos del FMI, sólo 14 de 190 países miembros del organismo adoptaron de manera oficial el dólar. De ese total, 3 son de América Latina: Ecuador, Panamá y El Salvador. 

El informe de Fundar explica que Panamá (que lo hizo en 1904) y El Salvador (2001) contaban con mejores condiciones para aplicar la dolarización, como por ejemplo “los elevados grados de integración de los mercados de trabajo y de capitales con los de Estados Unidos”. 

En tanto, en Ecuador se optó por la dolarización en el año 2000, en un contexto de crisis: su moneda -El Sucre- había sufrido una devaluación del 400% y mantenía un alto déficit fiscal y una fuerte inflación. 

En los primeros meses del nuevo programa se produjo un congelamiento de los depósitos en dólares, dada la falta de liquidez (es decir, la poca disponibilidad de billetes de dólar), un aumento de la inflación en dólares (a raíz de la inercia provocada por el régimen anterior y la quita de subsidios a los servicios públicos) y un ajuste fiscal. 

Finalmente, el Gobierno ecuatoriano logró estabilizar la situación, con una ayuda externa: el incremento en el precio de los combustibles y la caída de las tasas de interés por parte de la Reserva Federal de los Estados Unidos, fue lo que ayudó a devolverle liquidez a la economía. 

Fecha de publicación original: 22/04/2023

Temas

Comentarios

  • Alfredo22 de abril de 2023 a las 3:43 pmHola. Una consulta: cuàl serìa el efecto sobre los que tenemos prèstamos bancarios en cuotas fijas y en pesos? En el contexto actual , las cuotas tienden a alivianarse absorbidas por la alta inflaciòn
  • JUAN LUIS MASSOLO22 de abril de 2023 a las 5:14 pmMi sugerencia es volver a tener las reservas en oro, no en dólares, ustedes dirán, donde conseguimos el oro ?, nuestra cordillera está llena de oro y se lo están llevando empresas mineras multinacionales, de ahí deberíamos sacarlo y respaldar nuestra base monetaria, y no depender de la moneda de otros países y fortalecer la nuestra.
  • Roberto22 de abril de 2023 a las 7:29 pmEn alguna parte del articulo dice que la convertibilidaden los 90 genero el deterioro del aparato productivo y ña falta de trabajo....eso no fue así, la crisis que termino con la salida de la convertibilidad fue por falta de competitividad de la economia a raíz de tener impuestos mas altos que USA para sostener a un estado que ya se mostraba inútil y que se sigio endeudando, luego una baja en el precio de los granos genero un conflicto con estos productores que endeudados como acostumbran para sembrar, no querían pagar sus deudas actuaron politicamente y la sumatoria de todas esas variables fueron aprovechadas por mal intensionados que valiendoce de un pueblo ignorante cambiaron el regimen de gobierno para algunos hagan sus diferencias economicas. El punto y cono aprendizaje para el tema de la dolarizacion es que sin ajustar los items antes mensionados, competitividad de las tasas impositivas, costos del estado y deuda la dolarizacion, convertibilidad o cualquier otra cosa fracasaria igual.
  • Gabriela22 de abril de 2023 a las 8:34 pmHola, hay algo que no "me cierra", ejemplo: si hoy gano $200 mil y quiero comprar U$s 200 gasto la mitad de mí sueldo aprox y con la otra mitad puedo comprar un celular que a precio internacional está valiendo actualmente cerca de U$S 100,si,? díganme como haría para hacer lo mismo si e mpiezo a ganar U$S 28??
  • Juan Ricci22 de abril de 2023 a las 11:35 pmSiempre aplicamos parche sobre parche. Pareceria ser que el único remedio que sanaría esta endemica enfermedad que padecemos desde hace tanto tiempo está próximo a llegar. Ya perdimos mucho tiempo, salud y esperanzas. Yo voy a votar por el proyecto.
  • Diego23 de abril de 2023 a las 12:07 amPregunta , si un sueldo de $200 mil pasaría al valor de 28,50 USD. Que poder adquisitivo representaría para un trabajador..
  • Buongiorno Samuel Rodolfo23 de abril de 2023 a las 9:16 amCuando no se acierta con el diagnóstico y sólo se cambia la medicación es difícil reponerse.Que país de Sudamérica tiene salud y educación gratuita(aca se operan extranjeros gratuitamente en hospitales públicos),planes sin control suministrados por gerentes de la pobreza,ministerios sin sentido y gastos producidos por la política (asesores parlamentarios, secretarias,etc. Lo de la MAFIA policial es para otro capítulo....
  • Ariel23 de abril de 2023 a las 9:26 amExcelente nota.....muy bien explicado. Felicitaciones
  • Ricardo Luis Dematei23 de abril de 2023 a las 9:53 amQue el ajuste que hace falta en este país se haga en el sector público y el el sector de la política y este país va a salir adelante sin necesidad de dolarizar
  • Francisco Zacutti23 de abril de 2023 a las 10:54 amDesmonetizar la economía ....que sean todos "asientos contables" (todo "magnetizado" tarjeta de débito y/ó crédito). DE ESTA MANERA TODA LA ECONOMÍA SE MOVERIA EN BLANCO ....TRIBUTARIAN LOS QUE HOY EVADEN Y ABSRATARIA EL COSTO DEL CREDITO ... SE GENERARÍA UN CONTROL DE LA RUTA DEL DINERO TAL,QUE PERMITIRIA "DESTAPAR LOS TRAFICOS DE DROGAS,DE INFLUENCIAS,ETC. En realidad lo fundamental es recuperar la confianza y el respeto por las leyes( y sobre todo que todos tributemos incluso los jueces). Hace tiempo propuse este camino como alternativa a un control de gastos y el hecho que evitar el papel moneda físico también evita la emisión monetaria y el costo que significa. Resumidamente es mi humilde propuesta.

Valoramos mucho la opinión de nuestra comunidad de lectores y siempre estamos a favor del debate y del intercambio. Por eso es importante para nosotros generar un espacio de respeto y cuidado, por lo que por favor tené en cuenta que no publicaremos comentarios con insultos, agresiones o mensajes de odio, desinformaciones que pudieran resultar peligrosas para otros, información personal, o promoción o venta de productos.

Muchas gracias

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *