Aníbal Fernández contra Nik: qué delitos podría haber cometido el ministro de Seguridad con su tuit

El 10 de octubre último, el ministro de Seguridad de la Nación, Aníbal Fernández, le respondió al dibujante Cristian Dzwonik, alias “Nik”, en Twitter: “Muchas escuelas y colegios de la CABA reciben subsidios del estado y está bien. Por ejemplo la escuela/colegio ORT. ¿La conoces? Si que la conoces… O querés que te haga un dibujito? Excelente escuela lo garantizo. Repito… ¿Lo conoces?” (sic).

El tuit del funcionario fue en respuesta a una publicación del dibujante en la que criticó la distribución de efectivo y electrodomésticos por parte del Frente de Todos en medio del proceso electoral: “Regalar heladeras, garrafas, viajes de egresados, planes, platita, lo que sea, lo que venga. Qué triste no escuchar nunca la palabra TRABAJO, ESFUERZO, FUTURO, PORVENIR. Los va a volver a derrotar la DIGNIDAD del pueblo”.

Rápidamente, la respuesta de Fernández fue objeto de críticas y repudiada por toda la oposición (acá y acá). También contó con el rechazo del Foro de Periodismo Argentina (FOPEA) y la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (ADEPA), desde donde calificaron el mensaje de Fernández como “especialmente grave, máxime por provenir de quien debe velar por la seguridad de los ciudadanos”.

“La redacción es muy clarita. No dice otra cosa que un debate que estaba manteniendo con él por el tema de las subvenciones. Ese debate se agota ahí mismo. Cuando esto sucedió, me dicen que él habría dicho que sintió que es una amenaza para sus hijos, esto es muy grave. No se me caen los anillos, me parece que es obligatorio tener que aclarar esas cosas porque están los chicos. Para mí los hijos, las mujeres, las casas, son templos. Si él lo tomó así, ¿sabe lo que hace un caballero? Pide disculpas”, se defendió Fernández en declaraciones a los medios.

Cuáles podrían ser los delitos

Desde la organización Poder Ciudadano, a cargo del capítulo local de Transparencia Internacional, especificaron a Chequeado qué normativa podría haber incumplido el ministro de Seguridad de la Nación.

En primer lugar, se podría estar infringiendo el artículo 52 del Código Contravencional de la Ciudad de Buenos Aires, que penaliza a quien “intimida u hostiga de modo amenazante o maltrata físicamente a otro, siempre que el hecho no constituya delito”. La sanción que prevé ese artículo va de 1 a 5 días de trabajo de utilidad pública -es decir, trabajos comunitarios-, una multa de $200 a $1.000 o 1 a 5 días de arresto.

Otro delito podría ser el de coacción agravada -que está establecido en el Código Penal de la Nación-, “dado que un juez federal podría interpretar que el funcionario nacional tuiteó lo que tuiteó para que Nik dejara de hacer algo, por ejemplo, criticar al oficialismo”, explicó a este medio Pablo Secchi, director ejecutivo de Poder Ciudadano.

“Será reprimido con prisión de 6 meses a 2 años el que hiciere uso de amenazas para alarmar o amedrentar a una o más personas. (…) Será reprimido con prisión o reclusión de 2 a 4 años el que hiciere uso de amenazas con el propósito de obligar a otro a hacer, no hacer o tolerar algo contra su voluntad”, establece el artículo 149 bis del Código.

“En este caso, la denuncia podría ser realizada por Nik o por su empleador [N. de la R.: La Nación SA], porque también está en juego el derecho a la libertad de expresión”, agregó Secchi.