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Cuatro datos sobre los Estados Unidos que recibe Trump

Luego de obtener más electores que Hillary Clinton en la votación de noviembre último y de que el colegio electoral lo haya electo formalmente, Donald Trump asumió hoy como presidente de los Estados Unidos. A continuación, cuatro datos sobre el país que recibe, en relación a ejes de su campaña.

1. Comercio internacional

En varias oportunidades, Trump se refirió al déficit comercial norteamericano, e hizo foco en casos puntuales como los intercambios del país con China o México. Los Estados Unidos tienen un resultado negativo en su comercio internacional todos los años desde 1976 a la actualidad. En 2015, el déficit fue de US$ 500 mil millones, suma alrededor de la que se ubicó durante toda la presidencia de Barack Obama. Los datos de 2016 llegan hasta noviembre y ya acumulan US$ 454 mil millones.

China, el principal socio comercial, es el país con el que los Estados Unidos tienen el mayor déficit. Lo siguen Japón, Alemania, México e Irlanda. En la vereda opuesta, el intercambio más positivo se da con Hong Kong, Holanda y los Emiratos Árabes Unidos. La Argentina, Brasil y Chile también están en el top ten de países con mejor resultado para los Estados Unidos.

2. Desempleo

Otro área sobre la que Trump habló repetidamente en la campaña es el empleo, centrado en la creación de puestos de trabajo en el país. Una vez electo, por ejemplo, publicó una serie de tuits en la que anticipaba que aumentaría los impuestos para las compañías que despidieran trabajadores o que decidieran abrir una nueva fábrica o planta en otro país. En esa línea, durante su primera conferencia de prensa resaltó: “Ford recientemente anunció que frenaron los planes para construir una planta en Mexico por mil millones de dólares y que se están mudando a Michigan”.

Pero la tasa de desempleo en los Estados Unidos tiene una tendencia descendente desde hace más de cinco años. Luego de un importante incremento entre 2007 y 2009, cuando la proporción de personas desempleadas se duplicó en el contexto de la crisis internacional, la desocupación cayó y en diciembre de 2016 alcanzó el 4,7%, la cifra más baja para un diciembre desde 2006.

3. Gasto en salud

En 2010, el entonces presidente Obama emprendió una reforma del sistema de salud estadounidense a través de la Ley de Cuidados de la Salud Asequibles, denominada popularmente como “Obamacare”. Trump criticó la medida, por ejemplo, en su sitio de campaña, en el que señaló que trajo como resultado “costos desmedidos, (…) pagos más elevados, menos competencia y menos opciones”.

Los datos oficiales muestran que el gasto en Salud de 2015, último año con información, representa el 17,8% del Producto Bruto Interno (PBI) del país, el porcentaje más alto al menos desde la década del 60.

4. Migración

Trump llegó a la Casa Blanca con posiciones duras sobre la inmigración. Además de la promesa de construir un muro en la frontera con México, en su sitio electoral propuso “establecer nuevos controles a la inmigración para incrementar los salarios y asegurarse que los empleos abiertos sean ofrecidos en primer lugar a trabajadores estadounidenses”.

En 2013, último dato de la Oficina de Censos de los Estados Unidos, vivían allí 40 millones de personas que habían nacido en otro país. Se trata de un 13% de la población, aunque 18 millones se habían naturalizado como estadounidenses.

Estos datos no tienen en cuenta si las personas están en el país de forma legal o ilegal. Sobre la problemática, en 2012 el Departamento de Seguridad Nacional estimó que había 11,4 millones de inmigrantes indocumentados en los Estados Unidos, cifra que se asemeja a diversas estimaciones alternativas.

Distintos especialistas señalaron al sitio Politifact que el número de inmigrantes indocumentados no crece porque hay un flujo constante de familias que llegan y que se van del país, y agregaron que “es un inusual grupo demográfico que no puede crecer por los nacimientos porque los chicos que nacen en los Estados Unidos son ciudadanos estadounidenses”.

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Comentarios

  • Martin Lagos23 de enero de 2017 a las 8:21 pmLo que revela el déficit comercial no es que los EE.UU sean poco competitivos, sino que gracias a la confianza que inspiran, el resto del mundo les financia (a tasas bajísimas) y gasto agregado mayor que su PIB. O sea que aunque las inversiones de los EE.UU. en el exterior son enormes, las inversiones de los extranjeros en los EE.UU. son todavía más grandes. Es un importador neto de capitales.

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