Macri: “Nunca antes se gastó menos plata en pauta publicitaria que en este gobierno”

En ocasión de una nueva reunión de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), el 31 de marzo último, el presidente de la Nación, Mauricio Macri, divulgó un hilo de Twitter sobre la libertad de expresión durante la gestión de Cambiemos. “Nunca antes se gastó menos plata en pauta publicitaria que en este gobierno”, dijo.

¿Qué dicen los datos?

El gobierno de Macri (Cambiemos) redujo el gasto en publicidad oficial en comparación con los dos gobiernos de Cristina Fernández de Kirchner (Frente para la Victoria) e incluso perforó el piso de los US$ 100 millones anuales después de 11 años, según los datos publicados por la ONG Poder Ciudadano y la Secretaría de Comunicación Pública de la Jefatura de Gabinete de Ministros. La última vez que esto había ocurrido había sido en 2006, cuando el gobierno de Néstor Kirchner (FPV) gastó poco más US$ 68 millones.

Sin embargo, los datos muestran que Macri aún está lejos del nivel de gasto/inversión anual que se alcanzó durante los gobiernos de Néstor Kirchner (2003-2007), Eduardo Duhalde (2002) y Fernando De la Rúa (1999-2000). Incluso, al calcular el promedio por año, Macri también se encuentra por encima de estos tres mandatarios.

“No es cierto que este gobierno gasta menos en publicidad oficial que lo que gastaron las gestiones entre 1999 y 2006, por citar un lapso con distintos gobiernos”, destacó a Chequeado Martín Becerra, profesor de la Universidad Nacional de Quilmes y de la Universidad de Buenos Aires, y además agregó: “En su obsesión por polarizar con el kirchnerismo, el Presidente reduce toda la historia argentina a los dos últimos períodos de gobierno de Fernández de Kirchner y omite que los más beneficiados con su distribución son medios y conductores oficialistas, si bien es verdad que el ‘castigo’ a los opositores es menos drástico que entre 2009 y 2015”.

Fuente: elaboración de Chequeado en base a datos de Jefatura de Gabinete.

*La cotización que se utilizó para este gráfico es la del dólar mayorista que el Banco Central publica de 2000 en adelante.

Otro rasgo constitutivo del proceso iniciado en 2016 es la concentración de la recepción de dinero y pauta por canje entre los principales jugadores. Como se señala en esta nota, la información oficial permite elaborar un ránking en el que en el podio predominan los medios privados concentrados y que ubica a los colectivos que gestionan medios sin fines de lucro en lugares marginales. Esto último -que sucedió en todas las gestiones anteriores- contradice los principios sobre regulación de la publicidad oficial y libertad de expresión de la relatoría de la Organización de los Estados Americanos (OEA).

Así, se constata que el Grupo Clarín -socio del Estado nacional en Papel Prensa y uno de los mayores beneficiados por las modificaciones regulatorias del gobierno de Macri que le permitieron desembarcar en Telecom- lidera la lista desde hace tres años, mientras que en el último período de la gestión anterior este lugar era ocupado por Grupo 23. Este grupo fue fundado por el empresario Sergio Szpolski, quien junto a Matías Garfunkel vació los medios (Tiempo Argentino y Radio América, por ejemplo) tras la asunción de Macri y hoy enfrenta causas judiciales por no pagar aportes patronales ni indemnizaciones a sus trabajadores.

Fuente: elaboración de Chequeado en base a datos de Jefatura de Gabinete.

*La cotización que se utilizó para este gráfico es la del dólar mayorista que el Banco Central publica de 2000 en adelante.

El Gobierno y los especialistas

Consultado por Chequeado, el director nacional de Publicidad Oficial de la Secretaría de Comunicación Pública, Horacio Minotti, sostuvo que durante la gestión de Cambiemos “ni una sola campaña o pieza publicitaria se ha pautado considerando la posición política del medio”, y agregó: “Los ciudadanos de toda ideología tienen idéntico derecho a acceder al mensaje del Estado y esa es la lógica de los cuatro criterios objetivos que aplicamos siempre”.

A mediados de 2016, Jefatura de Gabinete dictó la Resolución 247, que establece cuatro criterios de auto-regulación para la distribución de la publicidad oficial: la cantidad de audiencia o alcance del medio; la pertinencia del mensaje con la plataforma y el lugar elegido para publicitar; la importancia de la coincidencia entre la cobertura geográfica de un medio con el público objetivo de una campaña; y la voluntad de una distribución federalista y que fomente la pluralidad de voces al destinar pauta a medios de organizaciones sociales, de pueblos originarios o de frontera y emisoras de baja potencia.

El principal problema de esta resolución radica en la dificultad para identificar si se cumplen estos criterios por la ausencia de datos. Apenas puede verificarse el primero -pero de modo parcial, porque el rating no se mide a nivel nacional- y el cuarto, donde la exclusión de los sin fines de lucro es una constante.

Pablo Secchi, director ejecutivo de Poder Ciudadano, respondió a este medio que la pauta nacional se redujo, pero agregó que “habría que saber cuánto gasta la Provincia de Buenos Aires, que no responde los pedidos de información”. Al mismo tiempo, sostuvo: “Lo que no es verdad es que se haya reglamentado seriamente para terminar con las discrecionalidades. En especial, no se reguló para épocas electorales, que hubiera sido relevante”.

“La regulación existente es mejor que la inexistencia de la misma. Además, el gobierno de Macri es más transparente ahora con los datos de reparto”, dijo a Chequeado la periodista María O’ Donnell -autora del libro Propaganda K-, aunque aclaró que “sigue habiendo, también, un uso muy electoralista: con campañas en tiempo de elecciones con la voz o la imagen de Macri. Y aparece la pauta en redes sociales, tema muy discutible porque no generan ni un empleo en el país en cuanto a la producción de contenidos”.

Una gestión que abre los datos

Como ya hemos planteado en Chequeado, la administración Cambiemos se destaca, entre otros aspectos, por divulgar información sobre el dinero y los destinos de la publicidad oficial. Además, la Secretaría de Comunicación Pública notifica sobre la publicidad emitida -contratada o canjeada- por organismos centralizados y descentralizados de la Jefatura de Gabinete.

En materia de regulación, durante el actual gobierno se intentó avanzar en un principio en la sanción de una ley. El proyecto obtuvo media sanción en el Senado en noviembre de 2016, pero tras dos años sin tratamiento en la Cámara de Diputados perdió estado parlamentario.

Con los datos ofrecidos y publicados, se puede concluir que el gobierno de Mauricio Macri no es el que menos dinero gastó en publicidad oficial, por lo menos desde el año 2000 a esta parte. Sí es cierto que encuentra una tendencia decreciente en relación a los dos períodos de gobierno de Cristina Fernández de Kirchner.

La frase que impulsa este chequeo fue buscada de manera automática, y luego seleccionada por periodistas, a través de “Chequeabot”, el nuevo sistema de automatización en el que trabaja Chequeado.