Segmentación y aumento de tarifas: ¿cuál es el estado de situación? 

Última actualización: 03/03/2023

El Gobierno nacional oficializó el nuevo esquema de segmentación de subsidios a las tarifas de electricidad y gas natural, con la publicación en el Boletín Oficial del Decreto N° 332/2022, en junio último. 

Fue el primer paso. En agosto, tras asumir el ministro de Economía de la Nación, Sergio Massa, y la secretaria de Energía, Flavia Royón, se anunció la puesta en marcha de dicho esquema y la metodología de implementación -incluyendo el tope de 400 kilovatios hora (kWh) por mes para consumo de electricidad y la segmentación por zona y categoría en el caso del gas-, al tiempo que se sumó a la quita de subsidios al servicio de agua. 

En el servicio de electricidad, la segmentación está vigente desde septiembre de 2022 mediante la disposición de 3 categorías de usuarios (alto, bajo y medio) de acuerdo con la capacidad de pago de los servicios energéticos. Desde ese mes, también está vigente la segmentación en la tarifa de gas y desde noviembre comenzó a impactar la quita de subsidios en el servicio de agua. 

A 4 meses de la puesta en marcha de la medida, ¿cuál es el estado de situación en relación con la quita de subsidios a los que se suscribieron más de 9 millones de usuarios? ¿Qué aumentos se produjeron en 2022 y cuáles se esperan para este año?

¿En qué estado está la segmentación de tarifas?

• La quita de subsidios en el servicio de electricidad comenzó a aplicarse desde septiembre, pero el impacto en las facturas de los usuarios se fue registrando de acuerdo al ciclo de facturación. Para los usuarios dentro del segmento de ingresos altos (Nivel 1, con ingresos mensuales totales del hogar superiores a $533.802; esto es, al valor de 3,5 canastas básicas totales tipo 2) la quita fue del 20% en octubre último, 40% enero y la tercera del 40% se realiza en marzo.

Los usuarios de ingresos medios (Nivel 3, con ingresos mensuales totales del hogar de entre $152.515 y $533.802) tienen subsidiada la tarifa hasta los 400 kWh mensuales. A partir de ese tope, pagan la tarifa plena; es decir, sin subsidio. Los sectores de bajos ingresos (Nivel 2, ingresos mensuales totales del hogar no superan los $152.515) mantienen los subsidios.  

Desde la Secretaría de Energía informaron a Chequeado que, al 1° de marzo, son 9,9 millones de personas las que se inscribieron para recibir el subsidio; mientras que 490.935 se dieron de baja. 

• En el caso del servicio de gas, la quita de subsidios para los sectores de ingresos altos y medios se realiza en 3 etapas también, con incrementos promedio cercanos a los $500 por mes por escalón y $1.500 acumulado en los 3 bimestres, según datos oficiales. 

Los sectores de ingresos medios -no obstante- tienen subsidiado un volumen equivalente al 70% del promedio entre los umbrales mínimos y máximos de consumo para cada categoría de usuario en cada subzona del país. 

Los sectores de menores ingresos mantienen el 100% del subsidio. 

• En el caso del servicio de agua, en noviembre último se aplicó la quita total de subsidios para los usuarios residenciales y terrenos localizados en las zonas “altas” (ver acá cómo se divide cada zona). Para los clientes de zonas “medias”, hubo una  quita del 40% en noviembre de 2022, del 20% en enero último y resta otra del 40% que se aplicará en marzo próximo. 

Para los usuarios localizados en zonas “bajas”, se otorgó un subsidio del 45% desde noviembre hasta diciembre. Luego, se recortó al 30% hasta febrero de este año y -a partir de marzo- será del 15%, informaron desde Aysa a Chequeado. 

Los incrementos en las facturas de agua

De acuerdo con datos de Aysa, la factura promedio mensual con impuesto para el servicio de agua y cloaca tendrán un aumento del 150% para los usuarios de las zonas alta y media, considerando que pasará de $1.032 en octubre a $2.578 en marzo de 2023 (zona alta) y de $926 a $2.313 (zona media). Mientras que el incremento para usuarios de zona baja será del 112%, al pasar de $869 a $1.844. 

