La Nación: “Fútbol para Todos, con más presupuesto que el Ministerio de Cultura”

“Fútbol Para Todos, con más presupuesto que el Ministerio de Cultura”, tituló una nota La Nación, en la que calcula que con el último aumento decretado por la Jefatura de Gabinete de Ministros el Programa tendrá más recursos que “todo” el Ministerio que dirige Teresa Parodi. Así, según La Nación, Fútbol Para Todos (FPT) tiene un presupuesto de $1.742,7 millones para 2015, mientras que el Ministerio de Cultura cuenta con un fondo anual de $1.508 millones.

El título del diario es engañoso: el total de los recursos presupuestados para el Ministerio de Cultura este año son más que los que posee FPT. Sin embargo, si se considera la ejecución de ambos como porcentaje del presupuesto total, se advierte que el Programa representó durante el período 2011-2013 un mayor gasto que toda la cartera.

Los números que publicó La Nación sólo contabilizan el presupuesto de la administración central de Cultura, es decir que se deja fuera del total a los recursos que reciben los organismos descentralizados del Ministerio, como la Biblioteca Nacional, el Teatro Nacional Cervantes y el Instituto Nacional del Teatro. Sin embargo, esta exclusión es arbitraria.

“El presupuesto de ‘todo’ el Ministerio de Cultura incluye también a los descentralizados”, aclaró a Chequeado Rafael Flores, presidente de la Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública (ASAP), y explicó que, “en determinados casos, cuando hay un descentralizado mucho más grande que la administración central, como sucede con la ANSES y el Ministerio de Trabajo, se podría entender que se lo excluya, pero en este caso no se justifica”.

Si se consideran los fondos totales, la ecuación para 2015 cambia: el Ministerio de Cultura tiene un presupuesto de $2.146,1 millones ($1.554,9 millones de Administración Central + $529 millones de Organismos Descentralizados + $62,3 millones que le asignaron a la Biblioteca Nacional el jueves último), y el programa Fútbol Para Todos de $1.734,4 millones (se contabilizan los $100 millones que publica La Nación como informados en un pedido de acceso a la información), según datos del Observatorio Presupuestario de la ASAP.

Otra manera de calcular el grado de prioridad que tiene determinada área para un gobierno es contemplar la evolución en el tiempo de la ejecución presupuestaria (que incluye no lo aprobado como gasto o inversión por el Congreso sino lo efectivamente gastado o invertido). Así, de acuerdo con los datos del Sitio del Ciudadano del Ministerio de Economía de la Nación, se ve que FPT representó un porcentaje mayor que el gasto del Ministerio de Cultura en todos los años de la serie 2011-2013, aunque no en 2014 cuando la Secretaría fue elevada a rango de Ministerio (ver datos).

En lo que va de 2015, el Programa que maneja la Jefatura de Gabinete registra una mayor ejecución a la de la cartera que encabeza Teresa Parodi (ver acá y acá), pero si se toman los recursos presupuestados Cultura tiene más fondos que Fútbol para Todos como porcentaje del presupuesto total.

“La gestión del programa es muy opaca, poco auditada y controlada, con tercerizaciones y negociados con grupos privados que carecen de contralor público”, destacó a Chequeado Martín Becerra, profesor de la Universidad Nacional de Quilmes (UNQui) y especialista en políticas de Comunicación.

Según Becerra, “el hecho de que la gestión de FPT sea poco transparente impide valorar en su exacta dimensión cuál sería el presupuesto necesario para que el Programa funcione cumpliendo en forma equilibrada dos objetivos: facilitar el acceso al Torneo Argentino de Primera División y al entretenimiento y la cultura, pero al mismo tiempo que FPT tenga un gasto acorde a sus costos, sin intermediarios tales como [el empresario Alejandro] Burzaco, que ahora está preso [por sobornos en el escándalo de la FIFA], o la productora La Corte, en manos del empresario Cristóbal López, cuyo precio no está fijado con arreglo a ningún criterio público”.

En la misma línea, la Auditoría General de la Nación (AGN) emitió un informe el mes último donde señala, entre otros puntos, que “no existen estudios técnicos u otros parámetros que justifiquen que la suma anual de $ 600.000.000 comprometida por el Estado por la cesión de derechos realizada con AFA guarde correspondencia con el valor de los derechos cedidos para su explotación y la finalidad del acuerdo”. Luego de que uno de los auditores (Oscar Lamberto, Partido Justicialista) cambiara su voto, el informe no fue archivado y será discutido en el Congreso de la Nación próximamente.