Skip to content
Esta nota tiene más de un año

Qué implica suspender en forma temporal las patentes de las vacunas contra el coronavirus

Si tenés sólo unos segundos, leé estas líneas:
  • Estados Unidos realizó la última semana un anuncio “histórico”: el país apoyará la suspensión temporal de patentes sobre las vacunas contra la COVID-19 que se discute en el seno de la Organización Mundial del Comercio (OMC).
  • Una patente otorga 20 años de exclusividad sobre un producto o un procedimiento. La suspensión implica que cualquiera pueda hacer uso de la tecnología para producir vacunas contra el coronavirus, sin riesgo de sanciones.
  • En esta nota, te explicamos cómo impacta la iniciativa en la Argentina y por qué las negociaciones no serán sencillas.

“Esta es una crisis de salud global y las extraordinarias circunstancias que rodean a la pandemia requieren de medidas excepcionales”. Con esta frase, los Estados Unidos -a través de su representante de Comercio, Katherine Tai- realizó la última semana un anuncio “histórico”: el país apoyará la suspensión temporal de patentes sobre las vacunas contra la COVID-19 que se discute en el seno de la Organización Mundial del Comercio (OMC).

En octubre de 2020, Sudáfrica e India propusieron una exención de los acuerdos multilaterales de la OMC sobre los derechos de propiedad intelectual de medicamentos y productos sanitarios relacionados con el diagnóstico y tratamiento de la COVID-19. 

La iniciativa logró el apoyo de un centenar de los 164 miembros de la OMC -entre ellos, la Argentina-, pero se topó con el rechazo inicial de los países que son sede de las grandes empresas farmacéuticas, como Estados Unidos, la Unión Europea, el Reino Unido, Suiza y Japón. 

Sin embargo, tras el giro de 180° de la Casa Blanca, ahora con Joe Biden (Partido Demócrata) a cargo, más países estarían dispuestos a cambiar su posición. “Nuestra prioridad es aumentar la producción para lograr la vacunación mundial. Al mismo tiempo, estamos abiertos a discutir cualquier otra solución eficaz y pragmática. En este contexto, estamos dispuestos a evaluar cómo la propuesta de los Estados Unidos podría ayudar a lograr ese objetivo”, sostuvo la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.

En esta nota te contamos qué pasa con las negociaciones en la OMC, en qué consiste una patente y qué implica suspender los derechos de propiedad intelectual de las vacunas.

¿Qué es una patente?

Una patente es un derecho exclusivo que se concede sobre una invención, define la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI). Para obtener una patente, hay que presentar una solicitud en la que se divulga públicamente información técnica acerca de la invención. El titular de la patente puede autorizar o conceder una licencia a terceros para que utilicen su invención, de conformidad con condiciones mutuamente convenidas.

Además, no existe una “patente internacional”, ya que estos derechos son territoriales, sólo tienen validez en el país o la región en los que se ha presentado la solicitud y se ha concedido la patente, de conformidad con la normativa de ese país o región.

“Una patente otorga 20 años de exclusividad sobre un producto o procedimiento. Esto quiere decir que, por estos 20 años, solamente el titular de la patente va a poder comercializar, usar, fabricar o importar lo que está patentado”, explicó a Chequeado la abogada especialista en Acceso a Medicamentos y Propiedad Intelectual Lorena Di Giano, directora de la Fundación Grupo Efecto Positivo, que lleva adelante en la Argentina la campaña “Liberen las patentes”. 

Además, la especialista remarcó que en el caso de los productos farmacéuticos la mayoría de las patentes pertenecen a los Estados Unidos, Europa y Japón.

¿Qué implica la suspensión de las patentes?

La suspensión implica que esta exclusividad deja de tener efecto por un tiempo determinado y que cualquier otra empresa pública o privada en el mundo pueda hacer uso de la tecnología para producir vacunas contra el coronavirus, sin riesgo de sanciones. Los promotores de la iniciativa destacan la importancia de que los países menos desarrollados puedan ser autosuficientes y desarrollar sistemas productivos propios.

Lo que se busca es proteger a los países que puedan producir vacunas del ataque judicial de las empresas que tienen solicitudes o patentes ya otorgadas. Estos derechos exclusivos se terminan haciendo efectivos en litigios: A tiene una patente y B produce lo que yo tengo patentado, entonces hay una demanda. En definitiva, lo que estamos tratando de hacer es que temporalmente ese tipo de litigio no se pueda dar y que haya libertad para que gobiernos puedan hacerse de las tecnologías”, sostuvo Di Giano. Este mecanismo de apertura de patentes también beneficiaría a las empresas privadas.

