Coronavirus: cómo es la reapertura de peluquerías y por qué tienen riesgo alto

En algunas provincias del país empezaron a funcionar nuevamente las peluquerías. Es el caso de Corrientes, Jujuy, La Pampa, Misiones, Mendoza y San Juan. Dentro de la tercera etapa de la cuarentena, que se inició el 26 de abril último, las provincias pueden rehabilitar actividades, mientras cumplan con los requisitos establecidos por el gobierno nacional (en aglomerados de menos de 500 mil personas y sin transmisión comunitarias del virus, entre otros requisitos).

Para volver a funcionar, las peluquerías, como otros rubros, deben tener protocolos que minimicen los riesgos de contagio para trabajadores y clientes. Cada provincia tiene su propio protocolo.

El caso de las peluquerías es diferente a otros tipos de comercios, por el riesgo que genera la cercanía entre los peluqueros y los clientes. El nuevo coronavirus se transmite a través de gotas que salen de la nariz o de la boca de una persona infectada, y pueden entrar en el cuerpo de otra, ya sea porque las recibe directamente o porque las toca y luego se toca la cara con esas gotas.

Por eso las peluquerías fueron clasificadas como uno de los rubros de mayor riesgo en Italia y otros países que sufrieron intensamente por el nuevo coronavirus. Para hacer la clasificación que incluye a las peluquerías en la categoría de riesgo, el Instituto Nacional para la Seguridad en el Trabajo de Italia (INAIL) detalló el criterio que utiliza en base a tres variables: la exposición, la probabilidad de entrar en contacto con fuentes de contagio al realizar actividades laborales específicas; la proximidad, cuánta distancia permite el trabajo realizado, y la agregación, si el trabajo implica el contacto con otros sectores además de los trabajadores de la empresa.

Entre los otros grupos que incluye el INAIL en la categoría de mayor riesgo están las agencias fúnebres, las fuerzas de seguridad, la asistencia sanitaria y social, los farmacéuticos y los atletas profesionales. En la Argentina no hay por ahora un análisis público por sector de este tipo.

Los protocolos que se implementaron en las diferentes provincias argentinas para minimizar los riesgos de contagio en peluquerías incluyen cuestiones como usar barbijos, delantales y guantes, en lo posible usar material descartable y ,cuando no sea posible, desinfectarlo, mantener los espacios bien ventilados y funcionar con turnos para tener a la menor cantidad de gente posible dentro de los locales (cada uno de los protocolos específicos pueden consultarse acá Corrientes, Jujuy, La Pampa, Misiones, Mendoza y San Juan).

Según un relevamiento de 2016 la empresa L’Oreal realizó, junto con la consultora TNS, hay 42.000 peluquerías en el país, que representan alrededor de 120 mil puestos de trabajo. No hay datos oficiales publicados específicamente sobre peluquerías.