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Esta nota tiene más de un año

Son falsas las afirmaciones de Chinda Brandolino sobre el coronavirus emitidas en Plaza de Mayo

Si tenés sólo unos segundos, leé estas líneas:
  • Circula en Facebook un video en el que la médica difunde información falsa sobre los diagnósticos de muerte por COVID-19, los testeos y la seguridad de las vacunas.
  • Tanto el Ministerio de Salud de la Nación como la Organización Mundial de la Salud (OMS) detallan los procedimientos en los registros de fallecimientos de personas por COVID-19 y los métodos de detección del virus son eficaces.
  • Además, las vacunas autorizadas en la Argentina son seguras y no modifican el ADN humano, como afirma falsamente Brandolino.

Circula en Facebook un video de Chinda Brandolino, una médica que suele viralizar desinformaciones sobre el nuevo coronavirus, hablando públicamente el último 17 de abril en una manifestación en Plaza de Mayo. Allí, entre otras expresiones, la médica plantea que “la razón de las muertes es que se diagnostica de COVID a toda virosis de enfermedad respiratoria con un método que no sirve, que da todos falsos positivos”.

Además, Brandolino señala que “las vacunas son peligrosísimas” y que “los que sobrevivan serán manejados en su ADN por nanopartículas”. Sin embargo, todo esto es falso. El video fue compartido 112 veces en Facebook, según los datos que proporciona la red social.

No se diagnostica COVID-19 a toda enfermedad respiratoria

Como se explicó en esta nota, un fallecimiento se considera muerte por coronavirus cuando “resulta de una enfermedad clínicamente compatible con COVID-19 en una persona en la que se sospecha y/o está confirmada la enfermedad”, independientemente del estado de salud previo de la persona, tal como explica este documento del Ministerio de Salud de la Nación.

El Ministerio agrega: “Si la enfermedad por COVID-19 se produce en una persona con enfermedades preexistentes que pudieran verse agravadas por el curso de esta infección, deben ser atribuidas a COVID-19 y no a la enfermedad previa”.

Según explica el instructivo, “el registro se debe hacer ‘como de costumbre’ y anotar ‘Enfermedad por COVID-19’ en la línea más baja utilizada para que la misma ocupe el lugar de causa originaria o causa básica de muerte”, es decir, la causa que originó todo el cuadro que desencadenó en el fallecimiento del paciente, en el caso de que así sea.

Sin embargo, se detalla que “quedan exceptuadas situaciones donde, a pesar de la existencia de COVID-19, interviene otra causa de muerte que no tiene ninguna relación con el SARS-CoV-2 como un accidente de tránsito, otra causa externa o situaciones clínicas sin conexión con COVID-19, o casos en los que existe un período de ausencia de enfermedad y recuperación del COVID-19 entre la enfermedad y la muerte”.

La guía de la cartera de salud nacional se elaboró siguiendo las Directrices de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Por lo tanto, la forma en que se determinan los motivos de una defunción en este contexto en nuestro país no es distinta a la recomendada a nivel internacional.

La OMS es tajante en sus definiciones: “Una muerte por COVID-19 se define para fines de vigilancia como una muerte resultante de una enfermedad clínicamente compatible, en un caso COVID-19 probable o confirmado, a menos que exista una causa alternativa de muerte que no pueda estar relacionada con la enfermedad COVID (por ejemplo, un traumatismo)”, y agrega que “una muerte por COVID-19 no puede atribuirse a otra enfermedad (por ejemplo, cáncer) y debe contarse independientemente de las condiciones preexistentes que se sospechan que desencadenan un curso grave de COVID-19”.

El test de PCR es el más confiable para detectar el coronavirus

Como explicó Chequeado en esta nota, a pesar de las falsas declaraciones de Brandolino sobre los métodos de detección del virus que “dan todos falsos positivos”, los test de PCR (reacción en cadena de la polimerasa) son los más eficaces para la detección del virus.

Estos test miden la presencia de ácido nucleico del virus SARS-CoV-2 -una parte constituyente del mismo- en una muestra para saber si una persona está o no infectada. La muestra se toma de exudado nasofaríngeo: un hisopado en la nariz y en la garganta porque es donde hay más cantidad de virus.

Los laboratorios que realizan este tipo de test se encuentran habilitados por el Ministerio de Salud de la Nación, cuentan con equipos adecuados, reactivos aprobados por la ANMAT y profesionales capacitados para procesar e interpretar los resultados.

“Cuando haces PCR, el problema es tener falsos negativos más que tener falsos positivos. Es más probable tener falsos negativos porque extraer ADN es un poco complicado (extraerlo del paciente, llevarlo al laboratorio, procesarlo) y es posible que el ADN se degrade o algún paso falle y dé negativo porque algo falló antes”, explicó al sitio de verificación español Maldito Bulo la bióloga Benedetta Bolognesi, del Instituto de Bioingeniería IBEC de Barcelona.

Las pruebas de PCR son las más eficaces y son las recomendadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS). De todas maneras, el Ministerio de Salud de la Nación aclara que, incluso si el hisopado no detecta la presencia del virus SARS-CoV-2, es necesario permanecer aislado unos días.

Esto se da porque, aunque una persona reciba el resultado negativo de un testeo y no presente síntomas, si estuvo en contacto estrecho con una persona positiva puede desarrollar los síntomas posteriormente. Y, además, existe la posibilidad de que se trate de un falso negativo por estar cursando un estadío demasiado temprano de la infección.

Las vacunas son seguras y no modifican el ADN

Finalmente, respecto a las falsas afirmaciones de Brandolino en las que sostiene que la vacuna contra el coronavirus “es peligrosísima” y que “los que sobrevivan, serán manejados en su ADN por nanopartículas”, Chequeado explicó en esta nota la eficacia y seguridad de las vacunas.

Las 3 vacunas contra el coronavirus disponibles en el país y autorizadas por la ANMAT y el Ministerio de Salud –Sputnik V, AstraZeneca/Oxford y Sinopharm- son seguras y eficaces contra el coronavirus. El nivel de eficacia, es decir, de reducción del riesgo de tener una enfermedad sintomática, varía entre el 70 y el 92%, según la vacuna. Pero todas las que se están aplicando son altamente eficaces (entre un 95% y 100%) en reducir la posibilidad de tener una enfermedad grave que termine con una hospitalización y muerte.

Aunque la vacunación también puede traer efectos secundarios, suelen ser muy leves y los beneficios de la vacunación son tan notables que los superan con creces. En la Argentina, según el último informe de vigilancia de seguridad en vacunas, el 99,2% de los eventos reportados luego de la vacunación fueron leves y moderados. Los más frecuentes fueron dolor y reacciones en el sitio de la aplicación de la vacuna, cefalea, fiebre, fatiga, mareos y náuseas.

Además, tal como verificó Chequeado en distintas oportunidades (ver acá y acá), las vacunas no modifican el ADN humano.

 

Si querés estar mejor informado sobre la pandemia, entrá al Especial Coronavirus.

Este chequeo es parte de la iniciativa Third Party Fact-checker de Facebook en la Argentina. En los casos de fotos y videos trabajamos con imágenes trucadas o sacadas de contexto y siempre analizamos en conjunto las imágenes junto con el texto con el que fueron presentadas.

Fecha de publicación original: 26/04/2021

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