En 2022, se produjo una primera quita de subsidios en noviembre, que representaron subas de entre 150% y 37%, según cada zona. 

Los incrementos en las facturas de electricidad 

A través de la Resolución 240 y de la Resolución 241, publicadas el 28 de febrero, el Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE) publicó los cuadros tarifarios de Edenor y Edesur para el 2023, con una readecuación de un 60% promedio que se aplicará en dos tramos: el primero en abril y el segundo en junio.

De acuerdo al ENRE, “la readecuación tarifaria implica para más del 70% de los usuarios residenciales (3.8 millones aproximadamente), comprendidos en las categorías R1 y R2 e incluidos 700 mil beneficiarios de tarifa social, un aumento en la factura media que no superaría $348 en el primer tramo y $421 en el segundo. En el caso de los usuarios con Tarifa General, el aumento promedio para abril 2023 se ubicará en un 34% promedio con respecto a los cuadros vigentes”.

Los incrementos en las facturas de gas

Por su parte, la factura promedio de gas de un cliente de ingresos altos (Nivel 1) tuvo un incrementó del 88% entre junio de 2022 y enero de este año, en el marco de la quita escalonada de tarifas, considerando que pasó de $1.650 a $3.105, según datos oficiales. Los usuarios de ingresos bajo o Tarifa Social (Nivel 2) no registraron variaciones en sus facturas de servicio; mientras que los de ingresos medios (Nivel 3) tuvieron una suba de 30% desde junio de 2022 hasta llegar a $2.146. 

Previo a esos incrementos, en marzo de 2022 se aplicó un incremento del 20% en factura promedio para usuarios residenciales por variaciones en la remuneración al servicio de transporte y distribución de gas. En junio del año pasado, además, se autorizó una suba del precio del gas en PIST (Punto de Ingreso al Sistema de Transporte) para los usuarios no beneficiarios de la Tarifa Social, que significó un impacto en factura promedio del 18,5%. 

Además, Enargas publicó los cuadros tarifarios para Gas Natural y GNC, que ya están vigentes desde el 1° de marzo. 

Los subsidios a la energía en 2022

Los subsidios a la energía totalizaron los US$11.862 millones en 2022, es decir, un 8% superior al monto en dólares registrado un año antes. Por su parte, medidos en pesos corrientes se incrementaron en un 51%, según datos de la consultora Economía y Energía, que dirige Nicolás Arceo, al que accedió Chequeado.

“Este valor se ubicó por debajo de las previsiones que se realizaron a comienzos de este año, cuando se pronosticaba un crecimiento más significativo del monto total de los subsidios a la energía”, se destaca en el informe. 

Agrega que: “La diferencia entre lo proyectado y lo efectivamente devengado responde, fundamentalmente, a 3 factores. Por un lado, a lo largo de los últimos meses se observa un retraso en el pago de los subsidios por parte del Estado. En segundo lugar, se verificó una mejora en la hidraulicidad superior a la prevista, que redundó en un menor costo monómico de generación. Por último, la disminución de los precios internacionales de los hidrocarburos respecto de los inicialmente previstos permitió disminuir el nivel de subsidios al sector energético”.

Emilio Apud, ex secretario de Energía del gobierno de la Alianza destacó en diálogo con Chequeado indicó que “la suba en el nivel de subsidios registrada el año pasado es circunstancial y está relacionada con el incremento de los costos de importación de la energía a partir de la suba de precios de los commodities energéticos (como gas) provocada por la guerra entre Ucrania y Rusia”. 

El especialista, que integra la Fundación Libertad y Progreso, alertó que la segmentación energética permitirá bajar el porcentaje de subsidios, del 70% al 50%, pero aún así “continúan en un nivel alto”.  

Actualización 03/03/2023: la nota fue actualizada con la última información disponible.