La anterior administración estadounidense, a cargo de Donald Trump (Partido Republicano),  estaba en contra de liberar patentes, ya que consideraba que ello supuestamente ahogaría la innovación en las empresas farmacéuticas, al quitarles el incentivo de realizar enormes inversiones en investigación y desarrollo. 

Pero lo cierto es que la mayoría de las vacunas contra la COVID-19 autorizadas para su uso de emergencia contaron con fondos públicos para su desarrollo. Por ejemplo, en el caso de  la vacuna de Pfizer recibió una subvención de US$ 375 millones del Gobierno alemán a través de su socio BioNTech, y un préstamo de Є 100 millones por parte del Banco Europeo de Inversiones. 

¿Hay laboratorios con capacidad para empezar a producir más vacunas si se suspenden las licencias? 

Desde el sector farmacéutico argumentan que no hay muchas empresas ni países con capacidad y tecnología para empezar a producir vacunas, al menos, de inmediato. 

“Las demandas de liberación de las patentes relacionadas con las vacunas no aumentarán el suministro en ni una sola dosis a corto plazo, porque pasan por alto la complejidad de la fabricación de las vacunas e ignoran hasta qué punto los fabricantes de vacunas y las empresas farmacéuticas y los países en desarrollo ya cooperan para aumentar la capacidad de vacunación”, dijo en una entrevista a DW Thomas Cueni, director General de la Federación Internacional de Asociaciones y Fabricantes de Productos Farmacéuticos.

En todo caso, los impulsores de la medida consideran que cuanto antes se empiece a trabajar, mejor: en la actualidad hay 130 países en el mundo que no recibieron ni una sola dosis, según António Guterres, Secretario General de las Naciones Unidas.  

“En la Argentina ya hay acuerdos para producir vacunas y además tenemos la Red de Laboratorios Públicos, que tiene una planta de biológicos que podría adaptarse. También Brasil tiene mucha capacidad para producir vacunas. Y Chile está en negociaciones para fabricar la vacuna Sinovac”, asegura Di Giano sobre la capacidad y oportunidad que tiene la región.

¿Cómo impacta esto en la Argentina?

“La declaración de Joe Biden de acompañar el pedido de liberación de patentes que inició en el mes de octubre India y Sudáfrica, acompañado por un conjunto de países entre los que se encuentra la Argentina, es un hito histórico. Jamás los Estados Unidos ha apoyado una solicitud de ese tipo. Esto marca claramente una posibilidad y oportunidad para todos los países que venimos solicitando esta liberación de patentes”, manifestó Sonia Tarragona, jefa de Gabinete del Ministerio de Salud de la Nación.  

Sin embargo, tenemos que tener una claridad: esto no implica todavía nada en los hechos. Hay 2 procesos que tienen que ocurrir: que esta posición de los Estados Unidos se refleje en los textos que hoy estamos discutiendo en la OMC. Eso no va ser un proceso sencillo. Y luego necesitamos la internalización de ese texto a las normas locales para que eso efectivamente se traduzca en una posibilidad concreta de transferencia de tecnología que permitiría a los países que tenemos capacidad, avanzar en la producción local de vacunas”, advirtió la funcionaria.

¿Cómo siguen las negociaciones?

Se espera que la decisión adoptada por los Estados Unidos obligue a todos los demás países a reposicionarse, especialmente a la Unión Europea. La industria farmacéutica criticó el anuncio, en medio de fuertes caídas de las acciones de los fabricantes de vacunas contra el COVID-19, como Moderna, Novavax y la alemana BioNTech.

Sudáfrica e India anunciaron que en la segunda quincena de mayo presentarán una revisión del texto de la propuesta para buscar puntos de acuerdo con todos los miembros de la OMC y así seguir negociando con todos. 

Los países miembros se reunirán a principios de junio para decidir si están de acuerdo con la propuesta o si necesitan más tiempo para llegar a un acuerdo. Las medidas que se toman en la OMC funcionan por consenso y tienen que estar a favor los 164 miembros para que se produzca, en este caso, una exención temporal de los acuerdos multilaterales, como es la liberación de patentes.

El Podcast de Chequeado es un programa diario donde contamos historias con datos. Podés suscribirte en SpotifyApple Podcasts o Google Podcasts.

Si querés estar mejor informado sobre la pandemia, entrá al Especial Coronavirus.

Temas

Comentarios

Valoramos mucho la opinión de nuestra comunidad de lectores y siempre estamos a favor del debate y del intercambio. Por eso es importante para nosotros generar un espacio de respeto y cuidado, por lo que por favor tené en cuenta que no publicaremos comentarios con insultos, agresiones o mensajes de odio, desinformaciones que pudieran resultar peligrosas para otros, información personal, o promoción o venta de productos.

Muchas gracias

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *