Vidal: “Aumentamos 100% los montos que enviamos a los comedores escolares”

“Los más de un millón y medio de chicos que van a la escuela y reciben almuerzo, desayuno y merienda no saben que aumentamos 100% los montos que enviamos a los comedores escolares pero sí saben que están comiendo mejor, y que la fruta y la carne volvieron al plato”, aseguró la gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, en su discurso de apertura de sesiones ordinarias de la Legislatura bonaerense, y agregó: “Este año vamos a volver a aumentar la inversión un 30%”.

El mismo dato fue comunicado en 2016 en varios afiches que el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires difundió en rutas y en la vía pública de diferentes municipios.

El Servicio Alimentario Escolar (SAE) comenzó a funcionar en la Provincia de Buenos Aires en 2004 durante la gobernación de Felipe Solá, y consiste en el pago de un desayuno, un almuerzo y/o una merienda a aquellos chicos de familias vulnerables que determinen los Consejos Escolares de cada municipio.

Cada uno de estos Consejos “es el responsable de contratar a los proveedores de los alimentos y su traslado, y también debe determinar los cupos de cada establecimiento”, aunque es el Gobierno provincial el que aprueba el número final, explicó el equipo de Prensa del Ministerio de Desarrollo Social provincial en este chequeo.

En abril de 2016, Vidal aplicó un aumento para el programa que llevó el presupuesto de $185 millones en marzo a $376 millones en mayo, es decir, que se duplicaron los montos. Así, el monto que el Estado provincial destina para el desayuno o la merienda completa pasó de $3,95 a $7,90, y para el almuerzo de $6,30 a 12,60 pesos. En términos reales, es decir también teniendo en cuenta la inflación de acuerdo con el IPC 9-Provincias, la suba fue del 39,5% en ambos casos.

Al observar los datos, el aumento del 100% anunciado por Vidal es el más alto desde 2009, y además se saldó la deuda existente con los proveedores que tenía la gestión anterior de Daniel Scioli.

En noviembre último, la Gobernadora anunció que habrá un nuevo aumento del 30% en los montos destinados a los comedores. Esta suba, que se aplicaría en mayo próximo, llevaría a $10,30 el desayuno o la merienda y a $16,40 el pago por el almuerzo.

En los últimos meses se realizó una auditoría, cuyos resultados se presentarán en los próximos días, según anticiparon a Chequeado desde el área de Comunicación del Ministerio de Desarrollo Social de la Provincia. A partir de estos datos, Vidal anticipó una serie de cambios que se harán en la implementación del SAE. En primera lugar, se comenzará a transferir los fondos directamente a los municipios y no a los Consejos Escolares. La primera etapa contará con 12 municipios, siete gobernados por Cambiemos: Tres de Febrero, Lanús, Vicente López, Junín, Hurlingham, Escobar, Almirante Brown, Florencio Varela, San Isidro, San Fernando, Morón y Pinamar.

“Los municipios tienen hoy áreas de compras y contrataciones con toda la capacidad operativa para hacer compras en escala. Estas compras son mejores cuando se hacen con licitaciones públicas, transparentes, en escala, con los mecanismos habituales de contratación que tienen los municipios. Además, los municipios tienen las áreas de bromatología y de capacitación necesaria para poder resolver uno de los resultados que dio la evaluación que es que casi el 100% [N. de R.: de los auxiliares de cocina] no tienen la capacitación necesaria en manipulación de alimentos”, aseguró Vidal en conferencia de prensa en noviembre último, y también anunció que se implementará un menú obligatorio que reemplazará el menú sugerido por el Gobierno provincial.

Pese a esto, existen críticas referidas a la falta de cupos o la escasez de las cantidades de alimentos. Según un relevamiento realizado por el Sindicato Unificado de Trabajadores de la Educación de Buenos Aires (Suteba) con fecha de junio de 2016 se habían reducido las plazas en un 20 por ciento. En mayo, Suteba ya había reclamado el reintegro de éstos, y Silvia Almazán, secretaria de Educación y Cultura de la entidad gremial, aseguró a este medio que “muchas escuelas pidieron aumentos de cupos porque se los habían recortado o porque aumentó la demanda”.

Una de las razones de este alza de la demanda fue el aumento de la pobreza infantil: el último informe del Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina (UCA) muestra que a septiembre de 2016 la pobreza en niños, niñas y adolescentes de 0 a 14 años en aglomerados urbanos con 80 mil habitantes o más en todo el país aumentó un 12,2% en relación al año anterior, y afecta a casi la mitad de esa población (48,8%). Según la UCA, el mayor porcentaje de hogares pobres del país se ubica en el Conurbano bonaerense.

La falta de cupos también se puntualizó en un relevamiento realizado en mayo por el diario La Nación entre 20 consejos escolares bonaerenses. En la misma línea, el Instituto de Investigación Social, Económica y Política Ciudadana (Isepci), ligado al partido político Libres del Sur, realizó un relevamiento ese mismo mes que concluyó que “un 65% de los entrevistados afirmó en forma contundente que los productos que se proveen desde los Consejos Escolares de los municipios no alcanzan para cumplir con el menú fijado por los propios Consejos”.

Sin embargo, desde el Gobierno provincial respondieron a Chequeado que los cupos pasaron de 1.551.573 en diciembre de 2015 a 1.599.464 en junio de 2016, es decir, que hubo un aumento de 48 mil cupos que se repartió en 81 municipios (varios de la lista coinciden con los resaltados con faltantes en el informe de Suteba). Luego, entre junio y diciembre los cupos pasaron a 1.610.343, es decir casi 11 mil cupos más. Por lo tanto, en total el aumento de cupos fue de 59 mil cupos (3,8%), según informaron desde el Ministerio de Desarrollo Social provincial.

El ministro bonaerense de Desarrollo Social, Santiago López Medrano, apuntó además a que antes, “como no alcanzaba el monto”, se informaba una cantidad mayor de chicos en los comedores. Sobre el tema, el informe del Isepci explica que “el pedido de las escuelas por encima de las porciones requeridas en sus comedores, era un recurso utilizado para paliar la escasez de los productos que le llegaban, aumentando la cantidad de comida para cada niño”, algo que ahora fue descartado “a través de mayores controles”.

“Con el aumento de los montos se revisó la aplicación del servicio alimentario pero, en términos generales, se mantuvo la cantidad de cupos”, observó a este medio Daniel Arroyo, ex ministro de Desarrollo Social de la Provincia Buenos Aires (entre diciembre de 2007 y julio de 2009) y coordinador del área de desarrollo social del Frente Renovador.

Este chequeo contó con la colaboración de Miguel Szejnblum (@miguesblum)